Tres al cuadrado.

Capítulo 2.

Maddison.

-Joder Maddison ¡Rápido! llegaremos tarde.- Me grita Mike desde su nuevo Audi Negro.

Quiere más a ese dichoso coche que a mí. Hace dos meses que recaudó el dinero suficiente para comprárselo y ahora no se separa de él.

-¡Ya voy!-le respondo desde la puerta de casa.

Miro rápidamente mi reflejo en el espejito de la entrada y asiento, jersey blanco y vaqueros. Recojo mi abundante pelo castaño en una coleta y maldigo el día en el que me salió ese dichoso grano en la frente.

Me coloco bien la mochila a mi espalda y cojo mi cuaderno, lista. Entro al coche de Mike, el cual me mira sorprendido de arriba a abajo.

-Ahora sí que pareces una estudiante de último año hermanita.

-Gracias, supongo- contesto haciendo una extraña mueca.

Mike siempre es tan...estúpido a la hora de hablar de mi aspecto. ¡Que más le da lo que me ponga!
Supongo que será el típico síndrome de hermano mayor.

Mike arranca el coche y conduce hasta el instituto. Al salir del coche no veo la situación muy distinta a la del año pasado. Los nuevos van como peonzas totalmente desorientados, y el resto de gente permanece en sus distintos grupitos.

Veo a Scarlett a lo lejos, pero no hay rastro de May. Damon le habrá traído.

Saludo rápidamente a los amigos de mi hermano y entro al centro.Busco mi clase y subo hasta la segunda planta. Saludo también a Emily que está apoyada en el radiador. Creo que no le hace mucha gracia mi compañía, pero se tendrá que fastidiar.

-Hola-me saluda secamente-Nos ha tocado en la misma clase al parecer.

-Sí, al parecer- repito -bueno, nos vemos dentro- le dedico mi sonrisa más falsa y entro a clase.

Me siento en una de las mesas que está situadas en  última fila y me concentro en observar la cantidad de gente que entra por la puerta.Voy saludando a los conocidos y sigo viendo pasar a más y más gente ... ¿cuántas personas caben aquí?. Por fin toca la campana y entra el profesor de historia, el cual creo que se llama Henry...pero no estoy muy segura. Empieza la hora con una aburrida explicación sobre lo que daremos a lo largo de estos meses y continúa copiando algo sin sentido aparente en la pizarra.

-¡No puede ser!- grito mirando a ambos lados de mi cabeza.Siento mil ojos mirándome fijamente, qué narices, ¿dónde está mi cuaderno?

-¿Ocurre algo? señorita...Blake-me pregunta el profesor consultando mi ficha informativa.

-No, perdón-me disculpo, aunque realmente sí, si que pasa, ¡he perdido mi maldito cuaderno!

Mi cuaderno es como una especie de diario,no escribo todos los días pero sí cosas importantes y personales,no me suelo separar de él nunca. El refinado profesor de historia asiente y continúa copiando fechas en la pizarra.

Y entonces,mi mirada se fija en el pequeño barullo de hojas de color blanco manchado del suelo del aula.

Lo veo.Está en el suelo, justo debajo de...¿de Harry?
Nunca lo he llegado a conocer bien, fuimos juntos al colegio pero actualmente lo único que sé de él es que es bastante guapo y que es muy amigo de May. Cruzo los dedos para que no vea el cuaderno, pero lo pisa sin querer y lo coge. Observa la tapa verde y pasa sus manos por ella.

Su mesa no está muy lejos de la mía así que con sigilo me voy acercando despacio.

-Ese cuaderno es mío-le digo cuando ya estoy lo suficientemente cerca como para que pueda oírme.

-No veo tu nombre por ninguna parte- Se hace el graciosillo. Imbécil. ¡Dame mi cuaderno!

Pongo mi mano en la tapa del cuaderno y lo empujo hacia mí. Harry sonríe y tira de éste hacia él.

-Vamos, no me fastidies-le digo.

Agarro mi cuaderno con fuerza y tiro, él hace lo mismo. Tiene mucha fuerza y no logro que quite sus manos del cuaderno. Rendida,lo suelto y sale disparado contra la cabeza del profesor.
Los alumnos se giran y nos observan.

