Marco
—Marianne.—dije sin podérmelo creer.
—Marco, amor, no me voy a casar con Pedro, el único hombre con el que quiero casarme, es contigo, vine aquí por ti—dijo ella soltando unas lagrimas.
—Mario suéltala.—le dije y me hizo caso, ella corrió hasta mí y yo la cargué entre mis brazos.
—Te amo Marco, te amo, eres el hombre de mi vida, el amor de mi vida y dejé todo, todo para estar conmigo mi amor.—y me besó, ¡DIOS! Qué bien se sentían sus labios contra los míos, la amaba, la amaba tanto y aquí estaba ella, diciendo las palabras que nunca pensé escuchar...
—¿De verdad me amas y estás aquí para quedarte conmigo?—dije mirándola.
—Marco, mi trabajo se encuentra en Buenos Aires, pero junto a ti está mi corazón, de verdad te amo y me quedaré contigo todo el tiempo que quieras.—dijo sonriendo.
—¡Dios mujer! Me haces el hombre más feliz del mundo, te amo Marianne Carter, te amo tanto.—dije besándola.
—Yo te amo más Marco Reus, te amo.—Y así la bese, la besé como a nadie, como nunca...hasta que un carraspeo nos interrumpió.
—Em yo, me voy, Laura me...—dijo Mario nervioso y reí.
—¿Te llamo?—dijo Marianne riendo.
—Sí, sí, claro, ¡Eso! ¡Nos vemos luego!—dijo cerrando la puerta rápidamente y luego ambos reímos.
—No puedo creer que estés aquí.—dije acariciando su rostro, estaba completamente enamorado de esa mujer.
—Pues créelo.—dijo para besarme castamente y yo sonreí.
—Dios cariño, por un minuto pensé que te había perdido.—dije dando besos por todo su rostro mientras nos sentábamos en el sofá.
—Cuando Pedro me lo pidió, fue muy...no lo esperaba, pero en ese momento todo lo que podía pensar era en nosotros en cada momento que habíamos vivido juntos y supe que no podía perder esto, no podía dejarte ir, mi corazón estaba contigo, así que lo dejé.
—No sabes lo feliz que me hace eso mi amor, te amo, te amo tanto.—dije llenándola de besos y ella rió.—Gracias por creer en nosotros, por creer en mí, te juro que te daré todo el amor que te mereces princesa, te lo juro.
—No necesitas jurar nada Marco, yo lo sé y te quiero, te amo por eso, sé que no me decepcionarás, aunque si lo haces deberás esconderte debajo de las piedras porque no tendrás escapatoria.—sonreí como nunca, esta mujer me volvía loco pero me volvía inmensamente feliz.
—Tú eres la que no tendrás escapatoria conmigo pequeña, te amo.—dije besándola y acariciando su cintura.
—¿Marco?—dijo ella mirándome con sus preciosos ojos.
—¿Si preciosa?
—Hazme el amor—mencionó seductora y yo le mordí el labio.
—Será todo un placer—yo la cargué como princesa hasta mi habitación sin dejar de besarla, la recosté sobre mi cama, y le hice el amor, tierno y salvaje, como solo nosotros sabíamos hacerlo...
—Te estoy haciendo el amor Marianne, en mi cama, en nuestra cama, en donde te haré el amor hasta cansarnos, hasta que no podamos más, aquí haremos lo que tú quieras mi amor y yo me encargaré de complacerte siempre, te amo.
—Yo te amo más mi Marcinho...¿Y sabes algo?—dijo en mi oído—No puedo esperar a quedar embarazada.—yo la vi sorprendido.
—¿De verdad quieres tener bebés conmigo?—dije más que emocionado y ella asintió feliz.
—¿Cuántos quieres cariño?—dijo riendo—Quiero esto tanto como tú, eres lo más maravillo que ha pasado en mi vida y yo quiero darte lo que tú más deseas, quiero ser la madre de tus hijos, ¿Me dejas?
—Eso ni se pregunta mi amor, claro que quiero que seas la madre de mis hijos...o la mamacita.—dije mientras acariciaba sus pechos y ella suspiraba—¿Y tú sabes algo?
—¿Qué?
—Ya tengo lo que más deseo...y eso eres tú.
—Pues entonces hazme el amor...y busquemos nuestro mayor tesoro.
—Oh mi vida.—dije soltando unas lágrimas—será todo un placer.
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¡Y hasta aquí el capítulo de hoy! ¡Espero les guste!
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¡Un beso!
Paty
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Mi Pequeña. Marco Reus (Terminada)
ФанфикMarco Reus conoció a su pequeña por casualidad. De un momento a otro paso de increíblemente amargado a increíblemente feliz, nunca se imaginó que esa periodista, esa hermosa mujer pudiera robarle el corazón de ese modo. Sólo una mirada basto para qu...