BloodCurse

CAPÍTULO VEINTINUEVE

(*)

Determinada a entrenar lo más posible para hacerle frente a las amenazas, y dejando a un lado el cansancio que aún sentía, es que a primera hora de la mañana vampírica, y luego de una lucha campal por sacar a Adrian de la cama, me fui en busca de Misha para que me entrenase con la estaca. Tras dar varias vueltas por el edificio del Consejo de Guardianes sólo pude divisar a Dimitri.

- Hey! Dimitri - le llamé

- Hola Sev - me saludó, se le veía cansado

- Cómo estaban las cosas en la Escuela que atacaron? - le pregunté, si bien no fue para eso que lo llamé, no pude evitar hacer la pregunta

- Han habido grandes pérdidas - me dijo, solo de escucharlo se me revolvió el estómago - murieron varios Moroi y Dhampir, tanto estudiantes como profesores

- Se llevaron personas? - quise saber, aunque a ellos los dieran por muertos

- Se llevaron a un puñado de estudiantes

Palidecí, cada vez que me daban detalles más me calzaba la idea de que nos andaban buscando a Izz y a mí, aunque según el Strigoi nadie había creído en su historia, al parecer se equivocaba.

- Estas bien? - me preguntó Dimitri, me había quedado en silencio

- Es... - me aclaré la garganta y sacudí mi cabeza para despejar los puntos negros que se arremolinaban frente a mis ojos - es una noticia impactante

- Redoblaremos esfuerzos para que no vuelva a ocurrir - me dijo él seguro, con fuego emanando de sus ojos

- Debemos de prepararnos - dije seria

En eso vi aparecer a Misha, me disculpé con Dimitri y me fui a hablarle.

- Estoy lista - le dije con resolución

- Veo que te has levantado temprano - me dijo con una sonrisa - estás segura que estás bien? - preguntó luego de una inspección

- Estoy un poco cansada, pero nada preocupante... puedo ver que no has dormido - le dije al mirarlo bien, me sentí un poco culpable por quitarle sus horas de sueño

- Eso es un detalle - me dijo - debemos de entrenar antes de que nos quedemos sin tiempo

- Por eso estoy aquí - sonreí

Nos fuimos a uno de los gimnasios que había en La Corte, allí había algunos guardianes entrenando, considerando lo que había pasado en las últimas horas, a nadie le preocupaba que una novicia ocupase una estaca. Ayudé a Misha a alinear un par de maniquíes, me explicó una serie de técnicas y movimientos para llegar al corazón, en la teoría era más fácil que en la práctica porque atravesar las costillas era complicado.

- Es solo cosa de práctica - me dijo tranquilo

- Espero tener el tiempo para practicarlo antes de encontrarme con un Strigoi otra vez - le dije jadeando por el esfuerzo, a cada momento me sentía más mareada, me preguntaba si aún funcionaba la pulsera

- Vas mejor de lo que esperaba – sonrió

- Tengo que hacerlo perfecto, de todos los ángulos posibles - dije segura

- Lo harás

Seguimos practicando un poco más, me explicó como poder estacar a uno por la espalda y de igual forma llegar al corazón.

- Recuerda que todo depende de la fuerza que pongas en la estaca - me explicó cuando salíamos del gimnasio

- Eso y darle el ángulo correcto - no pude evitar bostezar