El Bebe

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Abrí los ojos con dificultad, es como si estuvieran pegados, y pude ver un techo completamente blanco. Comencé a mirar hacia los lados y pude ver que estaba rodeada de cables por todas partes. No sabía que hacia aquí, lo último que recordaba era entrar en la discoteca con Seb, a partir de ahí mis recuerdos desaparecian.
Mientras yo trataba de ordenar mis pensamientos pude notar como alguien abría la puerta y instantáneamente cerré los ojos. Pude notar como alguien entraba en la habitación y se acercaba a mí. Quería abrir los ojos pero sabía que no era buena idea así que me quede con ellos cerrados.

-Pequeñaja, cuando vas a abrir esos preciosos ojitos verdes? Te echo muchísimo de menos, esta semana sin ti se me está haciendo muy dura.

Nunca creí en el amor verdadero, eso de que te enamoras y quieres pasar la vida con esa persona, siempre me pareció una estupidez pero desde que estoy contigo eso ha cambiado. En este momento un pedacito de mi corazón está contigo así que por favor no me dejes, necesito ese pedacito conmigo, te necesito conmigo-dijo el

Estaba a punto de llorar, el era maravilloso, no merecía lo que estaba pasando, así que abrí los ojos y le cogí la mano.

-Lau?-dijo con sus ojitos azules empañados en lagrimas.

-Sigo aquí, y lo voy a estar por mucho tiempo-dije yo sonriéndole

-Dios, estas despierta, no me lo creo-dijo el mirándome.

-Que estoy despierta, pesado-dije yo riendo

-Dios, te eche de menos-dijo el abrazándome

Seb fue rápidamente avisar al médico que vino para hacerme un par de pruebas rápidas que determinaron que estaba bien y que mañana me darían el alta aunque debería guardar reposo durante una semana. Después de eso, Seb y yo nos volvimos a quedar solos.

-Seb, que hago aquí?-pregunte yo

-Vaya, el medico comento que podía pasar, que es lo último que recuerdas?-pregunto el

-Pues entraren la discoteca contigo, que paso?-pregunte yo

-Me lo temía, tu y yo nos peleamos y pues, acabaste corriendo empapada en lagrimas con la mala suerte de que te encontraste un coche en tu camino

-Vaya y porque nos peleamos?

-Pues me deje llevar por los celos y por lo que la gente dice.

-Vaya estuve con otro chico?-dije yo

-Si, con tu hermano-dije yo

-Estabas celoso de mi hermano?-dije yo riendo

-Si, yo aun no lo conocía y no te rías de mi, porque esto es algo serio, te cabreaste mucho y con razón y aunque no te acuerdes de nada quiero pedirte perdón por portarme como un idiota-dijo el

-Cariño, aunque no sepa porque, sabes que estás más que perdonado y sobre tus celos, es una tontería, por mucho que yo hable con otros chicos yo te quiero a ti, vale? Podrían ponerme ahora mismo a míster universo delante y yo te seguiría escogiendo a ti, y no llores que si no lloro yo-dije yo limpiando sus lagrimas para acercarme a él a abrazarlo

-Te quiero mucho-dije yo besando mi frente.

-Y yo a ti pero porque estas tan tenso?

-Yo? No estoy tenso-dijo él con un tono de nerviosismo en su voz. Algo pasaba y no me lo quería contar y parecía algo gordo.

-Cuéntame va, me estas asustando, tan gordo es?-dije yo

-El bebe...-dijo el dejando caer alguna lagrima

-Que pa... No! Dime que no!-grite yo y él se acerco a mí y me abrazo fuerte.

Había perdido a mi bebe.

La PeriodistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora