Una historia de amigos- Mario Ruiz y Zayn Malik

Capítulo 21|Segunda temporada|

8 meses después

Mario y yo estábamos cada vez más unidos, juntos esperábamos la llegada de nuestra pequeña Zoe. Emoción y felicidad no nos faltaba,en los últimos meses habíamos estado saliendo a comprar cosas para la bebé,a ella no le iba a faltar absolutamente nada.Recuerdo cuando empezamos a adecuar el cuarto de nuestra hija; primero estaba todo de blanco, pero yo cambié de opinión y quise todo de rosa. Así que hoy Mario estaba decidido a pintar el cuarto de rosa.

-Amor estoy listo para empezar a pintar el cuarto- dijo Mario apareciendo por la puerta de nuestra habitación,con un pantalón a media pierna y sin camisa.

Me quedé mirando su torso bien formado- No deberías estar así delante de mí- le dije haciendo puchero.

-¿Por qué?- río

-Que malo eres- hice puchero de nuevo. Mario entró a la habitación riendo y se sentó a mi lado en la cama- Uh,aquí tienes un gordito- le dije tocando la "grasa acumulada" que según yo tenía en su abdomen.

-Ya quisieras estar como yo bebe- dijo riendo de nuevo

-Eso dolió- dije 

-Sabes que es mentira,eres perfecta asi, tu y Zoe son lo que mas amo en esta vida- me beso y se acercó a mi vientre- Verdad pequeña Zoe ¿que tienes a la mama mas hermosa del universo?

-Se está moviendo,se está moviendo- dije y sonreí ampliamente. Agarre la mano de Mario y la coloque sobre mi vientre,exactamente donde estaba la bebé para que pudiera sentir cómo se movía.

-Verdad ¿quien es la princesa de papá?- se seguía moviendo mientras Mario le hablaba- tu verdad,si mi princesa- luego de esto,beso mi abdomen

-Aw,estoy muriendo lentamente de ternura-sonreí mostrando mis ojuelos 

-Bueno,voy a pintar la habitación  de mi bebita- dijo y poco a poco se fue levantando de la cama.

-Crei que yo era tu bebita- hice puchero

-Te amo- me beso. Cada vez que esto pasaba, era como si fuera la primera vez,mi corazon latia fuertemente, mis manos sudaban y las mariposas en el estomago ya no eran elefantes, eran unicornios, que loco sono eso. Sus labios eran tan suaves y tan dulces que me enloquecian,encajaban perfectamente con los mios, simplemente todo era perfecto. 

Lentanmente me fui recostando en la cama, el beso fue tornandose mas apasionado,sus labios bajaron a mi cuello dejando leves besos; repartio unos cuantos besos y volvio a mi boca, esto era encantador, lo extrañaba tanto pero, ahora lo importante es cuidar de nuestra bebe.

-No te imaginas cuanto te extraño- dijo separando sus labios de los mios

- Yo tambien te extraño y mucho- hice puchero- pero debemos cuidar a Zoe, ya despues tendremos tiempo para eso- dije mordiendo mi labio levemente

-Lo se bebe- me dio un rapido beso- Ya, mejor voy a pintar el cuarto para que en la noche vayamos a cenar ¿te parece?- pregunto

-Si, me encanta la idea- dije

Mario me ayudo a levantar de la cama y juntos salimos de nuestra a habitacion hacia la de nuestra bebe, esta quedaba al lado. Era del mismo tamaño de la nuestra, en un extremo se encontraban todos los implementos necesarios para pintar y en el otro estaba la cuna, un sofa pequeño, el closet, un televisor, entre otras cosas. Obviamente todo estaba completamente forrado para que no se manchara de pintura rosa.

Mario abrio el bote de pintura y senti que el olor revolvio todo mi estomago.

-Amor mejor me voy, estare en el primer piso- dije saliendo de la habitacion y buscando las escaleras.

Baje hasta el primer piso y llegue a la sala de TV, me sente en el sofa.Encendi el TV y coloque Netflix.

-¿Ahora que veo? - He aqui mi dilema, nunca encontraba nada que ver, asi que busque en Google: Mejores peliculas de Netflix. Encontre una llamada Genius, se veia muy buena la verdad asi que le di play.

Media hora despues

El hambre me consumia,sin embargo solo se me antojaba un helado y de vainilla. El solo hecho de pensar que tenia que ir hasta la nevera para satisfacer mi hambre, me daba flojera pero al final me decidi. Le di pause a la pelicula y fui con pereza hasta la nevera.

Al abrir el congelador note que no habia helado. Enserio, habia caminado hasta aqui para nada,esto es mas que triste. 

-Llamare a Mario a decirle que quiero helado lol- dije- ¡Mario! ¡Mario! ¡amor!- le grite.

De inmediato se escucho un estruendo y senti como alguien venia corriendo rapidamente.

-¿Que paso? ¿Donde te duele? ¿Ya viene? ¿Donde esta el bolso? ¿A que hospital vamos? ¿A quien llamo?- pregunto alterado, yo solo comprimi mi risa.

Mario tenia partes de sus manos, pies, cabello,cara y pantalon color rosa. Creo que no esta pintando el cuarto, mas bien se esta pintando el.

-__(Tn) dime algo ¡Que hago! - dijo alarmado

-Caaalmaaa, solo es que mirate JAJAJAJAJA eres la pantera rosa en persona- rei fuertemente y Mario me miro serio.

-Todo gracias a tus gritos- respondio

-Perdoname bebe- dije caminando a la alacena por algunos paños para limpiar las partes rosas en su cara, me acerque a el con uno de los pañitos para limpiarlo- Es que queria helado de vainilla y ya se acabo- hice puchero mientras pasaba uno de los pañitos por su nariz.

-Eso es porque te comes un bote diario- rio 

-Cierto- dije pensando en lo que Mario habia dicho- Mejor ya no pintes mas, quedate aqui conmigo ¿Si?- hice mi cara mas tierna- ¿Por favor? 

-Esta bieeeen, tengo hambre, vamos a cenar- dijo Mario

  -A Harry Sasson  please- hice puchero

-Obvio se que te encanta alli- dijo y yo sonrei

Subimos hasta la habitacion y ambos tomamos una ducha, despues de esto opte por vestirme con un vestido color blanco muy delicado junto a unas sandalias doradas que me encantan, deje mi cabello suelto y agregue un poco de maquillaje a mi rostro, como toque final tome un pequeño bolso dorado para que combinara con mi oufit de hoy.

Mario se vistio con una camisa manga larga color azul palido, junto a unos jeans negros y unos zapatos negros.

La noche transcurrio tranquilamente, me diverti mucho, siempre lo hacia cuando estaba con Mario.El siempre hacia que todos los momentos a su lado fueran unicos y especiales.