Mi más bonita casualidad

Capítulo veintinueve

-¿Derek, me puedes decir que traes entre manos, casi te comes a esa muchacha con los ojos, la conoces? Preguntó Osvaldo.

-Si Osvaldo, es aquella muchacha que me ha hecho dudar sobre mis sentimientos hacia Cecilia, a ella fue quien salvé en el accidente que te dije, ella fue mi novia en mi adolescencia, sabes que me fui obligado por mis padres, pero no sabes lo que pasó hoy- dijo frotando sus manos y sentándose.

-¿Cómo que te ha hecho dudar? Estás comprometido Derek, tú no eres ese tipo de hombre, piensa bien las cosas-dijo Osvaldo.

-Si Osvaldo, pero mi relación con Cecilia ya no es igual, la quiero pero ya no la amo, no me casaré con ella, hoy mismo voy a aclarar todo,-dijo Derek

Hoy nos encontramos en el ascensor, hoy me enteré que al fin se decidió por ser Arquitecta y catadora de vinos, y que vino aquí por una recomendación de su antiguo jefe, bueno pues resulta que cuando entramos al ascensor me dejé llevar por la emoción de volver a verla y la besé, mejor dicho nos besamos, porque ella me correspondió bastante bien, ni siquiera Cecilia me ha hecho sentir lo que sentí con ese beso, sentí como si la hubiese besado por primera vez -dijo Derek suspirando.

-¿Me estás diciendo que te gustó ese beso? Te dejaste llevar Derek. No creo que seas tú quien haya besado a otra mujer-dijo Osvaldo.

-Me gustó el beso, me gustó como me hizo sentir, me hizo saber que todavía somos el uno al otro, tenemos tantas cosas en común, me gusta ella, es perfecta para mí, no creía en el amor a distancia, pero Adelyn me demostró que si existe, no sabes como me sentí cuando la salvé, como si el destino hubiese planeado todo esto para que nos volviéramos a encontrar.

Amigo, no te voy a negar que me siento mal por Cecilia, pero hoy mismo hablaré con ella y le diré toda la verdad. -dijo Derek caminando por toda la oficina.

-Amigo te deseo mucha suerte, espero que aclares muy bien lo que sientes, Cecilia es una gran mujer y eso le dolerá mucho, pensé que estabas muy seguro de lo que sentías por ella-dijo Osvaldo.

-Créeme hermano que yo también pensé eso, pero me equivoqué, nos vemos luego voy a hablar con Cecilia-dijo Derek.

-¡Suerte hermano!-dijo Osvaldo.

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Osvaldo es un gran amigo de Derek, cuidó de Cecilia cuando Derek se fue a otra ciudad, lo que él no sabe es que Osvaldo se enamoró de Cecilia, él sabe que es indebido, pero conoce muy bien a Derek y sabe que si le dice lo que siente por Cecilia él entenderá perfectamente y su amistad seguirá igual, pero Osvaldo tiene miedo de la reacción de Cecilia.

Derek fue a buscar a Cecilia al trabajo y fue una sorpresa para ella, ya que él nunca iba a visitarla al trabajo, por eso se lo encontró extraño.

-¡Derek, mi amor!¿ Qué te trae por aquí?-dijo Cecilia

-¡Tengo que decirte algo Cecilia!-dijo acercándose a ella.

-¿Qué pasa Derek?-dijo Cecilia preocupada.

-Creo que es mejor que hablemos en otro lugar-dijo Derek.

-¡No Derek , no le des tantas vueltas al asunto y dime lo qué tengas que decir!dijo gritando.

-De verdad, no está bien que hablemos de eso aquí.

-Dime. No le des tantas vueltas.

-Cecilia, creo que lo mejor es que nos demos un tiempo, quiero que terminemos nuestra relación-dijo Derek

-¿Es en serio Derek? Sé que las cosas entre nosotros no van muy bien , pero podemos arreglarlo. Dijo cruzada de brazos.

-No Cecilia, siento que ya nada es igual, te quiero muchísimo, pero ya no siento lo mismo, espero que me entiendas.

-Ok Derek, entiendo lo que me dices, me duele pero es la verdad. Quisiera intentar arreglar las cosas, pero te entiendo.

-Gracias Cecilia, sé feliz estoy seguro que encontrarás el verdadero amor.

-Si Derek, te deseo lo mejor, sabes que siempre seré tu amiga, tenía la ilusión de que formaramos una familia, pero estamos destinados a no ser, te entiendo y gracias por todo.

-Gracias Cecilia, sabes que te quiero, cuenta conmigo siempre, adiós Cecilia, me hiciste muy feliz, pero esto llegó a su fin.Para que no te vayan con el chisme, me está empezando a gustar otra mujer, sé que te duele pero es mejor que te lo dijera yo.

-Es cierto Derek, gracias por la sinceridad y la confianza, te quiero .

-¡Adiós Cecilia! Dijo Derek.

El destino a veces hace planes perfectos, y hay veces que esos planes no nos gustan y queremos modificarlos, pero lo cierto es, que lo que está destinado a ser, será.