Relaciones

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Llamada telefónica

Liam: ¿Hola?
Rae: Hola... ¿Quien es?
Liam: Soy Liam, ¿no guardaste mi numero?
Rae: Liam, disculpa, estaba dormida...
Liam: Lo siento Rae no podía dormir.
Rae: Liam son las tres de la madrugada, trata de dormir. (Dije mirando el reloj)
Liam: Sólo quería agradecerte por lo de hace rato. No te había dado las gracias.
Rae: Tranquilo, a mi me gusta ayudarte.
Liam: Perdón por llamar a esta hora.
Rae: Puedes llamarme cuando quieras, sólo que esta vez me agarraste por sorpresa
Liam: Te dejaré dormir tranquila, hasta mañana pequeña Rae
Rae: Hasta mañana señor Payne, trata de dormir.
Liam: Lo haré. Hasta luego.
Rae: Hasta luego.

Hoy sería la fiesta a la que los chicos me habían invitado, pero estaba decidida de que si Liam no iba yo tampoco iría. El era la persona con la que más conexión había tenido y me sentiría mal estando en un lugar festejando mientras que la persona que me invitó se queda en su casa recordando que su novia lo engañó.

Así que solo esperé a que Liam se sintiera un poco mejor para saber cuál sería su respuesta.

Estuve meditando respecto al amor y las relaciones y todo es tan complicado, es tan complicado querer a alguien y entregarse a ese alguien. A mi edad siempre he fantaseado con conocer al chico perfecto con el cual sentiría esa conexión inmediata y en el que se desarrolle una relación fuerte a medida que pasa el tiempo, ese chico con el que me casaré y tendré una hermosa familia pero siento miedo de cometer errores en mi vida y que poco a poco esos sueños se vayan apagando y que al final del cuento no consiga a ese chico perfecto sino a alguien por el cual después deba sanar.

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