Te Protegeré → Steve Rogers || Capitán América

Capitulo 54: ¿Esclavo de Cráneo Rojo?

Capitulo: 54 ¿Esclavo de Cráneo Rojo?
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La Mansión de los Vengadores...

Por órdenes del doctor, era mejor pasar tiempo en cama, y no forzar mi cuerpo. Había recibido advertencia de otro posible aborto si no me cuidaba como debía. Tony le propuso a Steve que debía mudarse en la mansión de los vengadores donde tendría la protección necesaria para tener al bebé. Y por ende debía pasar encerrada en la mansión por el resto de los meses, hasta que naciera el bebé.

Me sentía sola, y muy aburrida. Pasaba la mayor parte del tiempo sola, mientras los otros hacían su papel de héroes. Kor tenía una niñera robot que se ocupaba de él todo el tiempo, mientras que no tuviera que cuidarlo. Según Steve, yo no estaba dispuesta para cuidar de alguien más, solo de mi misma y al bebé.

Y como todas las mañanas, desperté sola en la cama con la pereza en su punto, y las ganas de hacer algo diferente. Me levante, me lave los dientes, me bañe, y luego me vestí con ropa cómoda, antes de ir a ver a Kor, para luego bajar a tomar mi desayuno ya preparado por Steve. Siempre me dejaba algo listo antes de irse a Shield.

En la mitad de la escalera, escuche voces que provenían de la cocina, cuando me encontré con Thor junto a Clint y Nat, ambos chicos estaban cocinando, y Nat estaba colocando los platos sobre la mesa.

-¿Que hacen aquí?- Me recargue contra la pared, y cruce los brazos sobre mi abultado vientre.

-Despertaste!- Dijo Clint extendiendo un plato lleno de papas rayadas por enzima de la barra a Natasha. -Pensé que iba a tener que levantarte con jarra de agua bien fría.

-Ay que gracioso...- Rodee los ojos, y me acerque a la barra. -Huele bien...- Me puse de puntillas y alcance el tarro con galletas. -¿Cuando llegaron?-

-Hace como una hora- Respondió Thor, teniendo un plato, mientras Clint servía las salchicha en salsa.-Roncas muy fuerte, ¿Lo sabías?-

-¿Enserio?- dije incrédula. -Steve nunca me lo ha mencionado. -se quedo pensativa.

Cuando nos movimos a la mesa, todos estábamos en un silencio tranquilo, nos mirábamos de vez en cuando, y cada vez que miraba a Thor, este me guiñaba un ojo.

-Thor, y.... ¿Como va todo en Asgard?- Le pregunte tomando un vaso agua.

-Muy bien, por ahora mi padre no ha tenido problemas en el reino- Comento con la boca llena de comida.

-...y tu hermano?- Pregunte. Sentía curiosidad.

Thor se volvió serio, con el rostro ensombrecido. Lentamente coloco el vaso en su lugar, y trago en secó.

-Mi hermano escapo Ruxandra, no sabemos ha donde a ido, pero te prometo que le encontraré.

Asentí algo temerosa. Temía que Loki viniera por mi y me hiciera daño, en el estado que me encontraba. Ni siquiera tengo la certeza de si podre apelar su lado bueno, si le llego a volver a ver. Quizás le hice mucho daño. Y cometí un grave error, en pensar que sería distinto tener a otro hombre en mi vida.

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En otra parte...

-¡¿Que crees que haces Fury?! ¡Ya lo tenia en mis manos!-

Steve no lucia para nada tranquilo. Estaba molesto, después de que Nick Fury interviniera en su misión de capturar al criminal fugitivo, de la carnicería de lichtengarten. Werner Von Grim, era su nombre, y El Capitán América lo había capturado, luego de una extenuante lucha con los hombres de Werner. Ser uno contra cinco es duro, incluso para el Capitán, quien estaba acostumbrado que esto siempre le sucediera. Aún así, los malos recibían su merecidos.