Me dicen Alejo

Encuentro casual (Fin del blog)

Su mano rodeaba tu cintura que ancha y fructífera te regalaba la mas hermosa mirada y las mejores sonrisas que jamás me diste a mi. Ahi sentí que realmente no me diste nada importante para vos, porque advertí desde mi ángulo de espectador, que nunca te había visto así, casi angelical.En mi soledad, habitual y casi carcelaria, tomaba un café mas de tantos en ese shopping del cual soy habitué.El destino quiso que te encontrase de casualidad, o tal vez no, dado que sabés perfectamente que suelo encontrarme ahí.No creo que tengas ganas de encontrarme, o de planear encuentros casuales, dado que en el sueño donde estás inmersa sin dudas no hay lugar para nadie mas que tres.Tampoco quiero un lugar ahí, de donde me fuí casi huyendo cual león herido de muerte.Pero fue lindo verte, feliz, entera y futura.El tiene el porte de un hombre grande, como a vos te gusta, y ojos claros que quizá herede tu mejor sueño, ese que todavía no nace, pero que ya vive en vos para siempre.Caminabas segura pasando de su mano a sus brazos, de su boca a su mirada. Y entre risas no me viste, o fingiste no verme, solo para demostrarme que ya no me necesitás.Y al fin tuve lo que siempre quise. Aunque vos creas que sentí dolor, sentí Paz.El cuento tuvo un final feliz para vos. Nunca volverás a estar sola. Ya tenés un motivo por el cual vivir infinitamente, aún en varias vidas, mas allá de todo.El ruido de mi cuchara en el café, me obligó a bajar la vista y perdido en mis pensamientos, no te ví mas. Te perdí de vista, ahí, inmovil y silencioso, solo, tranquilo como esperando llegar mis sueños tambien.Pedí la cuenta, me puse de pié, tomé mi saco y mi notebook, dejé una propina generosa al mozo que me había servido el café con el cual pude verte feliz, y me retiré de esa confitería para recorrer vidrieras y distraerme un poco.Y caminando entre los pasillos del shopping te volví a ver. Cargabas bolsitas pequeñas de coloridas formas infantiles.Tratando de ocultarme solo para que ni siquiera me recuerdes un segundo, entré en un negocio de ropa y tomando algunas, fingí estar interesado, cuando en realidad queria esconderme, pero a la vez seguir viéndote sonreir feliz.Pero el imán de los ojos pasados vuelve una y otra vez, y al girar tu mirada me viste entre la gente que compraba en ese lugar.Pude solo sonreirte a lo cual correspondiste iluminadamente bella.Ni un gesto, ni un saludo, solo una mirada y una sonrisa.El lenguaje de tus ojos diciéndome: SOY FELIZ !!! ALE SOY FELIZ !!! y tu mano pequeña sobre tu sueño como señalándome tu futuro de amor inigualable. Una mirada y una sonrisa que jamás te ví, mas sana que nunca, una mezcla de esperanza y alejada infinitamente de todo rencor, odio o maldad.El no pudo advertirlo, quizá porque no te conoce lo suficiente, quizá porque no sabe quien sos o quien soy yo.El siguió su camino, soltándote la mano, viendo vidrieras junto a vos pero en otro lugar, sin darse cuenta que yo estaba correspondiendo tu mirada y que me regalabas tan hermosa sonrisa.Cuántas cosas mas no verá de vos? me pregunté.Bajé la mirada, interesado en la ropa que tenía en mis manos, y la compré casi por instinto.Al salir del local, ya no estabas.Caminé despacio, planeé mi tarde laboral, subí a mi auto, y mientras conducía tu mirada y tu sonrisa volvían una y otra vez, SOY FELIZ ALE, LO LOGRÉ, me parecía escuchar en tu voz.El sol brillaba mas que de costumbre, el calor era casi sofocante, y a pesar de lo que tenia planeado, en lugar de ir a la oficina, fui a mi casa, y quitándome mi correcto y elegante atuendo de gerente, me arrojé en la cama y soñé con un hijo mío, maravillosamente amado por mi, ese que algún dia tendré, ese que llegará para iluminarme también, y por el cual sigo viviendo.Luego me dormí y olvidé tu belleza, tu sonrisa, tu mirada, y al despertar, te dejé ir.

Me dicen Alejo (Fin del blog)