Perdóname hermana (jelsa)(editada)

El testamento

El primero en despertar fue Jack, por un momento olvidó que estaba haciendo en esa habitación y porque se sentía tan bien después de tantos años y quien era la rubia que se encontraba en sus brazos, sonrió al recordar lo sucedido en la noche anterior "Elsa" pensó feliz, desde que había reconocido a sí mismo que la amaba se sentía feliz, a pesar que Anna tenía poco de muerta, Elsa era como un soplo de brisa para su alma atribulada, quería estar con ella todo el tiempo que le fuera posible, no quería perderla de vista, todo lo que había pensado de ella desde que la había visto esa mañana en el funeral de su esposa, quedó en el olvido al conocer a esa mujer que dormía confiada en sus brazos, se prometió así mismo protegerla, ya había sufrido mucho, los 2 habían sufrido y era ahora justo que fueran felices, no permitiría que la mentiras, malentendidos y medias verdades los separará de la única mujer que le robó su corazón, supo instintivamente al ver sus hermosos ojos que ya había perdido y roto la promesa que se había hecho así mismo de no amar a nadie, y al ser tan ciego a sus sentimientos perdió 12 años que pudo haber sido feliz al lado de Elsa, pudo haber estado con ella en el embarazo, probablemente Kriss estaría vivo, tantos hubiera...

Ya nada de esos "hubiera" existía debía ahora ser fiel a sí mismo y seguir a su corazón como debía haberlo hecho tantos años atrás. Miró el rostro amado, los feos hematomas no disminuían la belleza de Elsa, pero le daba rabia pensar en cómo se los habían hecho, sintió miedo en pensar que, si no le hubiera hecho caso a Jake, Elsa podría haber muerto y él se hubiera sentido demasiado solo en un mundo sin ella. La abrazó un poco más fuerte y la beso en la frente, haciendo que Elsa abriera sus ojos, al principio lo vieron adormilada, reflejaban felicidad y amor, después vio que se abrían más a causa de la sorpresa de verlo tan cerca y no pudo evitar reírse al oírla decir

- ¡Sigo soñando! -exclamó Elsa, sonrojándose al oírlo reír, había pensado que la noche anterior había sido un hermoso sueño, haciéndola que durmiera en paz sin pesadillas en mucho, pero mucho tiempo, pero al sentir los labios de Jack en su frente se despertó, pensó que seguía dormida hasta que vio los hermosos ojos de Jack que la miraban con ternura contenida que pensó que seguía soñando hasta que lo oyó reír feliz. No sabía qué hacer, ni siquiera se atrevía a respirar

-No, linda, no estas soñando-dijo risueño Jack sin soltarla- pero respira, porque si Baymax o Punzie te ven sin respirar te van a negar el alta.

-Cielos Jack, cómo puedes bromear-dijo sonriendo Elsa, respirando otra vez

-Porque puedo

-Oye, esa es mi frase-lo regañó riendo con él, ella adoraba su risa, cuanto tiempo sin oírlo reír, se quedaron en silencio mirándose otra vez, cada uno agradeciendo la presencia del otro, hasta que Elsa tuvo el valor de hablar

-Jack, aún siento algo por ti- dijo bajando la vista con timidez- pero no sé si sea correcto aún no ha pasado un mes del funeral de Anna y después de anoche, no se...

-Elsa-la interrumpió Jack con dulzura- yo me di cuenta que te amo y quiero estar contigo y con Jake

-No bromees, Jack-dijo Elsa con tristeza- no puede ser cierto, no me confundas Jack, yo no soy Anna y no quiero ser un sustituto de ella en tu vida.

- Elsa, querida Elsa-dijo Jack besándola hasta que la vio sonrojar-Anna era el sustituto de ti, tú jamás de ella. Estaba ciego de celos por la relación que tenías con Kristoff, en estos días que estuviste tan grave y que casi te pierdo-la abrazó un poco más- me puse a pensar y la memoria es un músculo curioso, porque recordé desde el día que tropezaste conmigo en la universidad, porqué desde ese día quise invitarte a salir, conocerte, pero Kristoff me amenazó con romperme mi linda sonrisa si jugaba contigo, pensé que eras su chica por lo que me alejé, cuando supe que Anna era tu hermana, mi inconsciente me hizo que saliera con ella para poder estar cerca de ti.