PHILLIPMiré el salón de baile, Charlotte cogió mi mano con fuerza. Nos acabamos de involucrar en una clase de danza contemporánea, yo no sabía bailar pero Charlotte me arrastró a su lado. El salón era amplio con ventanales con vista a la ciudad, la profesora media dos metros y como lo supuse era rusa.
–¡Phillip concéntrate!– me grita, dejé de mirar a la profesora y me acomodé junto a mi novia que lucía extremadamente sexy con sus pantalones de yoga.
–Lo siento mi vida, lo siento...
–¡Qué lindo cuando me llamas mi vida, me encanta cuando me dices así!– Charlotte me envuelve en sus brazos mientras me da un profundo beso en la boca frente a toda la clase, la rusa nos miró con una sonrisa y después volvió a encender la música, puse mis manos en la cintura de Charlotte y nos dejamos llevar por el sentimiento y el ritmo.
Hace tres meses no me hubiese imaginado tan enamorado como lo estaba en ese preciso momento, su cola de caballo se tambaleaba para los lados mientras la llevaba, su boca me causaba temor, su rostro de Ángel más aún ¿era cierto que tenía a alguien semejante? Pensé en Julieta. Pensar en ella me hizo pisar a mi pareja, ella abrió los ojos como platos y después empezó a reír.
La sostuve con fuerza y sentir su cuerpo me re confortaba, y aunque una parte de mi estuviese enamorado de una joven inalcanzable para mí, Charlotte era mi novia y la estaba empezando a amar, como nunca había amado nunca a nadie en mi vida.
Salimos de la clase cansados, fuimos a un starbucks cerca del hyde park, bebimos un café helado y después tomados de la mano, subimos a su auto.
–¡Detén el auto un momento!–gemí mientras veía a mi madre pasearse con un hombre que jamás había visto, estábamos cerca de casa, si. Charlotte detuvo su auto, sonreí y mi novia estacionó.
–¡Hola mamá!– la saludé al bajarme, ella me dio un abrazo y me besó en la mejilla fuertemente.
–¿¡Mi niño hermoso, cómo te fue en tu clase!?– El hombre me miró extrañado.
–Dios Annie pero si es el mismo retrato que él...es cómo si estuviese mirándolo ahora mismo...
–Barry...
–¡Es en serio, me dan escalofríos!
–Barry, hablas como si estuviera muerto...y no lo está. Hijo, este es Barry Bendson, el papá de William, el amigo de Helena. «amigo, dirás ex novio» pensé.
–Un placer señor, Phillip Grant. Esta es mi novia Charlotte.
–Un placer Phillip y Charlotte.
–Mamá, ahora iré a casa... si nos disculpan...Solo no podía dejar de saludar a mi mamá.
–Recuerda que el lunes tienes que ir al...
Me subí al auto de Charlotte sin decir nada más, desde el auto Charlotte y yo nos despedimos de ellos.
–¿Phillip a qué se refería ese tipo con que eras igualito a "él"? me pareció de mal gusto.
–¿Te puedo confesar un secreto? – le dije mientras mi corazón empezaba a latir con fuerza en mi pecho, – mi padre no es mi padre...me han dicho que es así pero a los diez años sé que soy hijo de otro hombre, el resultado de una pasión ridícula e infantil de la perdición...me enviaron a un internado para no tener que lidiar con eso nunca, pero al mi padre volver al país decidieron buscarme. Por obligación y no por otra cosa. – lo dije, finalmente lo dije, dije todo...Tom era mi papá. Mi "papá" cerré mi puño y me quedé mirando el vidrio del auto mientras avanzábamos hacia la casa de mis padres.
–¿Y sabes quién es?– me dice Charlotte con poca voz.
–Mi papá es Thomas Houben.
–Cielos Phillip, ¿Annie tuvo una aventura con él?
–No se los detalles Charlotte. Lo que sé es que me enviaron lejos por eso, estuve desde los cuatro años en ese sitio y cuando Tom regresó de Brasil... Fue que me buscaron.
–¿Tu mamá sabe que tú lo sabes?– negué con el dedo mirándola, Charlotte se mordió el labio y después su mano fuera del volante buscó la mía. –Tenias seis años escondiéndolo...¿yo soy la única que lo sabe? – afirmé y al segundo subimos al mismo tiempo el volumen de la radio porque había una canción que a los dos nos gustaba, al tocar nuestros dedos sentí un cosquilleo que me subió de la espalda y la miré: era mi novia...le sonreí empezando a cantar junto con ella.
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Lo propio
RomanceLo último que pensaba era llegar a amar, lo único que quería era diversión y conocer a un nuevo país. Un brasileño le cambia completamente su vida al conocer a la chica que ama, ¿Una obsesión? ¿Un sentimiento adecuado? Ella sigue siendo la hija de u...