El profesor nos mira con el ceño completamente fruncido y recoge el cuaderno del suelo.

-Harry Cooper y Señorita Blake quiero un trabajo de ochenta y cinco hojas sobre la economía Filipina en el año 1925.

-¿Cómo?-réplica Harry- Ha sido un accidente,no hemos tirado el cuaderno a posta.

-El trabajo tendrán que hacerlo juntos y contará para la nota del primer examen.

-Pero...

-Pero nada-me interrumpe Henry. Me devuelve el cuaderno y añade-lo quiero para el lunes. Si no lo entregan habrá consecuencias.

Suena el timbre y todos salen disparados de clase. Resoplo sonoramente y me levanto para salir del aula. Harry me coge del brazo obligándome a mirarle.

-Me has jodido el polvo de este fin de semana-me mira sonriendo.Pero, ¿de qué narices va este tío?

-Y tú el mío-le sonrío de vuelta y salgo de clase. ¿Qué tontería acabo de decir?  Vaya estupidez.

El resto del día se pasa lentísimo.El descanso se me hace eterno junto a las animadoras los jugadores de fútbol y mi hermano.

Hay veces que no sé cómo puede aguantar a las animadoras.No tienen cerebro. Sobretodo Emily con sus intentos de seducción totalmente inútiles hacia Mike.

Veo a Scar dibujando y enroscando las puntas de su pelo de colores en su dedo índice.También veo a May almorzando una manzana. Hay veces que la veo demasiado sola. Su gente ya no va al instituto y el único que sigue aquí es Harry.

A él también lo veo hablando con una rubia con más silicona que neuronas.
Terminan las clases y vuelvo andando a casa.

-¡Me has dejado tirada!-le grito a Mike al llegar a casa-no he visto tu coche y tampoco a ti, he tenido que volver andando. ¡Con cinco kilos a la espalda!

-¡Ala, exagerada! He tenido que salir antes.Tenía que comprar un balón nuevo.Una de tus amigas me lo ha abollado con su cara.Y me ha amenazado con metérmelo en el culo.

¡May! Que agradable...

-Pues a lo mejor te hacía falta-me saca un dedo en particular y nos sentamos a comer. Solos.
Papá aún no ha llegado de trabajar y Sophia tampoco.

Sophia es la novia de mi padre. Es una mujer guapa y agradable y mi padre es feliz con ella. Mamá vive en Seattle con su novio quince años más joven que ella.
Mis padres ahora se llevan bien. Antes, cuando se acababan de separar era un maldito infierno.

Subo a mi cuarto y cojo mi teléfono. Tengo un mensaje de Scar otro de mi madre y uno último de un número desconocido.

Mi madre me pregunta que tal mi primer día de clase. Le contesto con un "eterno" y abro el mensaje de Scar.

-Quedamos a las ocho y media donde siempre.

-Okay-contesto y abro mi último mensaje,el de el número desconocido.

-El sábado a las seis te paso a recoger para ir a mi casa y hacer el jodido trabajo. Dile a tu polvo que ya quedáis el Domingo.

Sonrío al leer el mensaje.Aunque sepa que es Harry,el cual me ha metido en este lío del trabajo,y aunque sepa que él y él mensaje son de lo más prepotentes.

Decido ignorar el mensaje y también ignorar el echo de que tenga mi número de teléfono.
Me pongo más cómoda y salgo a correr un rato. Al volver me ducho, me visto con la misma ropa que por la mañana y salgo para cenar con las chicas.

Scar nos cuenta sobre el nuevo en prácticas que va a estar en la clase de arte que da el padre de Scar,y May se queja de mi hermano y su gran talento para dar pelotazos. Yo me río y decido no contar lo de Harry, no tiene tanta importancia.

Al llegar a casa decido contestar el mensaje del moreno antes de irme a la cama.

-Gracias por preocuparte por mi polvo.Ya no hace falta que quedemos el domingo.
¡Buenas noches!

21 de septiembre 2015