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Hoy es un nuevo día, me pongo un vestido negro con un corte grande en mi pierna izquierda, hoy iré a investigar a mi madre sobre su desquiciada vida, si es una maldita zorra. Cuando bajo papá está tomando un café me ve y sonríe, mi viejo mi dulce primer amor verdadero que tengo, es el único hombre que nunca me ha roto el corazón.

-A dónde vas tan hermosa.-me besa en la mejilla.

-Voy a ir arreglar un asunto.

-Me tengo que ir, Kim me ha llamado que ya están todas listas para el té-.dice mi madre apurada.-Bye.

-Adiós-.dice mi padre.-Esa mujer se la pasa con sus amigas.

-Se me hace extraño que se la pase con sus amigas, y no con su esposo y su hija.-le digo.

-Que tramas.

-Nada... me tengo que ir, te amo papá-.lo beso.

-No desayunaras.

-No te preocupes, como algo en el camino-.le digo.

Salgo de la casa y veo que sale el auto de mi madre, esa hija de puta esta urgida para que haya salido así de repente, me subo al auto y mi seguridad conmigo, tecleo algunos mensajes a Ritchie, y le digo que le debo un favor, también reviso las fotos de mi nuevo integrante soplón del FBI, así que paramos enfrente del hotel de siempre veo a mi madre desde lejos que se baja de aquel Audi a4, lleva un vestido rojo, mi madre tiene el cabello rubio y claro es rubia se ve joven porque se ha hecho mil cirugías en su cara, veo que entra al hotel.

-Quiere que ya entremos, señorita Miller.

-No aun no, esperemos media hora.

Sigo tecleando mi teléfono y checando correos de mis clientes y coqueteo con alguno de ellos me gusta jugar con ellos, son tan graciosos. Media hora después bajamos del auto y cruzamos la calle nos dirigimos a la puerta principal y me encuentro con la recepcionista.

-Buenos días señorita, desea registrarse.

-No solo vengo a ver, Ricardo sosiega está aquí-.sonrió.

-No se lo puedo decir, señorita.

-Señorita, si quiere seguir viva deme la copia de la llave de su habitación, y te perdono la vida.-le digo enseñando el arma.

-Esta. Está bien-.sonríe nerviosa y me da la llave y el número de habitación.

-Eres sensacional.-le sonrió.

Yo y otros tres hombres subimos en el ascensor en el piso 5, cuando bajamos del ascensor buscamos la habitación 100, ninguno de sus guaruras están aquí así que entro abriendo la puerta y oigo gemidos y gritos de mi madre, todo está obscuro prendo la luz y los veo desnudos, mi madre está montado arriba de él, y ni si quiera se dan cuenta , empiezo aplaudir sonriéndoles sarcásticamente y ellos paran mi madre sale de él haciendo un pequeño gesto y se cubre con la sabana, el Ricardo y su cara de estúpido me mira, me dan asco.

-Vaya, que tenemos aquí a la señorita Té y al mejor amigo de la familia Miller, dios mío esto será una gran noticia.

-Ni te atrevas a decirle, a tu padre lo mataras.

-Eso lo hubieras pensado el día en que comenzaste a follar con este idiota.-les digo-.Que haces con ese teléfono-.le quito el teléfono y lo piso con mis tacones.-A quien intentas hablar a tu esposa.

-Que quieres hacer.-me dice.

-Muchas cosas que tengo en mente, ambos se burlaron de mi padre y mi padre merece justicia...

-Pero..-dice mi madre y la callo.

-Cállate, no te conviene hablar porque sabes lo que hiciste en mi miserable vida.

-Aun sigues con eso.

-¿Qué sucede?-Dice Ricardo.

-No te ha dicho, que se follo a los hermanos Collins y aparte dejo que me violaran, por unos cuantos pesos.

-Pero qué demonios, estás loca.

-Ya cállate, no tienes derecho de decir o defenderme después de lo que he visto.

-Perdóname hija, perdóname te juro que eso ya no va a volver a pasar.

Saco el arma de mi liguero y se lo apunto en su cabeza se ve tan vulnerable tan mierda, le doy un tiro en la cabeza y queda recostada, Ricardo se asusta y le sonrió.

-También te toca a ti.

-Nooooo.

Le disparo, en su pene y luego en la cabeza, detesto hacer esto pero no tengo otra alternativa, les digo a mis hombres que me ayuden a ponerlos como estaban cuando prendimos la luz, así que así quedan, salgo de la habitación y Louis me da un pañuelo y me limpio la cara y las manos llenas de sangre, cuando bajo la señorita de la recepción le doy 10 mil dólares por su silencio y me voy entro a mi auto y desde lejos veo que la policía llega y nosotros nos vamos llego a mi casa me doy una ducha y como normal como siempre lo hago, y con una sonrisa de oreja a oreja, sé que me dirán que estoy loca pero esos hijos de puta no merecían vivir.

Veo que mi padre viene a mí con una tristeza.

-Gloria, han matado a tu madre y a Ricardo.-lo abrazo.

-Y quien fue.

-No lo sé, me han mandado las fotos para reconocer el cuerpo de tu madre y he dicho que si es ella, pero los encontraron en una situación incómoda.

-¿Cómo los encontraron?

-Follando.

-Vaya.-digo sorprendida.-Y te duele lo que paso.

-Sí, es mi mujer.

-Papá, no te sientas mal pero si los encontraron follando, de todos modos a los dos hijos de puta los ibas a matar.

-Tienes razón, hija.-me abraza-.Tu sabias algo de esto.

-No-.miento-.Necesito que te relajes, y te duermas.

-No me trates como si fuera un niño.

-Lo eres para mí, papi.-le doy un pequeño beso en la frente.-Hasta mañana papá.

-Hasta mañana, preciosa.

Salgo de su habitación, y mis lágrimas comienzan a salir de mis ojos, estoy furiosa y estoy triste por ello sé que lo que hice está mal, pero eso a quien le importa. Siempre he sido una de las chicas mas reservadas con sus sentimientos así que no puedo. Me visto y voy hacia la funeraria a pedir la caja y las flores y el lugar, nunca me gustaría morir, pero siempre hay un ciclo de vida al cual tenemos todos.

La Jefa de JefasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora