Una historia de amigos- Mario Ruiz y Zayn Malik

|Capitulo 33| (Maraton 1/3)

Después de comer la deliciosa lasaña, Nathe & sky fueron a su habitación y Maddie & Sebas salieron de rumba.

Mario y yo, pues, prácticamente lo obligue a ver Bajo la misma estrella, ya que de verdad me gustaba esta película.

-¿Alguna vez te la has visto?- Pregunte refiriéndome a la película.

-No- Respondió.

-Se que te encantará- Dije.

Tome palomitas y la puse en la pequeña mesa que se encontraba cerca del sofá, me senté en el sofá al igual que Mario y a partir de allí mi atención estaba completamente en la película.

......

La película estaba justo en la parte donde Augustus fallece, las lágrimas estaban corriendo por mis mejillas, así sea que viera esta película mil veces siempre lloraría, este amor no podía con nada, era algo increíble.

Un pequeño sorbido de nariz se escucho y gire de inmediato , Mario tenia los ojos cristalizados.

-No se que haría si eso me pasara, creo que moriría también- Dijo cerrando los ojos y desapareciendo sus lágrimas.

Dirigimos nuestra vista hacia la película pero esta estaba siendo interrumpida por Madison y Sebastian que se besaban apasionadamente, iba a decir algo pero Mario coloco su mano en mi boca, siguieron besándose hasta que empezaron a caminar hacia el sofá. Era tiempo de hablar.

- Hola soy Mario- Dijo

- Yo soy ___(Tn)- Dije

-Y no queremos ver lo que sigue- Dijimos al mismo tiempo y estallamos en risa.

Sebastian y Madison abrieron sus ojos y se quedaron completamente callados.

- Vino el ratón y les comió la lengua- Dijo Mario y yo reí- Bueno nosotros nos vamos - Dijo Mario y salio junto a Sebastian de el apartamento.

Cruce mis brazos y fruncí el ceño.

-Somos novios- Dijo.

Sonreí. Eso era bueno, se ve muy buen chico.

Camine hacia la habitación donde había dormido la noche anterior , tome una ducha, me vestí y me acosté en la cama,apagando las luces de inmediato. Cubrí mi cuerpo con las suaves sabanas y sentí el aroma que estas tenían: el perfume de Mario.

Me dormí profundamente.

Estaba en una playa, me encontraba sentada en la orilla del mar, a lo lejos veía dos siluetas en el agua. Estas siluetas se iban acercando, sentía la sonrisa radiante que tenia en mi rostro, una de las siluetas me miraba de una manera inexplicable y sonreía a su vez.
Cuando las siluetas llegaron a mi lado mi mirada fue inmediata para el pequeño que dio pequeños pasos hacia mí.