Me Gustas Así

CAPÍTULO 33.

Narra René:

La sonrisa de Damián se esfumó, retorcí los dedos de mis manos. Tengo que decirle que las cosas van mal con Gerónimo y hasta posiblemente termine con él, entonces, nada ni nadie nos impedirá estar juntos.

-¿Recuerdas la mañana que viste a los mellizos y a mí en el baño de la escuela?

-Si –Frunció el ceño- ¿Pero qué tiene que ver eso?

-Bueno –Suspiré- Yo creí que estaba enamorado de ellos, aunque Rafael era el que más conexión tenia conmigo...

Damián rió sarcásticamente. Ignorando su reacción continué...

-Pero él viajó a Londres y ahora las cosas no son como antes, mi relación con Gerónimo ya no es la misma. Estamos muy distanciados y yo no provoqué eso.

La expresión de mi amigo cambió drásticamente, se mordió el labio inferior nervioso y desvió la mirada.

-¿Acaso tu sabes algo que yo no?

-René... -Respiró hondo- Gerónimo te es infiel...

Narra Damián:

No quise decírselo tan a secas, pero al parecer, no le afectó tanto.

Él suspiró pesadamente.

-Me lo imaginaba –Bajó la mirada- Incluso cuando me tocaba, sentía que algo no estaba bien. Es como si deseara tener a alguien más entre sus brazos...

Mi corazón se estrujó al ver su expresión triste, mi conciencia no me iba a dejar dormir esta noche.

*Tú convenciste a Jake para que sedujera a Gerónimo, ahora René sabe la verdad y está triste. Si se entera que tuve algo que ver en esto, volveré a perder la poca confianza que he recuperado de su parte*

Tomé su rostro entre mis manos y fundí mi boca con la suya. Correspondió mi beso con tantas ganas que sentí que me desmayaría.

-Quiero contarte algo –Dije al separarme de sus labios-

Él sonrió y eso alivió un poco mi culpa.

-¿Qué cosa?

-Antes de que me arrojaras el agua en el rostro –Hice una pausa- Estaba soñando contigo.

-¿A sí? –Enarcó una ceja-

Acaricié su cuello, lentamente, descendí mi mano hasta llegar a su camisa semi-abrochada, René soltó un suspiro y yo sonreí.

Sus ojos se entrecerraron, abrió un poco los labios y su respiración se agitó...

Me acerqué más a él y besé su nariz, sonrió tiernamente y sus mejillas se tiñeron de rosa causándome ternura.

-Damián –Dijo sin aire y se subió encima de mí-

Dejé caer mi cuerpo, apoyé mi cabeza sobre la almohada y empecé a desabrochar el resto de los botones de su camisa.

René acariciaba mi abdomen, sus manos eran tan suaves y delicadas que unos escalofríos recorrían mi piel.

-Bésame –Supliqué y lo despojé de su camisa-

Él se inclinó y unió su boca con la mía. Lo apreté contra mí y sentí como mi miembro se endurecía al contacto de su cuerpo.

Sin esperar más tiempo, entre risas y besos, nos quitamos toda la ropa y nuestras miradas se encontraron.

-Necesito sentir tus manos sobre mi piel –Me sorprendí al escuchar la voz entrecortada de René- Ahora.

Se recostó sobre las sábanas y ladeó la cabeza, esperando. Tragué saliva nerviosamente y comencé a acariciarlo. Su pecho, abdomen, AHÍ abajo.

Con manos temblorosas, tomé su miembro y lo sostuve delante de mis ojos. Examinándolo.

Él sonrió al ver mi expresión.

No sé por qué estaba tan asustado, jamás, en mis 17 años de vida había estado tan nervioso a la hora del sexo. Si, está bien. Antes era con chicas y ahora es con mi mejor amigo René Castillo.

Lo conozco desde la infancia, es cierto. Pero nunca lo había tocado o visto desnudo. Su cuerpo era una maravilla, en todo sentido. Anoche, cuando me dijo que le hiciera el amor, sentí el mismo temor que estoy sintiendo ahora. No creo que la palabra "temor" sea la más adecuada, pero, ¿Cómo explicarlo?... Es excitación y a la vez ganas de salir corriendo...

En otra definición, soy bipolar o algo así. Porque quiero estar con René, besarlo, acariciarlo, oír sus gemidos de placer y sostenerlo en mis brazos cuando se viene, pero, por otro lado, quiero separe de él, esconderme en un rincón de mi cuarto, hacerme un bollito y quedarme así para siempre.

Creo que aún no comienzo a aceptar completamente mi homosexualidad o quizás, siempre estuve desesperado porque René vuelva a ser mi amigo y me hice una idea falsa de mis gustos.

*Anoche se lo hiciste y disfrutaste*

Es cierto, disfruté mucho haciéndolo con René. Él es muy versátil para estas cosas, en cambio yo apenas comienzo.