Amanecer

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Era él. Él era Harry, un chico con ojos verdes, rulos y tatuajes; no me lo imaginaba así.
Él era un chico “Rudo”  no tenía ni un poco de parecido a quien me había imaginado.

Estuve en la piscina un buen rato pero ya tenía mucho frío y aunque la estaba pasando muy bien decidí salir un rato.
Liam se había quedado con los demás chicos así que yo me enrollé en mi toalla.

Saqué mi celular y vi la hora, eran las tres de la mañana. También vi un mensaje de Camile preguntando como estaba pero era muy tarde para responder.

Estuvimos disfrutando de la fiesta un par de horas mas hasta que comenzó a salir del sol, señal de que debia volver a casa así que nos despedimos de todos y caminamos hacia el coche de Liam, estaba un poco lejos de la casa, ya que habían bastantes autos estacionados afuera de la casa de Hayley.

–Por cierto, no te dije que el color negro se te ve muy bien. –Dijo Liam

–Gracias, soy muy sexy ¿verdad? –Bromeé con lo que él me había dicho anteriormente.

–No tienes idea de cuanto lo eres. –Sonrió– La pasé muy bien contigo hoy Rae. –Dijo bajando la mirada.

–Igual yo, señor Payno.

Llegué a casa muy cansada, eran las 7:00 am y creo que dormiría hasta la noche de lo cansada que estaba.

Liam se despidió de mi con un beso en la mejilla, cuando volteé a verlo entrar a su casa él ya me estaba mirando con una sonrisa.
Entré a mi casa, me puse la pijama y apenas me acosté en mi cama caí en un sueño profundo.

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