6

201 15 20
                                    

—¿Quién fue el que me tiró?—me pregunta Marisol.

No entendí ni una palabra de su pregunta dirigida hacia mí. ¿Quién fue la que hizo que se cayera? No lo sé. Yo solo vi como se cayó...y tambien una mano. Pero, esa mano nos estaba acompañada por el brazo ni demás partes del cuerpo. Era solamente una simple mano que sujeto a Marisol desde el pie y provocó su caída.

—¿Qué?

—¿Quién fue el que provocó que me cayera al suelo?—repite.

—Ah, pues, no lo sé.—digo confundida—Solamente vi una mano que te sujeto del pie.

—Y, ¿Quién era entonces?

—Nuevamente no lo sé. Era solamente una simple mano, no tenia brazo ni cuerpo. Solamente esa mano provoco que te cayeras.—confieso.

»Tendrías que haberles dicho que no habías visto nada, ahora estarán mas confundidos« escucho decir a mi conciencia.

Miro hacia el techo y no veo a nadie, claro, era ella nuevamente; mi conciencia.

—¿Qué te pasa, Aylen?—pregunta Jazmín. Segurome vio ver el techo con un gesto confundido.

—Nada.—conteste, estaba pensando en miles de cosas y no quiero explicar todo.

Decido abrir el libro. Paso hoja por hoja tratando de encontrar alguna que otra pista que me ayude a saber que tengo que hacer ahora. No encuentro nada, no está ni lo que ya venía con el libro; los retos que te daban para destrozar el diario. Estaba completamente vacío, al menos así lo veía yo.

—Chicas, ya es de noche. Búsquense algún salón donde quieran pasar la noche, donde la pasarán hasta que podamos salir.—dice Melina mientras viene caminando hacia nosotras.

—¿Cualquier salón?—pregunta de curiosa Giuliana.

—Si—. Contesta. —Cualquier cosa si les pasa algo, yo voy a estar en el salón de lengua.

—Bueno, vamos a ir a los de cuarto, esos que están subiendo las escaleras del patio del fondo.—expliqué, sin importar las opiniones de los demás.

—Está bien. Vayan ahora—. Ordena.

Vamos hacia el salón donde vamos a "Pasar la noche" en todo este período que estemos encerrados.

Subimos las escaleras y abrimos la puerta. Al entrar siento que alguien me toca la espalda, me volteo rápidamente y no había nadie, siquiera una de mis amigas. Lo ignoro y como siempre nos ponemos a escribir en el pizarrón.

"Aylén & Lucas" Escribe Jazmín.

Eso claramente nunca va a suceder.

"Deadpool, el puto amo" coloca Giuliana.

"El unicooornio volaador, ¿Donde estás, que no te veo?" Pregunta Luzmila.

"The Hunger Games, la mejor trilogía" pone Marisol.

"Larry is real" informo yo.

Dejamos el pizarrón lleno de cosas escritas y nos ponemos a hablar. Hablamos, hablamos y hablamos hasta que Jazmín dijo:

—¿Saben qué?¿Por qué no vamos al patio principal?—pregunta.

—Oye, claro.—respondo sonriendo mientras empiezo a sacarle fotos a un libro, lapiceras y hojas que estaban en un banco.

—¡Y nos ponemos a bailar!—dice Giuliana y saltamos de la risa. Creo que nos escucharon todos, aunque, acá arriba estamos solas.

—¡Si, si, si!—grita felizmente Marisol. Todas nos quedamos mirándola como si fuera una loca.

—¿Lo decís en serio?—pregunta Luzmila.

Marisol asiente la cabeza y entonces que vamos hacia el patio.

Al llegar se escuchan todos sonidos raros, no muy comunes de escuchar.

—Esto no será una buena idea...—susurro.

—¿Qué, Aylén?—pregunta Jazmín—. No respondo y sigo caminando.—Aylén.—dice Jazmín, tratando de que le responda. Ella lo logra.

—Tengo presentimientos. Esto es una mala idea, ¿Acaso no escuchas esos ruidos de fantasmas?—respondo—¡Claro! ¡Son fantasmas! Al menos eso creo.

—¡Ay!—grita Giuliana. Al voltearnos ella no está, desapareció. ¿Una de sus bromas, tal vez?


Atrapados En La Escuela. © [Libro 1 y 2/Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora