- ¿Puedo hacerte una pregunta?
- Sí.
- Mírame - le pidió con voz suave, ella obedeció.
- ¿Qué?
- ¿Amas a Tom?
Hayden volvió a bajar la cabeza.
- No
- ¿Entonces? - preguntó Nathan.
- ¿Entonces qué?
- Hayden, te quiero, dame la oportunidad de demostrártelo.
Hayden lo miro por un segundo.
Había sonado tan sincero y romántico que el corazón le comenzó a latir fuerte y en el estómago mariposas bailaban alegremente, no las había sentido durante mucho tiempo. Sus mejillas se tornaron rosadas, ella sonrió involuntariamente sin mirarlo.
Nathan tomo la mano de Hayden por encima de la mesa y la acaricio mientras la miraba a los ojos.
-Nathan...
- Por favor.
Pensó un momento, ¿Qué perdería si todo aquello era falso? Nada. No perdía nada con intentarlo una vez más, solo más heridas en el corazón, pero ya había tenido muchas y había aprendido a curarlas con el tiempo y si esto era falso, también las sanaría, de la misma forma.
- Háblame, no te quedes callada - le hablo nuevamente, con una media sonrisa.
Hayden se levantó y se sentó en la mesa frente a Nathan. Él la miro extrañado ¿Qué se suponía que haría ahora?
Nathan puso sus manos a los costados, en la mesa. Hayden las tomo y las guio a su cintura y lo miro.
- Bésame - con la voz seductora, pero a la vez tierna.
Nathan ni tonto ni perezoso, se levantó y le abrió las piernas para meterse entre ellas y abrazarla.
Hayden rodeo su cuello con sus frágiles brazos y lo besó como hace dos años atrás, solo que ahora, él le correspondía el amor. Ambos tenían los ojos cerrados, disfrutaban del sabor y de la sensación.
Nathan paso su brazos por la espalda de Hayden y busco el cierre del vestido. Tanteo con sus dedos y lo encontró. Bajo el cierre, le bajo el vestido hasta la cintura, dejando al descubierto el brassier color coral de la noche anterior. Luego, Hayden levanto los brazos y Nathan le saco el vestido por completo, tirándolo a un lado en la cocina.
Se volvió a meter entre sus piernas y acerco sus labios a su cuello. Lo beso y lo mordisqueo.
Hayden cerró los ojos y jadeo.
Un gemido salió de su boca cuando sintió la mano de Nathan escabullirse dentro de sus bragas, acariciándola. La encontró húmeda. Le sonrió y la bajo de la mesa para llevársela a la habitación.
Allí, la recostó en la cama, la beso con ternura y le hizo el amor.
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Amigos con derechos
Teen FictionEntre Hayden y Nathan había dos simples reglas. 1. Hay que tomar esto solo como un juego. 2. Prohibido involucrar sentimientos. NOVELA ADOPTADA