Te Protegeré → Steve Rogers || Capitán América

Capitulo: 23

La peor decisión de mi vida.
Estoy en problemas...
***

Mi aniversario con Steve fue de locos. Desde las dos de la tarde que él llegó a casa, entregamos nuestros obsequios, y luego algo llevó a una cosa y así, hasta que terminamos desnudos en el suelo, cansados, después de once horas haciendo el amor de todas las maneras posibles.

La verdad que en el momento no sentí lo duro y frío que estaba el suelo, hasta que me desperté a las dos de la madrugada, con el cuerpo adolorido, y con marcas de los dedos de Steve a los lados de mis muslos.

-¿Duelen?-. Pregunto Steve con voz ronca. Acaricio la marca con delicadeza y solo negué.
-Me duele en cuerpo...-. Me acaricie el cuello, y me acomode aun lado de Steve.- Este suelo es más duro de lo que pensé.

Acaricie su pecho derecho, mientras sentía sus dedos acariciar mi espalda, en forma de círculos. Los latidos de su corazón eran acompasados. Y sus besos en mi frente eran relajadores.

Estaba por dormir de nuevo, cuando un ruido extraño provino del estomago de Steve. Levante la cabeza y lo miré

-¿Estas bien?-
-Tengo hambre-

Se levanto del suelo, y camino desnudo hasta la habitación. Me enrolle la sabana en el cuerpo y me senté en el suelo. La espalda me dolía a horrores y la cabeza no se diga. Y les digo que cuando me pare del suelo, las piernas me temblaron, y ¡Pense que me iba a caer! pero por suerte no lo hice, y solo encontré el equilibrio perfecto. Recogí mi ropa y me vestí. Las caderas me dolían demasiado, y tengo que decir que Steve me dio bien duro, pero fue genial.

[***]

3:00 de la madrugada, y Steve y yo estábamos adornando nuestro hogar con adornos de navidad, y conversando de nuestros recuerdos navideños de hace dos años atrás, cuando Tony se cayo por las escaleras y tuvimos que llevarlo al hospital, porque se había dislocado el cuello. Si, pasamos la navidad en un hospital, pero fue emocionante, porque al día siguiente vimos el amanecer con el puente de Brooklyn iluminado con luces navideñas.

Cuando terminamos de poner el arbolito y encender las luces, nos sentamos en el sofá abrazados. Kili se acostó sobre las piernas de Steve, con su nuevo collar rojo (Obsequio de mi parte). Y luego todo quedo en silencio.

-Steve, el sábado, Noe va a tener una fiesta en su casa, e invito algunas amigas, y bueno...-
-Quieres ir-
-Si-
-Claro que puedes ir...-
-Pero será como una pijamada, entiendes, me quedare durmiendo en su casa-

Deja de mentir- Me reprendía mi subconsciente. Le estaba mintiendo de nuevo, para ir a una alocada fiesta. Prometo portarme bien.

[***]

La fiesta era lo mejor de todo. Las bebidas, los chicos guapos y la música. Mi mejor amiga y yo bailamos y procuramos no separarnos. Conversamos con algunos de nuestros compañeros de clase, nos tomamos fotos, y hubo mucho más alcohol. La droga iba y venia por todos lados, nos ofrecieron un montón, hasta que mi relajada amigas acepto éxtasis.

-La vamos a partir en dos, vamos Ruxandra no tengas miedo, solo sera una vez.
-No lo se, Noe... me prometí no hacer nada para decepcionar a Steve.
-¿Lo vez por algún lado?-
-No.
-Porque él no está. No tiene porque enterarse, solo sera la mitad de una, y la única en toda la noche, luego iremos a mi casa y al día siguiente haremos que nada sucedió. Steve no se enterara. Una vez por tu vida.

Lo pensé por unos segundos y acepte. La peor decisión de mi vida.

-Hasta el fondo-

Noemi me entrego mi pequeña mitad de éxtasis y sus cherry bomb. Me lo tome en segundos, y no sentí nada extraño, hasta el minuto que empecé a ver todo alejado y en zoom a la vez. Los colores se volvieron más fuertes, y me sentí extrañamente emocionada, riendo, bailando y hasta con ganas de tener sexo. La cabeza me daba vueltas, y para el final de la noche, ya veía doble.

Noemi se me había perdido, y estaba con un chico guapo, llamado Jackson, en la sala de estar de la casa, rodeado de gentes por todas partes. Estábamos sentados en el sofá, cuando el chico, trato de acercarse más de la cuenta. Ya casi tenia sus labios en mi boca, cuando añadió:

-¿Qué tal si vamos a mi departamento, hacer cosas sucias?-

Su asqueroso aliento a alcholo y a cigarros, golpeó no cara. Las ganas de vomitar fueron inevitable. Lo aparte de un empujón, y entre tanta gente, logre salir hasta la acera de la casa. Me incline para vomitar, cuando las sirenas de los policías sonaron en la esquina de la calle. Todo se volvió una total locura, las personas salieron de la casa. como si fueran ganados, buscando sus autos, otros corriendo calle arriba y desapareciendo. Busque a Noemi con la mirada, pero ni por un momento la vi.

Y lo siguiente que hice, fue lo más estúpido. Montarme en el auto de un desconocido. Minutos más tarde, acabamos detenidos por la policía.

-Su licencia. -le pregunta el oficial al chico. El empieza a buscar en su billetera hasta que...
-No lo tengo conmigo.
-Su identificación.-Hace lo mismo otra vez, pero no lo ha traído.
-Revisaremos su auto, por favor bájense.

Nos bajamos del auto, y las manos empezaron a sudarme, y mis piernas temblaron. Sentí un mal presentimiento, y lo peor de todo, era que ambos estábamos drogados. Aun sentía el efecto del éxtasis y no podía mantenerme equilibrada. El segundo guardia me miro entrecerrando los ojos, y del auto, saco un medidor de alcholo. Nos hizo soplar, y el porcentaje que dio fue alto, y lo peor de todo fue que el otro guardia encontró drogas en el auto, y cuando nos alumbró a la cara, ambos sin duda teníamos signos de drogados.

-Me temo que tendrán que venir con nosotros-. Dice uno de los guardias.

Estoy en graves problemas...

***
Hola!

Espero que les guste el capitulo! Les agradezco sus votos y que me lean.

Que tengan un buen año y les deseo lo mejor :D

Besos desde Panamá