DON'T! [Di Angelo]

Three: Sueños (Rosas rojas)

Entraba y salía de ella a un ritmo frenético, los gemidos, la sensación de humedad...Estaba volviéndose loco por ella, porque a pesar de estar entre sus piernas, no era suficiente. Necesitaba más de ella, y algo le decía que jamás iba a ser suficiente de Luka. 

Nico despertó por tercera vez esa noche, solo en su cama y con una prominente erección en sus pantalones. Hazel dormía pacíficamente en su respectiva cama, completamente ajena a su pervertido hermano.

Nico miró su más reciente problema, nadie le dijo al hijo de Hades que una vez despertado su lívido iba a tener tantos sueños eróticos, tan realistas e iba a tener tantas erecciones con solo recordar a Luka... Lo cual era raro debido a que se suponía que él era gay.

Debía sugerirle a Quirón que el campamento impartiera clases de educación sexual.

Miró su erección y una idea salió de su mente para bajarla, él podría... Tocarse. Le daba vergüenza el sólo pensar en eso pero su entrepierna le dolía y quería dormir. Se puso de pie en silencio y se encerró con seguro en el baño de su cabaña.

En otro lado del mundo, otra persona que estuvo con Nico en esa habitación, en esa cama, esa noche, tenía problemas similares sino es que iguales.

Luka se despertó a las dos y treintaiocho de la madrugada, bañada en sudor y sumamente caliente. Era la tercera vez en la semana que se despertaba así.

Dioses, estaba volviéndose loca. Completamente chiflada, con esos sueños que le traían a Nico devuelta, tan vívidamente . Ojalá su tío Hipnos no hubiese visto esos.

Había hablado en tema con Alexandra, que le dijo que debía pensar y reconsiderar su sexualidad. Además le aseguró que cosas como está podían pasar, después de todo eran adolescentes con hormonas,  y se enojó ya que el chico no le había dado su número de teléfono, a pesar de que Luka le aseguró que no importaba en lo más mínimo.

Intentaba dormir, pero su mente era bombardeada con recuerdos de la noche de hace seis días, en la que había perdido su virginidad, en retrospectiva había sido algo impulsiva,-Y tonta e irresponsable.-  Pero no se arrepentía de lo que hizo con el chico del club.

Solo esperaba que él no le hubiese contagiado algo raro, ya que a pesar de haber usado condones, tenía ese miedo.

Miró sus dedos un minuto y después se encerró en el baño. Ella iba a arreglar ese problema.

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Nico se despertó a las ocho treinta de la mañana, decidió que no quería estar más en la cama y se fue al comedor, luego de asearse y ponerse ropa. Hazel y los otros chicos de su mesa, casi se desmayaron al ver a Nico despierto tan temprano.

Léase "Los otros chicos de su mesa" como: Percy, Jason y Thalia, que estaba en el campamento con el resto de las cazadoras porque Artemisa estaba haciendo quien-sabe-qué-cosa, que incluía rituales un poco satánicos y beber veneno.

- ¿Estás bien? -Le preguntó Percy, al verlo más parecido a un muerto de lo que normalmente parecía, además de despierto muy temprano.

Nico los miró y estrelló su cara contra la mesa, sin mediar palabras.

- Has estado raro este último tiempo.- Comentó Hazel, como quien no quiere la cosa. Si algo sabía de su hermano era que no le gustaba que se metieran en sus asuntos, por lo que había que intentar que él se los contará sin preguntarle directamente que estaba mal.

-Y aún más los últimos seis días.- Dijo Jason, para luego recibir un codazo de Thalia.

- Yo...-Nico estaba a punto de hablar, pero fue interrumpido.