Mi Pequeña. Marco Reus (Terminada)

Capítulo 42. Your love makes me happy

Marianne

¡Dios mío! No podía creer todo lo que estaba diciendo Marco ¡Y en televisión nacional! ¡Es que lo amo! ¡Lo amo joder!

Con esa entrevista no me quedaron dudas de lo que quería, lo quería a él, siempre fue él y estaba lista para dejar ir el pasado y es que, en estos meses me di cuenta de que la solución no era dejarlo ir, era trabajar en nuestro matrimonio, ya no éramos él y yo, teníamos 2 hermosas niñas de las cuales preocuparnos, que nos necesitan juntos, aunque mi decisión no es sólo por ellas, sino por mí.

Cuando acabó la entrevista tomé una decisión...

—Catalina, Destiny ¿No quieren ir con la abuelita un rato?

—¡Shi mami! ¡Shi!—dijeron felices y saltando.

—Eso pensé.—sonreí y llamé a mi suegra quien estuvo más que encantada de venirlas a buscar, mientras lo hacía llevé a mis nenas arriba y nos bañamos, les puse unos adorables vestidos blancos con estampados de flores naranjas y rosas, unas sandalias del mismo color, a Cat le hice una coleta con un moño y Des se puso su corona de princesa, se veían adorables y estaba muy orgullosa de ellas por lo hermosas y bien portadas que eran.

—Las amo mis niñas, con suerte mami traerá a papi de vuelta.

—¡Papi!—dijo Des entusiasmada.

—Creo que ya es hora de que seamos felices...los cuatro.—dije acariciando el cabello de mi Des.

—Vamos a ver...¿Qué debo ponerme?—dije preguntándole a Cat quien tomó mi mano y me arrastró al closet...

Marco 

Cuando el programa acabó me sentí distinto, liberado, tanto como no lo había estado hace mucho tiempo, creo que hoy comenzaba una nueva vida para mí, decidí dejar en el pasado todo aquello que me atormentaba, cometí errores, grandes errores pero formaban parte de mi vida, con esto no quiero decir que me he perdonado del todo, siempre sabré que fui un idiota, pero al menos puedo vivir con ello...sin volverme loco.

Sólo esperaba que no fuera muy tarde para mi, para nosotros, porque Marianne era todo lo que quería y durante mi estancia en Escocia mi pensamiento se reafirmó, porque puedo vivir sin esa mujer, pero resulta que mi cuerpo, mente, alma y corazón eligieron vivir con ella, porque de lo contrario me siento vacío, estoy vivo, pero no lo disfruto.

Así que decidí volver a mi apartamento, ese apartamento en donde la vi por primera vez a esa hermosa periodista que se robaría mi vida entera, que en cuestión de minutos me enamoró y me enseñó a ver la vida de otra forma. Sonará muy cursi, pero es que cuando estás enamorado es inevitable no volverte loco por la mujer que amas y harías todo, todo por estar con ella.

Y eso haría, volvería por ella, no ahora, pero mañana si.

Fui a la cocina y me serví un whisky antes de ir a sentarme a la terraza, un lugar ideal para relajarme, por lo que en ese momento me perdí en mis pensamientos...

-—¿Así que intentarás descubrir mis más profundos secretos?—dije sonriente.

—Te podrías sorprender Marco Reus, así que estate atento.—me guiñó un ojo en ese momento y sonreí.
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—¿Bailas conmigo?

—¿Qué?—dije riendo, ¡Esta mujer está loca!

—¡Vamos! ¡Arriba!—dijo ella sonriente.