9

12.7K 600 20
                                    

Salimos de la casa de Ritchie y nos dirigimos a una de las pizzerías más cercanas de su casa esa pizzería la atiende italianos el jefe de ese negocio tiene por lo menos 10 pizzerías alrededor del país es un buen tipo y un gran amigo de mi padre. Así que entramos al lugar afuera dice Lalo's ya que el dueño se llama Eduardo y la gente que lo estima lo llamamos Lalo, tiene en la entrada una gran bandera de Italia y por lo menos 30 fotos con los famosos, empresarios y políticos. Me encanta venir acá porque me recuerda la ciudad en donde nació mi padre, Italia.

-Ho mira mi pequeña ahijada.

-Hola tío Lalo.

-Como ha estado mi pequeña.-me abraza

Lalo es un tío gordo y con nariz algo grande sus ojos son color verdes le decimos tío porque es casi como un hermano de mi padre.

-Bien, y usted.

-También, que bueno saber de ti, dile a tu padre que me debe una cena.

-¿Por qué?, ahora que han apostado.

-Desde que ambos eran pequeños, dijimos que ustedes algún día andarían.-me guiña un ojo.

-Noo... noo somos amigos aun.

-Si tío Lalo, somos amigos.

-Pero desde acá se derrama miel .-rie.-... apoco no CHICOS.

Todos contestan con una sonrisa diciendo que sí. Yo me pongo demasiado roja, porque sé que es verdad.

-Gracias.-sonrió.

-Bueno siéntense, que quieren cenar.

-Una pizza mediana de pepperoni, como siempre le ha gustado a Gloria.

-Claro que sí, para eso estamos, para consentirlos.-nos sonreímos.-Bien, entonces ahora vuelvo quieren que les traiga algo de tomar.

-Una cerveza.-le señalo.-Que sean dos.

-Ahora se los traigo.

-Vaya...-suspira.

-Que sucede, no nos vemos bien juntos.-le sonrió.

-No se.-me rio.-Se cómo te mira el Scott.

-Ritchie, el solo es mi guardia.

-Pero te has acotado con él.

-Para que te digo que no si... sí.

-Dios santo, Gloria con quien no te has acostado.

-Contigo.-me rio.

-Y como paso eso.

-Una fue en la mesa del comedor.-me interrumpe.

-GLORIAAAA.-me grita.

-Shhhhhhh....

-Jamás volveré a comer en ese lugar, es más tiras esa mesa y te compro otra.

-Para que tú y yo la estrenemos.-le coqueteo.

-Gloria, eres una zorra.-se ríe.

-Dime tu que no te has acostado con una.

-Nooo...

-Enserio.

-Enserio que no, eso lo prometí, cuando la perra de mi ex esposa, me dejo con Luna.

-Entonces no ha tenido...

-No Gloria, nunca he tenido sexo, con alguien más, hasta que el día en que encuentre la indicada y claro no voy a follar, le voy hacer el amor a eso se les hace a las damas a quien uno ama.

-Vaya.-me sorprendo.

-Listo chicos su pizza y sus bebidas.

Al salir de la pizzería vamos callados sin decir nada, sé que algo de los sentimos lo mismo, aunque tengo miedo de todo. Llegamos al hospital me pongo la capucha y los lentes para que no me reconozcan, así que entro al hospital infantil, ahí es donde tienen a Luna, ya que tiene cáncer terminal y no la podemos sacar de ahí, está más segura ahí. Entramos al cuarto de Luna está pintado de azul y tienen en su cama como si fuera un castillo cuando me ve salta de emoción me abraza y me llena de besos, su sonrisa es la más bella.

-Haz venido a verme.

-Claro que si.-le beso la frente.-Veo que tu padre te tiene demasiado consentida.

-Ni te creas, no me ha llevado a Macdonals.

-Gloria, dile porque.

-Estas mala, pero te prometo que te llevare pronto.

-Ella si es buena, papá.

-Aish.-contesta Ritchie.

Mientras leo un libro a Luna, ella se queda profundamente dormida. Ambos salimos del hospital y nos dirigimos a mi casa, ya que me siento un poco incomoda después de que nos digieran que nos veíamos bien juntos. Llego a casa junto con Ritchie bajamos de su R8 y entramos a casa papá está en su despacho lo sé porque escucha Frank Sinatra.

-Chicos...-nos abraza a ambos.

-Papá, que sucede te vez feliz.

-Adivinen quien me acaba de llamar.

-¿Quién?-.Ambos contestamos.

-Lalo, supe que fueron a cenar juntos, ya son.-aplaude.

-Padre, tú y Lalo ya son viejos ven mal.-le digo.

-Como sea, debo irme a descansar, mañana tengo cosas que hacer.-dice Ritchie.

-Te acompaño a la puerta.-le digo.

Salimos del despacho y nos dirigimos hacia afuera donde esta estacionado su R8, y él se pone enfrente mío.

-Bueno Gloria, fue un placer cenar contigo.

-Gracias Ricardo.-le sonrió.-Espero que pronto se repita.

-Espero que sea pronto.-me besa mi frente y se aleja de mí.

-Esto es una despedida.-le digo.

-Si porque me voy a dormir, buenas noches Gloria.

-Buenas noches Ritchie.-le grito.-RECUERDA QUE MAÑANA TENEMOS UN FUNERAL.

-No me lo pienso perder,.-ríe.

Él se va entro a mi casa veo el reloj y son las 12:30 hoy fue un día un poco difícil y raro a la vez, sé que siempre nos han dicho de ambos pero realmente me siento rara. Subo a mi habitación y me pongo mi vestido de pijama y una bata negra veo mi cuello y veo parte de mi cuerpo, y llego a pensar.

Que se sentirá ser amada y que alguien se entregue a ti como a nadie, aún no he intentado eso, pero realmente me gustaría que me pasara eso, que alguien me amara tanto que no tuviera miedo de mí ni de mi vida simplemente amarme tal y como es mi vida, es lo único que siempre deseare.


La Jefa de JefasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora