→Capitulo XVIII

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Nuestro último día en Mullingar llegó y muchas cosas cambiaron en esa semana: Molly odiaba a Nadia y Niall a Ansel, Val y Zayn odiaban más que nunca a Ansel y Liam a Ashton. Por otra parte, Louis había vuelto a Doncaster días antes, Zayn y Val volvían a estar juntos y la relación de Molly y Niall colgaba de un hilo.
En cuanto a Kelly y a mi, nada cambio, seguíamos siendo las de siempre, sin odios ni rencores.

-Adiós Maura, gracias por todo.
-No hay de que Emma, eres bienvenida cuando quieras.
-Gracias.

Me despedí de Ansel y de Ashton y luego subí al carro de Niall. Saqué el iPhone y me puse los audífonos. Liam subió y se sentó a mi lado, cogí su mano y luego posé mi cabeza en su hombro. Niall subió poco después y mas tarde Zayn y Val.
Llegamos al aeropuerto e hicimos el check-in. Nos despedimos de Niall ya que él se quedaría unos días más allí, pasamos a la sala de espera y pasados diez minutos fuimos al avión. Nos sentamos en los puestos que estaban en los tíquets y esperamos a que el avión despegara.
Una vez en el aire me puse los audífonos y la música volvió a sonar. Liam y yo no hablamos en todo el viaje, ¿la razón? Por más que lo hubiera perdonado, por llamarme como la persona que más odio, tenía que pensar en varias cosas; como los días que me dejaba sola porque se iba a "estudiar" con ella o las veces que de repente ella aparecía en las reuniones familiares y en fiestas, diciendo que Karen la había invitado.
Aterrizamos, bajamos del avión y mis papas estaban ahí, esperándome.

-Hola -sonreí.
-Hola hija ¿como estas? ¿Cómo te fue?
-Muy bien -sonreí-. Mullingar es increíble.
-Que bien que te haya gustado.
-Si.
-Hola Emma.
-Scar -sonreí y la abracé-. Te extrañé.
-Yo a ti más -rió.
-¿Vamos?
-Si, espera que salga mi maleta -reí.
-Cierto.

Vi mi maleta y la cogí. Volví con mis papas y empezamos a caminar hacia el parqueadero.

-Emma -gritaron. Me volteé y vi a Liam.
-Mierda -susurré-. Ya vuelvo -me alejé de mi familia y fui con él.
-¿Te pasa algo conmigo?
-No, sólo estoy cansada -sonreí y acaricié su mejilla.
-Vale -cogió mi mano-. ¿Quieres que te lleve?
-No, mis papas están aquí -sonreí-, pero gracias.
-Vale.
-Por cierto ¿quien te recoge?
-Mi hermana, esta afuera esperándome.
-Oh, vale -sonreí.
-Emma vamos -gritó mi mamá.
-Ay... Ya la oíste.
-Si. Me avisas cuando llegues.
-Vale, tu igual -besé su mejilla y lo abracé.

Volví con mis papás y mi hermana. Salimos de allí y fuimos al parqueadero. Al encontrar el carro, metí la maleta en el maletero y me subí en él. Mi papá arrancó y miré por la ventana. Aquellas semanas que habíamos pasado en Mullingar volvían a mi mente. Suspiré.
Llegamos a casa y nos bajamos del carro. Bajé la maleta y subí a mi habitación. Me senté en la cama y prendí el televisor.

»¿Estas bien? -me mandó Liam.

La verdad no sabía si responderle, pero ya había abierto el mensaje y no pensaba dejarlo en visto.

«Si, ¿por que?
»Te noté un poco... extraña cuando te despediste de mi.
«¿Por que?
»Tu no eres de las que se despide con un beso en la mejilla.
«Me despido de todos con un beso en la mejilla.
»Todos no son tu novio... ¿O si?

Mierda pura, Liam sabía como ponerme incomoda.

«Ay... Lo siento ¿si? La idea de que mi familia estuviera observándome me hizo ponerme nerviosa -improvisé y escribí lo primero que se me vino a la cabeza.
»¿Qué tiene de malo besar a TU novio frente a ellos?
«Es raro... Jamás lo he hecho -volví a improvisar, había besado a Liam varias veces frente a mis papás.
»Cierto... Igual mañana pasaré a verte, me debes un beso.
«Vale :) Por cierto, ya llegué a mi casa.
»Yo igual :B.

Hablamos un rato más y luego me acosté y me quedé dormida.

-Emma, despierta.
-Mmmmmmm...
-Hija.
-Mamá, estoy en vacaciones aún -dije con los ojos cerrados.
-Es que preparé el desayuno para todos.
-Ay, ya voy.

Mi mamá salió de la habitación y me levanté. Me puse unas pantuflas, entré al baño y bajé al comedor. No había nadie, genial, estaba alucinando.

