Prefiero Quedarme Callada

Capítulo 13

-¿Tarada?-susurré.

-¿Qué?-

-Nada.-dije rápido.

-De acuerdo.-dijo con algo de duda. -¿Qué te dijo Lila?-me miró.

-Una duda que tenía.-dije simple.

-Wow, ¿no me dirás?, siempre nos decimos todo.-apoyó sus brazos en la mesa y me miró.

-Mmm... es algo personal, no me lo tomes a mal.-le dije.

-De acuerdo.-se recargó en la silla.

-Buenos días.-entró la maestra. –antes que nada tengo que informarles algo, necesito dos voluntarios para que ayuden a limpiar unos salones de la escuela, los necesitamos para unas juntas de los clubes escolares. Estuve pensando y los voluntarios serán... ____ y Jena.-sonrió.

¿Mi suerte no podría ser peor?, tengo que estar unas horas con la chica que quiere robarme al amor de mi vida... increíble. Rodé mis ojos tan fuertes que sentí que se voltearían, mire a Jena que sólo platicaba con la chica a su lado y me miró de reojo. La clase continuó, pasaron las demás clases hasta llegar al receso. Me levanté y fui a mi casillero por algo de dinero.

-¿Comemos juntas?-voltee y era Lila.

-Ay...eres tú, me asustaste un poco.-di un suspiro.

-Perdón.-sonrió.

-Emmm... no lo sé, Harry y yo siempre almorzamos juntos.-hice una mueca.

-Oh, bueno no hay problema.-sonrió.

Camine a la cafetería después de dejar a Lila cerca de mi casillero, entré, tomé lo que encontré, que no era algo muy... grande; pero era comida. Caminé a los jardines, supuse que ahí estaba Harry y adiviné. Al acercarme más me encontré con una desafortunada sorpresa.

-Harry.-dije algo disgustada.

-Ya entendí, este también es tu lugar.-me respondió la est*pida de Jena.

-Perdona, pero no estaba hablando contigo.-le respondí.

-____... solo estábamos hablando.-dijo Harry.

-Sí, lo sé, sólo respondo a lo que esta retrasada me dice.-¿yo dije eso?

-¿Qué cosa?-se ofendió.

-lo escuchaste, eres una R-E-T-R-A-S-A-D-A.- dije lento.

-____, ¿Por qué le dices eso?-la defendió.

-Wow, ¿ahora te pones de su lado?-dejé mi comida y me crucé de brazos.

-No dije eso.-respondió.

-Pues parece, pensé que eras mi amigo.-bajé la mirada.

-____...-se acercó.

-¡Harry!, mejor déjala, ¿no ves que me acaba de insultar?-le exigió.

-Disculpa... pero, ¿Quién eres para decirle lo que tiene que hacer?-la desafié. ¿Yo estoy haciendo esto?

-pues... si no hubieras llegado yo ya sería...-

-¡Jena...!, no sigas, solo es un mal entendido.-la calló.

-No, deja que siga hablando.-quite las manos de Harry.

-Ya no diré nada, sólo me voy.-tomó sus cosas.

-No te vayas.-le suplicó Harry. Me sentí la chica más patética en ese momento, juro que mis lágrimas querían salir disparadas.

-Luego nos vemos.-le ofreció una amplia sonrisa.

-Está bien.-le respondió a la sonrisa. Jena dio media vuelta y se fue caminando.

-No puedo creerlo.-susurré al borde del llanto.

-¿Qué no puedes creer?-me miró.

-Que tú... y ella...-balbuceé.

-No somos nada.-aclaró, aun así mi corazón no está tranquilo.

-Eso espero, porque sino... soy capaz de arrancarle las malditas extensiones que tiene pegadas en la cabeza.-dije con furia.

-____... ¿Por qué armaste este escándalo?-