→Capitulo XXIV

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El día acabó y fui a mi habitación, estaba demasiado cansada. Antes de acercarme demasiado a la puerta, vi a Jeremy y a Nadia besándose. Al principio no podía creerlo, pero después entendí que había algo entre aquellos dos. Ese día la lentitud de mi cerebro me mataba. Retrocedí unos pasos y luego fui a la habitación más cercana.

-Hola Emma -sonrió Zayn al abrir la puerta.
-Hola, ¿esta Niall?
-Si, ya lo llamo.
-Gracias -Zayn se entró unos momentos y luego salió Niall.
-Hola Emma ¿ya no te vendas lo ojos para no verme?
-Hola. Buh, eso fue porque Liam estaba paranoico -reí-. Igual no lo he visto desde el recreo así que no se que es de su vida.
-Ah. Y dígame bella dama ¿a que se debe su agradable visita?
-Ammm... A ti te sigue gustando Nadia ¿cierto?
-Si, creo.
-Vale... Mmm... Tienes una gran competencia.
-¿De que hablas?
-¿Sabes quien es Jeremy?
-¿El compañero de Liam?
-Aja.
-Si, ¿que pasa con él?
-Él y Nadia están saliendo.
-¿Que? -la cara de Niall cambio radicalmente.
-Es lo que vi.
-Bueno... Eh... Gracias. Creo que iré a dormir. Hasta mañana -besó mi mejilla.
-Adiós Niall, descansa.
-Igual.

Niall entró a la habitación y luego cerró la puerta. Caminé de vuelta a mi habitación y entré.

-Hola -dije.
-Hola Emma -respondieron Kelly y Nadia.
-¿Que tal?
-Excelente -dijo Nadia.
-Bien -dijo Kelly.
-Wow ¿a que se debe tanta felicidad?
-A...
-Espera no me digas ¿Jeremy?
-Si -sonrió-. Ahora estamos saliendo.
-Oh -soné sorprendida, la verdad, ya lo sabía.
-A mi me parece que se ven... Bien juntos -sonrió Kelly.
-Si, pienso lo mismo.

Nadia nos contó con detalle lo que había pasado esa noche y como Jeremy le había pedido ser su novia. Lo único que esperaba era que Jeremy no la lastimara, de resto todo estaría bien. Al acabar su historia, me puse la pijama, me lavé la boca y luego me acosté. La mañana llegó y la rutina de siempre se llevó a cabo. Llegué lo más rápido que pude a educación física, la verdad era que no quería hacer nada, estaba demasiado cansada.

-Emma, hola -dijo Sophia apenas entré a la clase.
-Mmm... Hola.
-¿Que tal estas?
-Bien...
-¿Ya conoces al chico nuevo? -lo señaló.
-Si, es Dan.
-¿No está sexy?
-No se que quieres que diga, pero amo a Liam.
-Sólo era una pregunta.
-Sólo era una respuesta -sonreí fingido y me acerqué a Nadia-. Gracias por esperarme.
-Lo siento, no me acordaba que tenías educación física conmigo -rió.
-Tranquila, ya será la próxima.
-Si.
-¿Quien soy? -dijo un voz detrás mío después de taparme los ojos.
-No se, quizá ¿mi venda personal?
-No, sigue intentando.
-Mmm... No lo se...
-A ver si esto funciona -no se que hizo, pero terminó besándome.
-Mmm... Sabe a... Un apellido... ¿Quizá Payne?
-Wow Williams, que increíble sentido del gusto -dijo y me quitó las manos de los ojos-. ¿Cómo estas amor?
-¿La verdad? Muy cansada -reí.
-¿No dormiste bien?
-No es eso, es que toca madrugar mucho.
-Oh, te entiendo -me abrazó-. ¿Ayer dónde estuviste metida?
-En ningún lado ¿por que?
-Te busqué después de recreo por todas partes.
-Ah, tu fuiste el que desapareció antes de entrar de recreo y luego me fui a clases y más tarde a mi habitación.
-Oh...
-Igual ya estoy aquí ¿para que me querías?
-Nada más para esto -dijo y luego me besó.
-Señor Payne, cuidado atraganta a la Señorita Williams -dijo la profesora apenas entró. Liam y yo nos separamos después de escuchar las risas de los presentes-. Bueno, como ya saben este trimestre no vamos a hacer ni clavados, ni carreras en el agua ni nada de eso, vamos a jugar waterpolo.
-Genial -dijeron todos, mientras que yo odiaba esa idea.
-Pero como veo que hoy no traen sus vestidos de baño, les dejaré la clase libre. Pero, eso Señor Payne, no significa que puede atragantar a la Señorita Williams -toda la clase volvió a reír mientras yo maldecía el momento en el que la profesora había entrado mientras Liam y yo nos besábamos.
-Creo que no te volveré a besar.
-¿Como así?
-Pues por todas partes hay cámaras, no me sorprendería que la próxima clase llegue diciendo lo mismo y cosas peores.
-Oh... Si... Creo que ahora me cae mal...
-A mi más que antes.
-¿Ya te caía mal?
-Mjm.
-Ah...
-Oh, nosotros no nos podemos besar, pero Jeremy si se puede desayunar a Nadia.
-Tus comentarios son desagradables ¿sabes? -reí-. Nadia es mi amiga Liam.
-Lo siento, pero es injusto.

La clase llegó a su fin y me fui a literatura. El chico nuevo estaba sentado sólo en la esquina de atrás y yo me hice cerca de él, no quería incomodarlo. El profesor llegó, empezó su aburrida clase y en cuanto se acabó fui a física y química.
El día se acabó increíblemente rápido y fui a la habitación de Liam. Toqué la puerta, pero no abrió él.

-Emm... Hola ¿esta Liam?
-No Emma, salió hace poco.
-Ah... ¿Sabes mi nombre?
-Si, vamos juntos a literatura.
-Cierto.
-Y te conozco desde toda la vida.
-Okay, ya me asusté.
-¿En serio no me reconoces? -sonrió.
-Me suenas familiar, pero aún no he dado con quien eres.
-Me lastimas Emma, en serio.
-¿Derek?
-Genial, lo has adivinado.
-Oh Dios ¿en serio eres Derek?
-Si -rió-. Me pusieron gafas hace como un mes, pero no tengo lentes de contacto desde hace como dos días así que tengo que usarlas -rió.
-Wow, ¿por que no me lo habías dicho?
-Sorpresa -sonrió.
-Pues vaya sorpresa -reí y luego lo abracé-. Harry tenía razón.
-¿De que?
-El me dijo que te parecidas a Derek... Pero eres Derek -reí.

Hablamos por un buen rato y al ver que Liam no llegaba, me fui a mi habitación. Hice la tarea que habían mandado y luego me acosté a dormir.

They don't know about us - Tell me a lieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora