Esa noche, Mariana llega triste a la mansión Being, pero como siempre Joaquín esta para cambiar el día de todos o más bien sorprender la noche.
― Me aburrí todo el día, mala ¿Dónde estabas? ― Joaquín le hace puchero.
― ¿Qué quieres? Tú siempre...
Joaquín de repente la interrumpe corriéndole el cabello.
― Marca de beso y después me dicen a mi pervertido ― hace una sonrisa pícara.
― ¡¿Qué?! ― se sorprende Mariana sonrojada tapándose el chupón que Dylan le hizo en la mañana ― pe... pero ¡Si lo oculte bien!
― Al rey de la cama no lo puedes engañar ― mueve las cejas.
― ¿Y no estás enojado? ― lo mira extrañada.
― Ya me disculpe contigo por hacerte una escena la otra vez, no puedes mirarme raro ― menea su mano izquierda, la cual no es la enyesada ― ¿Ahora dime porque estas triste si tuviste tu momento feliz?
Ella suspira.
― ¿Podemos hablar mañana de eso? No me apetece ahora.
― Okey ― le sonríe ― ¿Qué tal si vemos los mugis? Encargue un capitulo exclusivo nunca antes visto y me lo acaban de traer ¿Quieres? ― mueve las cejas otra vez.
― Si pero...
― ¿Si? ― dice él con su linda sonrisa de siempre.
― Joaquín... ¿Por qué estas sin camisa? ― lo señala, solo lleva el pantalón y las pantuflas.
― Porque soy más sexi así y porque con este brazo no puedo ni ponerme un calzón ― lo dice con la cabeza en alto.
― Tiene sentido ― se lo piensa.
― ¿Qué cosa? ¿Ser sexi o ponerme un calzón? ― la mira pícaro.
― Ambos ― se sonroja.
Él se sorprende.
― Mari ¿Tienes fiebre?
Ella se ríe.
― Nunca dije que fueras feo y la verdad imaginarte intentando ponerte la ropa es muy gracioso ― saca una carcajada.
Él sonríe.
― ¿He alegrado tu noche?
― ¡Claro! Solo si el gran Joaquín León me cede el asiento en primera fila de los mugis ― bromea.
― ¡Claro! Tu pervertido caballeroso lo hará ― le guiña el ojo y se van a ver los mugis.
Al día siguiente, por la mañana, Mariana le cuenta a Joaquín lo que paso el día de ayer, él queda pensativo pero luego acaricia su cabello y la reconforta como el amigo que es.
― Cuenta conmigo para lo que sea.
Ella le sonríe, luego le reprocha.
― Si, si pero colabora ― intenta ayudarlo a ponerse la camisa.
― Creí que te gustaba verme sin camisa ― bromea.
― me encanta, pero un hombre de negocios como tú, tiene que estar bien vestido ― le sigue el juego.
Él se ríe.
― Y que lo digas aunque... ― duda ― últimamente no he podido hacer nada por culpa de este brazo ― suspira ― me aburro mucho.
― Ja, ja, eres un niño.
― ¿Yo?... bueno si, un poquito, pero solo... ¡¿A quién engaño?! ¡Me encanta actuar así! ― se ríe.
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Reencarna solamente una vez (sin editar)
Paranormal¿Crees que despertar en una cama desconocida es malo? ahora imagínate que despiertas en esta pero encima no estas en tu cuerpo y peor aun, no recuerdas que paso el día de ayer. Bueno, esto le paso a Mariana y deberá averiguar el porque, mientras int...