El desayuno había pasado con tranquilidad. Ya habían pasado varios minutos desde que había terminado de comer, pero seguía sentada cómodamente en su asiento, pues sus piernas no reaccionaban. Tras haber terminado con el primer entrenamiento, sus piernas le pedían a gritos un descanso más prolongado, pero el día apenas y comenzaba. Al mirar el reloj en su muñeca, notó que faltaban quince minutos para que fuera la hora del siguiente entrenamiento, por lo que, a su pesar, se puso de pie, y tras dejar la bandeja con los trastes en donde le señalaba los carteles, salió del comedor de las instalaciones.
Antes de dirigirse hasta donde comenzaría su segunda prueba, caminó a paso rápido hasta su recamara, que estaba algo apartada de las partes más concurridas. Tras asearse un poco, se dirigió hacia donde seguramente la esperaban ya.
Al entrar en la sala, su reloj anunciaba que aun le quedaban cinco minutos para que el entrenamiento comenzara, por lo que simplemente se dignó a mirar lo que había en el sitio. La sala era bastante espaciosa, del otro lado de la sala se encontraban varias dianas de color blanco y negro, así como otros objetivos menos convencionales. A su derecha, encontró algo que realmente la sorprendió para bien, había todo un arsenal de arcos y flechas esperando por ella. Un arco de color magenta llamaba demasiado su atención, así que lo tomó.
-Veo que ya elegiste arco-se escuchó detrás de ella, al voltear se encontró con Clint- tienes buen gusto-confesó.
-Es hermoso, simplemente perfecto-comentó observando con detenimiento y admiración aquél arma.
-Bien, ya nos ahorramos lo de escoger arco, solo falta que tomes las flechas y las coloques en el carcaj-mencionó cruzándose de brazos.
Gaia de inmediato entendió que estaba pidiéndole que escogiera por sí misma, y fue lo que hizo. Sabía que necesitaba una punta sencilla pero que realmente le fuera útil para lo que seguramente harían por un par de horas. Había puntas de todos los materiales posibles, mas eligió las de aluminio-carbono, pues sería la primera vez que utilizaría algo de calidad, y no pensaba desaprovechar la oportunidad.
-Muy bien, ahora solo queda que aprendas a posicionarte y podrás intentar dar en el blanco-mencionó Clint con una sonrisa.
Gaia lo miró con una ceja alzada, y a pesar de las palabras del hombre, la ojiazul preparó el arco, y sin titubear apuntó a las dianas, dando justo en el blanco. Una sonrisa de orgullo tomó el rostro de la joven, mientras que Clint la miraba con una pequeña sonrisa.
-No te voy a mentir, estoy impresionado, pero tu posición no es la adecuada-mencionó mientras se acercaba a ella- estás dando a esa diana, pero tu cuerpo parece que quiere ir con la que está a la derecha-
Gaia escuchaba atenta a las indicaciones que Clint le daba, pues sabía que el experto era él. Le gustaba que le hablara con sencillez, sin tratarla como una completa novata, aunque sabía que aun había demasiado que mejorar para poder denominarse buena.
Con cada indicación por parte de Clint, podía apreciarse la mejora, cosa que sorprendió a la pelinegra, pues para poder llegar a ese punto en clases de arco, tenía que pasar por demasiadas clases, hasta casi cumplir un año en el lugar, o hasta más.
La clase transcurrió con tranquilidad, con Clint explicándole con detenimiento todo aquello de lo que Gaia aun carecía a la hora de utilizar el arco. El agente le tenía extrema paciencia a la ojiazul, quien de vez en cuando se frustraba si las cosas no le salían a la primera. Eso había sido una buena impresión para Clint, pues podía notar el empeño que ella ponía de su parte para poder hacer las cosas bien y no tener que hacerlo esperar mucho, mas constantemente le recordaba que era su primer día en SHIELD y que aun quedaban demasiadas clases por delante.
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Mystic: The little Avenger
Fanfiction"Todos estamos destinados a hacer grandes cosas, pero hay personas que tienen un destino más grande, y a la vez más difícil." Gaia era una chica fuera de lo común, pues a la tierna edad de 4 años, se dio cuenta de que tenía poderes, pero para no lla...