-¡Feliz cumpleaños! -salieron de la cocina con un pastel en la mano.
-Ay Dios -me tapé la cara y sonreí-, gracias -me dieron el pastel y sacaron la cámara-. Fotos no, por favor.
-Fotos si Emma.
-Ay, vale.

Empezaron a cantar el "Feliz cumpleaños" y antes de soplar las velas pedí un deseo:

-«Deseo no volver a pelear con Liam» -pensé y soplé las velas. Dejé el pastel encima de la mesa y los abracé-. Gracias, en serio.

Mi mamá partió el pastel y desayunamos. Al rato sonó el timbre y mi hermana abrió.

-Emma, es para ti -me levanté de la mesa y fui a la puerta.
-¿Emma Williams?
-Si.
-Firme aquí y aquí -lo hice y después me dio un gran ramo de rosas-. Que tenga un buen día.
-Gracias, igual -sonreí. Cerré la puerta y subí a mi habitación.
-¡Emma! -me llamó mi mamá.
-¡Ya voy! -respondí.

Vi que en el ramo había un pequeño sobré en el que decía "Emma", lo abrí y leí la mini carta que venía ahí: "Para la chica más hermosa, gracias por hacerme el chico más afortunado del mundo. Felices 18. Te amo con mi alma. Liam Payne".
Sonreí cómo idiota, lo amaba, mucho. Salí de la habitación y volví al comedor donde sólo estaba mi mamá, esta vez bajé las rosas conmigo.

-Ma ¿dónde hay un cosito para poner flores?
-Wow ¿quien te las dio?
-Adivina -sonreí.
-¿Liam?
-Aja.
-Oh, que detallista.
-Mjm... ¿Si sabes donde hay?
-Si, pero mientras tu terminas tu desayuno, yo las meto en agua.
-Vale.

Le di las rosas a mi mama y me senté donde había dejado mi desayuno a medio comer. Mi mama desapareció y yo acabé de desayunar. Dejé el plato en la cocina y subí a mi habitación

-¡Mamá!
-Dime -asomó la cabeza por la puerta.
-¿Has visto mi celular? Estoy segura de que lo vi ahí cuando subí con las rosas.
-No, no idea.
-Ainsh.

Mi mama desapareció de ahí y sonó el teléfono.

-Hija contesta, seguro es para ti.
-Ay... Voy -salí de mi habitación, bajé a la sala y contesté-. ¿Hola?
-Hola Emma ¿cómo estas?
-Nate hola -sonreí.
-¿Como has estado?
-Bien gracias. ¿Qué tal Rusia?
-Increíble -rió.
-¿En serio no piensas volver por mi y llevarme contigo?
-No hay mucho que hacer aquí.
-Pues mejor -reí.
-Con un año más y la misma vaga de siempre.
-Claro, ¿no has escuchado? Mientras más grandes más vagos.
-Lo acabas de inventar ¿no es así?
-Si -reí-. Igual dame créditos si alguna vez la usas.
-Si, si, diré "oh mira que una prima mía, la más boba, creó una dicho demasiado..." No se como completarlo.
-Increíble.
-O mejor, bobo.
-Ja ja ja.
-¿Y que hay de nuevo?
-Que tengo 18 -dije con cierta emoción.
-Wow ¿18 ya?
-Si.
-Es increíble. Los niños de ahora crecen muy rápido.
-No exageres Nate -reí-. En dos meses cumples 20, cállate.
-¿Nos llevamos dos años?
-Si.
-Wow.
-Ay... -suspiré y el rió-. ¿Te digo algo?
-Si, dime.
-Fuiste el primero en llamar.
-¿En serio?
-Aja.
-Oush ¿te llamé primero que tu novio? -lo dijo con un tono de broma.
-Si, de hecho.
-Ow ¿la pequeña Emma tiene novio?
-Mjm.
-Wow, te vas un año y todo cambia. ¿Quien es el afortunado? ¿El pequeño Harry?
-No, Liam.
-¿Liam...? ¿Payne?
-Si.
-¿Vas en serio?
-Si.
-Jamás lo hubiera imaginado.
-Nadia lo imaginaba... ¿Y tu? ¿Ya tienes a alguien con quien compartir tus días?
-Si, es una rusa muy sexy.
-Oh que bien. Cuando vuelvas quiero que me la presentes.
-Claro, serás la primera.
-Yei.
-Bueno Emma, las llamadas internacionales salen un poco caras, así que espero la pases muy bien y que disfrutes tus 18.
-Gracias Nate.
-Y que tu novio te llame.
-Gracias -reí.
-Te quiero, hablamos otro día. Adiós.
-Yo a ti, adiós.

Y dicho eso, colgó.

They don't know about us - Tell me a lieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora