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Al salir del hospital volvemos a casa, un niño... ¡Un pequeño Christian! No me lo creo. Ha pasado tan rápido que es difícil de asimilar. Todo este tiempo fue muy rápido, desde que nos conocimos hasta cuando nos casamos, y ahora tendremos a un niño... Wow. Mi vida ha cambiado muy rápidamente, es increíble.

La sonrisa en la cara de Christian es radiante. Me enloquece verlo así. Es reconfortante saber que esta feliz con la noticia. Al llegar al estacionamiento del Escala me abraza como puede y me besa.

-Me haces feliz nena... Muy feliz.

-Y tu a mi... Eres mi felicidad personificada, Y muy pronto tendrás a un clon...

-Un pequeño Grey corriendo por todos lados... Ya me lo imagino en la casa nueva.

La imagen de un pequeño corriendo por el prado me hace recordar a aquel sueño que tuve hace un tiempo... Mucho tiempo. Pero el cual me dejo muy marcada. Recuerdo cada momento que soñé con el y con Christian, y la pesadilla... Prefiero no recordarla. Mientras subimos al elevador trato de recordar su nombre...

-¿En que piensa, señora Grey?

Raymond.

-Solo... Recordaba un sueño que tuve hace un tiempo.

Su nombre era Raymond. El niño de mi sueño tenia el mismo nombre que mi padre. Y seguramente el fue el primer bebe que... Una punzada de dolor atraviesa mi pecho y se me nubla la vista. Me apoyo en el lado del ascensor.

-¿Ana?

Veo manchas negras. Parpadeo constantemente intentando sacarlas pero no se van. Siento que Christian me agarra, el elevador se detiene y el me saca. Siento que camino pero no lo veo. Es una sensación muy extraña... Luego estoy acostada pero no se donde. Las imágenes del pequeño gritando y riendo vienen a mi mente. Sacalo. Ahora. No pienses en eso.

-¿Ana? ¿que pasa?

Finalmente reacciono. Mi vista vuelve. Lo primero que veo es a Christian asustado. Sin dudarlo lo abrazo mostrándole que estoy bien. Veo que estamos en nuestra habitación, en la cama, precisamente.

-¿Que ocurrió? ¿que sentiste? -pregunta mi amo del universo

-Es... Recordé un sueño que tuve cuando estaba embarazada... La primera vez.. -su mirada se apaga. Oh dios... E igual de confundida continuó- estabas tu y un pequeño llamado Ray corriendo por el prado... Fue... Lindo... Pero luego tuve una pesadilla y no fue para nada bonita...

El me abraza en señal de protección, y yo le correspondo de igual forma.

-Si quieres le ponemos así... -murmura, pero me niego

-No. El se llamaba Ray...tu elige es de este pequeñin... -pongo su mano en mi vientre, el inmediatamente se olvida de todo y le pone toda la atención a su hijo, que ya ha empezado a golpearme internamente.- ¿ves sus manitos? -el asiente sin dejar de mirar, por donde se ve un pequeño bulto que se mueve- tocalo... -el pone su dedo donde el bulto lo señala. Es... Increíble.

-¿Ves lo mucho que te quiere, sin salir siquiera?

El vuelve a asentir. Atesorare esto para siempre...

.

Tiempo después...

-La señora Grey esta entrando en trabajo de parto, señor Grey. ¡Por favor calmese! -gruñe la doctora Greene

-Pero...

-Christian... -le llamo- has caso..

Serán las cuatro de la mañana... Estoy agotada. Me duele la vag*na y quiero ver a mi bebe. Antes de venir Christian me regaño por creer que me había meado en la cama, pero en realidad había roto fuente. Fue extraño y un poco divertido...

2-No escuches a la tentación.© Segunda temporada -terminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora