Capítulo veintitrés

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Derek 

Así como ella es feliz, yo también lo soy. Poco a poco me fui enamorando de Cecilia, lo malo es que tuve que irme a otra ciudad durante cinco años, pero la relación ha continuado.

Aquí estoy yo para hacerla reír una vez más , para que confíe en mi y deje sus miedos atrás y me deje seguir en su corazón.

Aquí estoy yo. Abriéndole mi corazón, cerrándole el paso el dolor, llenando su falta de amor.

Cecilia ha pasado por cosas muy difíciles, nos íbamos a casar, pero su hermana murió y no pudimos continuar con nuestros planes.

Luego conseguí trabajo en otra ciudad, allí duré cinco años lejos de ella , terminé mi carrera y de inmediato comencé a trabajar.

Cuando se acabó todo entre Adelyn y yo, llegó Cecilia como una bendición, aún recuerdo el momento en que todo cambió.

Mi vida pasaba de largo, vacía y sin emoción, me sorprendió el poder que hay en este amor .

Valió la pena, me inspiran sus palabras, sus sentimientos, su dulzura, es una bendición.

Presumo que tengo la mejor novia del mundo, un verdadero amor nunca se esconde.

Es para mi un tesoro , y quiero estar con ella de cualquier modo.
Me fascina el saber que ella me quiere y me desea, como un loco la menciono todo el día.

Mi más bonita casualidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora