Capitulo 62

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Desde esa vez no pudo dejar de pensar en ella. En su cuerpo.
Y ella, no podía olvidar la cara que había puesto al verla semi-desnuda. Así que aprovecho que la había visto para comenzar su juego de seducción. Durante una semana había dejado que la viera semi-desnuda, claro, sin que él se diese cuenta de que lo hacía con intención. 
Ahora, ella junto a las demás estaban en la piscina techada que tenía dos temperaturas, una caliente y otra fría. Traía un diminuto bikini, que no dejaba nada a la imaginación.
Nathan se encontraba al otro lado de la piscina junto a los chicos, admirándola.
- ¿En qué piensas? - pregunto Max, de repente.
- Cosas.
- O mejor dicho en Hayden -rio- Haber ¿Qué piensas?
- Pienso en cómo hacer para tirármela de nuevo, joder la necesito...
- ¿Crees que ella quiera?
- Claro, seguro le hace falta una buena follada.
- Nah, con el cuerpo que se gasta no creo que le haya hecho falta nada -rio.
- Ya, no la mires tanto - Nathan golpeo a su amigo en la entrepierna y este grito de dolor- Tienes novia.
- ¿Me quieres dejar estéril? - Max se sobo- Además ¡Tú también tienes novia!
- Ya sé, pero es.. Diferente.
- No, es lo mismo.
- Que no, mira Carrie puede complacerte en lo que quieras, pero Caroline uhmm - hizo una mueca- No...
- Uhh -rio- ¿La dejarás?
- No lo sé, nuestra relación va de mal en peor...
- ¿La quieres?
- Creo, no sé. Tengo un afecto hacia ella, pero desde que llego Hayden estoy confundido.

Por otro lado, Hayden tenía a Sophie sentada en su vientre jugando con la muñeca que le había regalado Nathan.
- Hayden -hablo Carrie.
- ¿Sí?
- ¿Qué hay entre tú y Nathan?
- Nada, ¿Por qué?
- ¡Pues no deja de mirarte! Todos estos días ha estado observándote - dijo Nareesha.
- Ah... No sé.
- ¿Crees que quiera algo contigo? - Hablo Carrie.
- No sé.
- ¿Tú quieres algo con él?...
Hayden sonrió.
- Dios... Hayden ¿Todavía le tienes ganas? - hablo nuevamente Mary.
No podía mentirles a ellas, eran sus amigas y al fin y al cabo terminarían sacándole información.
- Vale, Nathan está más bueno que todos los tipos de Reino Unido, joder, si cuando lo vi en casa de Tom las piernas me flaquearon -rio nerviosa.
Las chicas rieron ante la confesión de Hayden, mientras que a ella se le ponían las mejillas coloradas. Tenía que admitirlo, Nathan aún habitaba en cada una de sus fantasías

Al caer la noche, Hayden se levantó y fue a la cocina. Las luces estaban encendidas y él estaba allí, sin camisa y solo con el pantalón de pijama, sentado con una lata de cerveza en su mano.
Hayden sintió como sus bragas se iban humedeciendo, estaba jodidamente bueno.
Nathan miro en dirección a la chica y sonrió.
Llevaba su camisa gris, su favorita. Le llegaba hasta el muslo, antes solía taparle todo el trasero pero ahora quedaba gran parte a la vista. Seguramente ella no se acordaba que aquella le pertenecía a él.
Hayden camino hasta el refrigerador y saco una Coca-Cola.
Se sentó sobre el mesón de mármol y tomo la bebida. Pensó un momento en que este sería el momento perfecto para jugar un rato con él.
- ¿Cómo te ha ido con tu novia? - pregunto, rompiendo el silencio.
Nathan la miro y se relamió los labios. La camiseta se le había subido.
- Bien -contesto seguro.
- Claro -rio y volvió a tomar la bebida.
Nathan se levantó de su asiento y fue hacia Hayden. De verdad lo estaba volviendo loco.
Ella se asustó al sentir que le abría las piernas y se metía entre ellas.
- Siempre me preguntas por ella...
- No es así.
- Claro que sí, apuesto que te pone celosa, estas mal...
- No, tú estás mal. ¿Crees que no me he dado cuenta de que aprovechas cada momento para verme sin ropa?
Y él que creía que no se había dado cuenta. Hayden bajo su mano hasta la entrepierna de Nathan y lo acaricio por encima del pantalón. Él respiro con dificultad al sentir sus caricias y más aún cuando ella metió su mano por debajo de la ropa.
- ¿Por qué tendría que estar celosa de una anciana como tu novia? Si no llevo ni cinco minutos y mira cómo te he puesto - le susurró al oído y le lamió el lóbulo de la oreja.
Nathan abrió sus ojos y vio a Hayden sonreírle.
- Si me das permiso - Hayden empujo a Nathan y se bajó del mesón- Tengo que ir a dormir, buenas noches.
Le volvió a sonreír y se fue de ahí dejando a Nathan con una tremenda erección, tal como lo había hecho en su casa en año nuevo.

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