No pude siquiera reaccionar a la figura frente a mis ojos, porque tan pronto la puerta se abrió fui halada por un par de brazos. La rapidez con que la puerta se cerró de nuevo fue abrumadora, pero aún más el encontrarme con los ojos oscuros de mi lobo amigo.
—¡Brennan! —exclamé, pero una de sus manos cubrió mi boca de inmediato.
Fruncí el ceño sin comprender su exabrupto y, ya que estaba imposibilitada para hablar, le miré esperando una explicación. Mis manos estaban tras mi espalda y casi la totalidad del cuerpo de Brennan me cubría. Obtuve un asentimiento de su parte y una súplica para que mantuviera la calma y por ningún motivo hablara o le interrumpiera.
Asentí de igual forma, aceptando sus palabras y fue liberada del apretado agarre. Llevé mis manos a mi cabello, para colocarlo de nuevo lejos de mi rostro, y esperé.
—No tendrías que estar aquí, no a esta hora. Faltan poco para el almuerzo y muchos de los pasillos se llenan de gente. Es demasiado peligroso que andes por aquí sola...
Iba a preguntarle entonces qué hacía él allí, pero la respuesta llegó a mí demasiado rápido. Abrí los ojos por la sorpresa y, por supuesto, él lo vio, porque me tomó por el codo y me arrastró por un portal que llevaba a una sala contigua.
En realidad, la sala vendría a ser en la que estuvimos primero y la recamara era definitivamente en la que estábamos en ese instante. Era una réplica exacta de la que me habían dado a mí, aunque yo no tenía una recepción con chimenea y muebles —por lo que pude ver a simple vista, mientras era arrastrada, claro—.
—¿Qué en el mundo haces con ella? ¡Casi mueres!
—Vamos, Ilora, pensé que si estabas aquí al menos escucharías antes de juzgar.
Bien, tenía razón. Era demasiado fácil simplemente juzgar y culpar a los demás por nuestros problemas, y allí estaba yo regañando a un amigo que creí perdido en lugar de abrazarle y preguntarle cómo había estado todo el tiempo.
Asentí dándole la razón y sonreí, porque en verdad me alegraba verlo, antes de lanzarme en sus brazos. Brennan reaccionó lo suficientemente rápido para no caer y me sostuvo de vuelta, riendo.
—Me alegra verte de nuevo —dije, con mi rostro en su pecho y sintiendo sus suaves risas.
—Esa me parece una reacción más adecuada.
—Yo no lo veo igual, pero nadie ha preguntado, ¿cierto?
Nuestras risas se detuvieron de inmediato y, sintiéndome fuera de lugar, me deshice del abrazo de Brennan y me separé lo suficiente para encontrarme frente a Cassiodora. Vestía de manera informal, muy diferente a las anteriores veces que la había visto, y por el suave corte de su vestido, que permitía una visión completa de sus piernas y brazos, pude notar las marcas de laceraciones que corrían a lo largo de su cuerpo.
No fue una imagen agradable y me sentí un monstruo al ver en su piel las huellas de algo que yo había provocado. Cerré los ojos al sentir el peso de la realidad y lo cruel que había sido. Porque sí, ella me había condenado a vivir en unas condiciones de vida deplorables, pero lo que veía frente a mis ojos era la antítesis a lo que siempre había querido hacer. Estudiaba medicina para salvar vidas, para curar heridas como la suya, no para provocarlas.
Y, en todo caso, ni siquiera podría alegar defensa propia, porque recordaba bastante claro que ella solo había permanecido en silencio recibiendo todo lo que le di.
—Se curará —concedió Brennan, rompiendo el silencio que llenó la estancia y abrí los ojos, hallando la mirada conciliadora de un hada—. Es igual que lo que sucedió en Everard, solo que esta vez prefirieron mantenerla despierta y esperar que sus heridas sanaran a su tiempo, que es mucho más rápido de lo que un humano normal podría hacerlo, e incluso un licántropo —explicó mi amigo y caminó lejos de mí para rebuscar en la habitación en la que estábamos—. Antes, habían eliminado las huellas, pero la mantuvieron durmiente, ahora hicieron todo lo contrario.
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CDU 3 - La elección de Cassiodora [BORRADOR COMPLETO]
FantastikCuando todo lo que amas amenaza con destruirse, ninguna elección debería ser juzgada. Con la partida de dos miembros de su grupo, ciñéndose sobre todos, Ilora tendrá que continuar su viaje. Sin embargo, recibirá una invitación a la que no podrán dec...