La cena en casa de los Böss ha sido bastante divertida, los chicos les hablan a cerca de sus viajes y los conciertos que han dado en casi toda Europa, Leila le reclama a su padre a modo de burla el que no le hubiera contado que su primo era un famoso baterista.
—Bueno en vista de ya hemos roto el hielo, yo creo que Keri y tu, lleven a los chicos a la zona Bohemia—dice Lea mientras comienza a retirar los platos de la mesa.
—Si claro y me los llevo caminando, o me cargo a dos en un hombro y Keri, me ayuda con los otros dos— dice en tono irónico
—Claro que no pequeña—dice John, le prestare el coche a los chicos mientas Keri y tu les muestran la ciudad— dice John en el mismo tono de Leila, y ella solo hace una mueca de desagrado.
—Bueno y entonces nos vamos— dice Tom poniéndose de Pie y mirando a Leila
— Si ya nos vamos, iremos por unos abrigos — dice Leila mientras se pone de pie.
—Gustav, toma las llaves del coche e ignora el mal humor de Leila, eso es lo que hacemos tu tía y yo. — dice John mientras saca las llave del coche de su bolsillo.
Una vez todos listos se suben al coche del padre de Leila que para suerte de todos es una camioneta bastante amplia, Leila toma posesión del asiento del copiloto, mientras Gustav va al volante, en la parte trasera Geo, Tom, Keri y Bill.
— ¿Estas incomoda? — pregunta Bill en tono bajo solo para que Keri le escuche, pues esta va en una posición un tanto rígida y muy pegada a él, pues Tom y Geo se encuentran jugando, y en cada movimiento la empujan más hacia Bill.
—Un poco— dice en el mismo tono de Voz que él.
—Oigan ustedes dos, se podrían comportar—dice Bill mirando por encima del hombro de Keri—nos vienen aplastando.
—Perdón— dicen ambos mirando solo a Keri e ignorando a Bill.
Leila se gira sobre el asiento para mirar lo que viene sucediendo en la parte trasera, mira a Keri y le sonríe y esta tímida le regresa la sonrisa.
—De regreso creo que te sentaras a mi lado— dice Leila en forma apenada, pues la cara de incomodidad de Keri es muy evidente.
— ¿Falta mucho para llegar al famoso Barrio, Leila?—pregunta Gustav.
—Unas cuantas cuadras, ahora solo tenemos que buscar un lugar para estacionarnos—dice Leila mirando alrededor.
—Será mejor que nos estacionemos en él la zona de Restaurantes, siempre hay Vigilancia y está más cerca de la zona Bohemia—dice Keri mirando hacia la ventana, cuando corre su mirada se encuentra con la mirada de Bill, lo que hace que se sonroje, e inmediatamente vuelve a su posición inicial.
—Si es un buen lugar, además podemos pasar al local de Luca a beber algo—dice como si esta fuera su idea más brillante.
— ¿Ustedes beben? —pregunta curioso Tom.
—Yo solo un poco, Keri no lo hace ni por error.
—Escuchaste Gustav no son tan niñas, ¿como tú dices? —dice Tom en tono de reproche, pues Gustav solo se la ha pasado regañándolo, por sus comentarios.
—Claro que no somos unas niñas, ¿cuántos años crees que tenemos, Gustav?— dice Leila mirándolo algo ofendida.
—la verdad, no lo se pero aun no llegan ni a la mayoría de edad— dice mirando la avenida llena de coches.
— ¿Cuántos años tienes Keri? —pregunta Bill curioso.
—Diecisiete — dice algo tímida y con la vista fija al frente
—y tu Leila ¿Cuántos años Tienes? —dice Tom curioso
—La próxima semana cumplo diecisiete—dice orgullosa de su edad— ¿ustedes? —dice en el mismo tono curioso de Tom.
—Bill y yo tenemos veinte, Gustav tiene veintiuno y Geo... el hobbit ya es un abuelo, así que su edad no importa—dice Tom mientras se ríe, pero Geo le ha golpeado el brazo—hay ya perdón, Geo tiene veintidós dice sobándose el brazo.
—Vaya si que están viejos—dice soltando una risa.
—Leila, dime donde tengo que estacionar— dice Gus, cambiando de tema
—Así, hazlo aquí— dice mientras se gira a ver el lugar en donde dejaran el coche, todos desciende del coche, Leila se gira para tomar el brazo de Keri, pero Tom y Georg se le adelantan y la toman a ella por cada brazo, lo que no le hace ninguna gracia a Gustav, quien camina mas a prisa para poder separar a esos dos, de su prima.
— ¿Siempre has vivido en Dresde Keri?— pregunta Bill, mientras comienza a caminar al lado de Keri.
—Perdón — dice mientras lo observa, pues iba con la mirada puesta en la escena que se montaban, Geo, Tom, Leila y Gustav.
— ¿Que si has vivido siempre en Dresden?
—Si siempre lo he hecho… ¿Por qué?
—No, por nada, simple curiosidad— dice mirando a Gus que ahora lleva a Leila de la mano, seguido por atrás de Geo y Tom.
Keri lo mira confundida, pero decide no prestarle mayor importancia aquella pregunta y ambos comienzan a caminar en dirección del famoso barrio, que a estas horas se encuentra en pleno punto de ebullición.