They don't know about us - Tell me a lie

→Capítulo XXXIV

Dejé el iPhone en su lugar y volví a dormir. Pocas horas después me desperté con el sonido del timbre. Me iba a levantar, pero ya habían abierto la puerta. Me quedé mirando al techo y escuché la voz de Liam.

-Hola Sarah.
-Hola Liam ¿que tal has estado?
-Muy bien gracias.
-¿Y a que se debe tu visita?
-¿Está Emma?
-Si, pero no se si ya se haya despertado.
-Oh...
-Ya miro, espera un momento.
-Vale.

Sentí como mi mamá subía las escaleras y me hice la dormida. Abrió la puerta y la cerró al verme  "dormir". Bajó las escaleras y se dirigió a la puerta.

-No Liam, sigue dormida.
-Vale ¿puedes decirle que vine?
-Si, yo le digo.
-Vale. Gracias, adiós.
-Adiós Liam, que estés bien.
Mi madre cerró la puerta y el silencio reinó en la casa. Poco después de que mi madre hubiese cerrado la puerta, sonaron en mi ventana unos pequeños golpes. Me levanté después de pensármelo unos segundos, corrí la cortina y vi a Liam sonriente esperando a que abriera. Abrí la ventana y él pasó.

-Sabía que estabas despierta.
-Sinceramente, me acabo de despertar -dije cerrando la ventana y dejando la cortina en su posición inicial.
-¿Por los golpes en la ventana?
-Mjm.
-Oh, perdona.
-No te preocupes -sonreí.
-Entonces... -dijo.
-Entonces... -dije.
-En serio lo siento mucho, no era mi intención alterarme de esa forma, es que me dolió que no me dijeras que ibas a salir con Dan.
-Siento no habértelo dicho, pero no quería que te pusieras celoso ni nada de eso; a parte que tu tampoco me dijiste que ibas a salir con Sophia, así que creo que estamos a pases ¿no?
-Si, supongo...
-¿Que te parece si desde este momento dejamos de mentirnos el uno al otro? -propuse.
-Me parece bien -sonrió y se acercó a mi. Me cogió la cara con sus manos y luego depositó un cálido y suave beso en mis labios-. Como extrañaba besarte -dijo después de separar sus labios de los míos.
-Sólo fue un día.
-Fueron las 24 horas más largas de mi vida.
-Perdona.
Hablamos por unos minutos más y luego él salió por la ventana. Volví a la cama y poco después mi mamá entró para decirme que el desayuno ya estaba listo. Me levanté de la cama, me puse unas pantuflas y bajé al comedor. Saludé a mis papás y a mi hermana y me senté en el puesto que solía hacerlo.
-Por cierto hija -dijo mi mamá-, Liam vino esta mañana.
-Oh si, ya hablé con él mamá -sonreí.
-Vale.

Terminé de desayunar y volví a mi habitación. Me acosté de nuevo y prendí el televisor. No presentaban nada interesante así que me puse a jugar FIFA con mi hermana.
La mañana pasó demasiado rápido y después de almorzar, Nadia tocó el timbre de mi casa.

-Hola -dije al abrir y la abracé.
-Hola Emma ¿cómo estas?
-Bien ¿tu que tal?
-Ahí voy -hizo una media sonrisa.
-¿Está todo bien?
-Pues... -hizo muecas y luego negó con la cabeza.
-Pasa -dije.
-Gracias.

Subimos a mi habitación y nos sentamos en el suelo.

-¿Entonces... Por qué fue que viniste?
-Porque necesitaba hablar contigo y tenía sueño a las 4 am.
-Ah, vale -reí-. Dime.
-¿Recuerdas que esta mañana me preguntaste por Niall?
-Mmm... Si.
-Mi respuesta es que... Ay... Todo volvió a ser como antes -dijo después de una pausa.
-¿Como antes? -pregunté dudosa-. ¿Cómo así?
-Pues... Volvió a dejar de hablarme -dijo con la voz temblorosa.
-Mmm... ¿Puedo hacerte una pregunta? -dije para cambiar de tema, no quería que se pusiera a llorar.
-Si, dime.
-¿Por que Jeremy y tu terminaron?
-¿No te dijo?
-Si, pero creo que ocultaba algo, no se.
-Ay... Rompimos porque veníamos peleando demasiado y a veces los celos me invadían porque, como dijo Anónimus, veía a Jennifer muy seguido y pues yo hablaba con Niall cuando me sentía sola y... Bueno, esto también explica porque dejó de hablarme.
-No entiendo.
-Pensó que lo usaba de segunda opción y también para darle celos a Jeremy.
-¿Y era cierto?
-No del todo... Jamás hubiera usado a Niall de segunda opción, es mi mejor amigo, pero una parte de mi si quería darle celos a Jeremy.
-Oh...
-Y pues ahora me odia.
-¿Y le dijiste que no lo estabas usando?
-Si, una y otra vez, pero no me cree.
-Hablaría con él, pero prefiero no meterme en esto...

Suspiró y levantó los hombro.

-Al fin y al cabo no te iba a pedir ayuda -resopló.
-Vale... Y lo siento...
-Da igual, en serio -hizo una leve sonrisa.
-Okay...
-Por cierto ¿como sabías lo de Jeremy?
-Es que Peter, su hermano, vino a jugar FIFA unos días y Jeremy lo recogía. Un día no vino y mi hermana me dijo que se habían ido de viaje.
-Mmm...

El silencio reinó en la habitación y poco después Nadia dijo:

-Bueno, me voy -se levantó del suelo.
-Vale -me levanté después de ella.

La acompañé a la puerta y cuando se fue, cerré la puerta y volví a mi habitación. Las horas pasaron y me aburrí de ver televisión; lo apagué y me puse a escuchar música y a leer.

El último día de vacaciones llegó, me puse a empacar las maletas y, al acabar, me fui a dormir. No había hablado con Nadia desde el día que había ido a mi casa, esperaba que no estuviera brava conmigo.
Me fui a dormir lo más temprano que pude, 11:40 pm, y quedé profunda. Mi madre me levantó abriendo las cortinas, como solía hacerlo, y me levanté para meterme a bañar. Traté de no demorarme demasiado, pero estaba muy casada, parecía un Zombie. Bajé a desayunar, al acabar, subí a lavarme la boca y, al estar lista, bajé con mis maletas al carro. Las metí en el baúl, me despedí mamá y entré al carro seguida de mi hermana.