→Capitulo VIII

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El último día llegó y por más ganas que tenía de salir de ese lugar no quería, la habitación estaba caliente y no quería congelarme.

-Emma ¿has visto a Nadia?
-No ¿por que?
-Es que mi mama me acaba de decir que si puedo ir.
-¿En serio?
-Si.
-Genial -sonreí-. Si quieres le digo cuando la vea.
-Vale -sonrió-. Nos vemos antes de vacaciones.
-Si. Que estés bien -besé su mejilla.
-Adiós.

Kelly salió de la habitación y luego lo hice yo. Bajé por el ascensor y Liam estaba ahí. Se acercó a mi.

-¿Que harás hoy hermosa?
-Creo que dormiré o saldré con mi familia.
-Ow...
-¿Por que?
-Nada, quería pasar la tarde contigo.
-Ah -sonreí-. Pues si quieres más tarde pasas a mi casa.
-Vale -sonrió.
-Por cierto ¿has visto a mi hermana?
-No.
-Ay... Vale. Creo que me iré.
-¿Ya?
-Si.
-¿Te encuentras bien amor?
-Si ¿por que?
-No se... Te noto diferente.
-Ah... Pues estoy igual que siempre -sonreí.

Realmente estaba algo fría con Liam, eso de que él me dejara casi toda una semana sola para estar "estudiando" con Sophia me ponía muy furiosa y a la vez celosa.

-Bueno ahora si me voy. Nos vemos más tarde, claro, si vienes a mi casa.
-Si, yo te aviso ¿va?
-Vale... Adiós -besé sus labios.
-Adiós linda.

Me puse los guantes, cogí mi maleta y salí de la portería. Vi el carro rojo de mi mama y me dirigí hacia él. Abrí la puerta y entré en él.

-Hola mama -sonreí.
-Hola hija mía ¿que tal estas?
-Muy bien ¿que tal tu?
-Bien hija, con ganas de ver a tu hermana que nada que aparece.
-Oh... ¿Por que no la llamas al celular?
-¿Que crees que he hecho?
-Oh, claro...

Esperamos por veinte minutos más y vi cuando Liam salió. Iba camino hacia su carro, cuando volteó a mirar y vio el nuestro. Golpeó la ventana de mi mama y ella abrió.

-Hola Liam -sonrió.
-Hola Sarah ¿qué tal has estado?
-Muy bien, echando de menos a mis hijas.
-Si -rió.
-¿No quieres subir?
-No, mi mama ya está allí -señaló el carro plateado.
-Liam, no es por echarte, pero sería mejor que te subieras al carro antes de que te enfermes.
-Vale.
-Dale saludes de mi parte.
-Si, claro que si -sonrió-. Adiós.
-Adiós Liam, que estés bien.
-Gracias, igual.

Me miró, sonrió y luego se fue. Vi como se alejó y entró a su carro.

-¿Tu y Liam terminaron?
-No ¿por que?
-Ah, no se, lo noté distante.
-Oh... No es nada, sólo está cansado.
-Bueno, por lo menos ya salieron a vacaciones y puede descansar.
-Si... Oh por cierto mama, Nadia me invitó a su casa en Mullingar.
-¿Quien es Nadia?
-La chica nueva de la que te hable ¿la recuerdas?
-Ah ¿ella? Si, la recuerdo. ¿Para que vayas cuando?
-La semana siguiente a la de Navidad.
-Oh, claro que puedes.
-Gracias mama -besé su mejilla.
-De nada hija. Ay ¿que se habrá hecho tu hermana?
-No tengo idea...
-La volveré a llamar -cogió su celular y volvió a marcar-. ¿Dónde estas?... No, ven ya para acá, he estado esperando por más de media hora con tu hermana... Bueno, te quiero aquí en cinco minutos o me voy... Vale, aquí te espero. Adiós.
-¿Que dijo?
-Que se está despidiendo de sus amigas.
-Oh...

Esperamos cinco minutos más y vimos a mi hermana salir por la portería.

-Gracias al cielo, ya era hora Scar -dije cuando se sentó en el asiento trasero.
-Perdón, no había visto la hora.

Mi mama arrancó y a los pocos instantes ya estábamos en casa.

»¿Al final que te dijeron?
«Ah, que si.
»GENIAL.
«Por cierto, a Kelly también la dejaron.
»¿En serio?
«Si.
»Que increíble.
«Si.

They don't know about us - Tell me a lieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora