Mystic: The little Avenger

Capítulo 80

Muchos dicen que la manera en que comiences el año será lo que te destinará el resto de este, pero la joven realmente esperaba que no fuera cierto. Era primero de enero cuando Jarvis les mostró la presencia de energía desconocida en una ciudad de Alaska. Gaia maldecía a todos los que se encontraran utilizando el cetro por haber arruinado el primer día del año.

-Empezamos el año estupendamente-comentó la joven con sarcasmo.

-Tenemos que avisar a los demás-mencionó el rubio, para después contactar con Tony.

-Buenos días, parejita-los saludó el millonario­- ¿a que se debe su llamada?-

-Jarvis ha detectado energía en Alaska-informó el capitán.

-¿Qué? Mándenme las lecturas- el semblante de Stark cambió drásticamente al escuchar al rubio-Iré para allá enseguida-

-Dirígete a la torre, Gaia y yo iremos a Alaska-

-¿Qué? No, esperen a que llegue-Tony se sintió preocupado por el plan que tenía el rubio.

-Si esperamos más tiempo podrían desaparecer-comentó la ojiazul. Stark no se miraba nada convencido de que solo fueran ellos dos.

-HYDRA aun te tiene como objetivo, Gaia-Steve sintió un leve pinchazo en el pecho al escuchar las palabras del millonario.

-Lo sé, pero es lo único que podemos hacer-respondió la joven-estaremos bien-

-Bien, los miro en unas horas- dijo el morocho no muy convencido, pero después cortó la comunicación.

-Tony sigue preocupado por ti-Steve había comenzado a dudar de que aquello fuera buena idea.

-Ya lo sé, pero no puedo simplemente permanecer aquí, después de todo, soy parte del equipo-Gaia se mantenía tranquila, pero se encontraba molesta-le hemos arruinado año nuevo a Pepper- se quejó la pelinegra.

-Estuvieron una semana en Noruega, algo debieron de haber visto- respondió Steve-prepárate, nos vamos en veinte minutos-

Gaia no tuvo más opción que irse a cambiar de ropa, pero todo el tiempo estuvo maldiciendo a todos los integrantes de HYDRA que se encontraban por el mundo, pues realmente habían arruinado su día. La joven había reservado en un restaurante, pero era evidente que no podrían ir, así que llamó para cancelar la reservación.

Pasados los veinte minutos, la ojiazul se dirigió al hangar para encontrarse con Steve. La pareja terminó de preparar la nave y se dirigieron a Alaska. El trayecto duraría cerca de cinco horas, tiempo en el cual siguieron contactándose con el morocho, quien tardaría cerca de siete horas para llegar a la torre. Pero también se comunicaron con el par de espías, los cuales se encontrarían con Stark más tarde.

-Estamos en posición, capitán-informó Jarvis.

-Bien, mantén el quinjet en el aire, Jarvis-ordenó-¿Lista?-Gaia asintió, para después abrir la rampa y ambos saltar.

Los vengadores caminaban por la nieve en busca del lugar donde Jarvis había encontrado la energía, pero parecía que el sitio se hubiera desintegrado.

-Mierda, hace mucho frio-se quejó la joven, para después comenzar a elevar su temperatura corporal.

-Eso llamará demasiado la atención-mencionó el rubio, viendo como el lugar por donde pasaba la joven se iba derritiendo.

-Igual llamaremos la atención cuando estemos ahí-

El camino pareció eterno, pero a lo lejos comenzaron a ver una gran casa abandonada. El par de vengadores decidió separarse para cubrir más terreno, pero teniendo en cuenta que tenían que ser cuidadosos para no estar en gran peligro. Gaia se había dirigido hacia lo que parecía ser la parte trasera de la casa, pero parecía que estuviera abandonada, hasta que comenzó a ver varios agentes salir del lugar.