Mi Pequeña. Marco Reus (Terminada)

Capítulo 28. That Red Dress

Marianne

Se suponía que este sería un mágico fin de semana, Marco vendría a Alemania a la gala de los Premios DFB organizados por la selección alemana para premiar a los entrenadores, jugadores y equipos destacados, tendríamos una fantástica velada y luego vendríamos a casa a hacer el amor hasta el domingo por la tarde en donde Marco volvería a Suiza con el equipo en donde se enfrentarían a Nigeria, pero no, la vida es cruel e injusta...o bueno, al menos Marco lo era.

Saber que tu marido te fue infiel es de las peores sensaciones del mundo, pero no se lo demostraría a Marco, iría a los premios y le haría frente, no pienso quedarme llorando en casa cuando él se divertía con Amelia.

Mario me había llamado por la mañana para confirmarme que Marco estaría en los premios, sin más tiempo que perder llamé a un estilista del canal quien gustosamente se dispuso a arreglarme junto a sus dos asistentes...

—¿Ya sabes que vestido usarás esta noche?—me dijo Jimmy sonriendo.

—Claro que lo sé cariño.

Casi 3 horas después me encontraba ataviada en un hermoso vestido de Zuharid Murad color rojo carmesí y unas sandalias de Jimmy Choo en color dorado.

—¡Marianne lo vas a matar!—dijo Jimmy al verme mientras daba saltitos de emoción.

Yo sonreí un poco mientras me veía en el espejo, era el vestido más sexy que había usado en mi vida pero me encantaba, me encantaba totalmente, tenía un pronunciado escote en V y una impresionante abertura lateral en la falda que dejaba ver mis piernas, a pesar de lo sensual que era el vestido todavía me veía elegante, para el peinado Jimmy onduló las puntas de mi cabello e hizo un simple pero hermoso recogido hacia un lado, el maquillaje era de tonos cafés en los ojos con unos labios del mismo color del vestido.

Habíamos tardado pero nunca me había sentido tan hermosa y sexy en mi vida, especialmente luego de tener dos niñas.

—Esa es la idea Jimmy—dije sonriente.

—Cariño sé que estás molesta y dolida por todo lo que ha pasado pero déjame decirte que lo has manejado estupendamente, ningún hombre merece tus lágrimas, ni siquiera Marco. Hoy no es momento de llorar, es momento de demostrarle a ese hombre la hermosa mujer que eres y de mostrarle al mundo que eres una mujer fuerte, decidida y luchadora.—dijo tomando mi mano y sonriéndome.

—Ay Jimmy, gracias por tus hermosas palabras.—dije soltando una lágrima que él de inmediato secó.

—Tú no necesitas de Marco, Marianne. Ese hombre es el que te necesita a ti para vivir cariño. ¿En dónde está tu garra latina? ¡Marco es un idiota al creer que va poder engañarte a ti! ¡Se arrepentirá cariño...lo hará! Porque una mujer hermosa como tú no la tiene todo el mundo...y él la está perdiendo. ¡Así que ánimo! ¡Vibra divaza! ¡Esta noche es tuya, olvídate de tu marido y disfruta tu gala, tu noche, de los papis ricos!—dijo riendo—Pero no disfrutes tanto que no debes pagarle con la misma moneda.

—Tú estás loco Jimmy ¿Cómo podría pensar yo en serle infiel? ¡Y menos con sus compañeros de selección!

—Pues él estuvo con la novia de uno de sus chicos.—yo lo miré seria—Lo siento cariño, olvida eso. ¡Ahora sí! ¡Pose divaza!—dijo tomando su Iphone para sacarme una foto.

El camino a los premios fue corto y eso sólo provocó que mis nervios aumentaran al máximo...

No sé qué pasará al ver a Marco, ni qué pasará después, lo que sí sé es que luchare por mis hijas, pase lo que pase.

Cuando el auto se detuvo frente a la alfombra un guardia me abrió la puerta y me ayudó a bajar del auto, le sonreí antes de empezar a caminar por la alfombra, apenas empecé a posar para las fotografías todos los reporteros se volvieron locos, gritaban mi nombre y miles de preguntas que ignoraba, sólo posaba como ellos querían que lo hiciera y lanzaba besos.

—¿Marianne?—dijo una voz a mis espaldas, volteé y era Erik Durm, sonreí y fui hasta él para darle dos besos en sus mejillas.

—¿Cómo estás cariño?

—Bien pero veo que tu más.—dijo sonriendo mientras sentía su mirada por todo mi cuerpo, eso, de alguna forma me gustó, hizo que mi autoestima se elevara al mil por ciento—¿Por qué tan sola?—dijo en mi oído sabiendo que no podría escucharlo luego de tantos gritos de los fotógrafos quienes enloquecieron aún más por el gesto de Erik.

—No lo sé ¿En dónde está tu amigo Marco?

—¿No viniste con él?—dijo confundido.

—¿En qué planeta vives tu cariño? Por si no sabías ayer mismo me enteré de que tu querido amigo me puso los cuernos con la novia de Max Meyer...y tuve que anunciarlo en televisión nacional.—la cara de Erik era un poema pero supo disimularlo rápidamente.

—No puede ser Marianne, él no...

—Él si Erik, trabajo para la cadena de noticias más importante del mundo ¿Crees que sacarían al aire una noticia sin previa verificación?—dije viendo sus ojos llenos de incredulidad.

—Los medios mienten, Marianne.—dijo algo molesto.

—Pero las fotografías no, Erik. Yo sé lo que vi, no estoy loca.

—Sí pero deberías hablar con Marco primero...

—Para eso estoy aquí mi querido Erik, pero aquí, la última palabra la digo yo.—dije con una sonrisa de suficiencia.

—Marianne, no hagas algo de lo que te puedas arrepentir.—dijo él tomándome por el brazo y viéndome fijamente.

—No cariño, yo me arrepentiré de nada de lo que haga, él que estará arrepentido...será él.

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Capítulo cortito pero con...¿Suspenso? ¡Siento si quedó muy corto chicas, ¡Pero les prometo que en el siguiente viene la mejor parte! ¿Qué pasará cuando Marianne vea a Marco? ¿Lo humillará en televisión nacional? ¿Lo confrontará? ¡Cuénteme que creen que pasará! 

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¡Gracias por todo el apoyo chicas! ¡Un beso! 

Paty