Imaginas Marvel #MEAs2016 #MEAs2k16

040 - Tony Stark

-     Tony, ¿por qué tanta prisa? – dijiste con los ojos cerrados. Tony te estaba llevando de la mano hacia no se qué que quería enseñarte.

-    Es una sorpresa. – dijo, bastante emocionado.

-    ¿Falta mucho? – te quejaste. Tony te había invitado un martes por la noche a su piso a las afueras de la ciudad. Al principio, te ibas a negar, acababas de llegar de tu trabajo y realmente estabas muerta del cansancio, pero en el último momento aceptaste.

-    ¿Desde cuándo te volviste tan quejica? – se quejó él.

-    Haber, estamos yendo al sótano de tu casa, por lo que seguramente tenga que ver algo con tu traje. – adivinaste.

-    ¿Por qué eres tan lista? – se quejó. Y tú sonreíste orgullosa de haber adivinado lo que quería enseñarte.

Pero, cuando abriste los ojos, no te esperabas lo que estabas viendo.

Había un tarje, como el de Iron Man, el suyo, pero de color rosa y con pegatinas de la Hello Kitty. Tenía puesto la cara de Hello Kitty donde se supone que debe estar el reactor, en el centro del pecho. El traje estaba hecho por un rosa más oscuro, y otro un poco más clarito. Te giraste para mirar a Tony, que te miraba con una sonrisa.

-    ¿Qué es esto?

-    Es un traje, - respondió él. – Tu traje.

-    Tony, - empezaste. – Ya te dije que no quería ningún traje. Con ser agente del SHIELD me vale. Ya tengo suficiente adrenalina en mi vida.

-    Pero serás Iron Woman.- dijo con voz melosa, pinchando tu cadera; para que cedieras.

-    Tienes que pensar en otro nombre, - te reíste de lo cutre que fue eso.

Tony se lo pensó por varios minutos.

-    ¿Iron Kitty? – intentó. Bufaste, negando con la cabeza. Aunque realmente te pareció bueno.

-    Además, - dijiste mirando el traje. – Ya sabes que no me gusta el rosa. Ni la Hello Kitty.

-    ¡Sabía que dirías eso! – gritó. Pegaste un bote del susto. – Y por eso te creé otro traje.

Se acercó a la pared a su derecha y pulsó un botón. La pared (que resultó ser una puerta) se abrió revelando un traje parecido al de Tony, pero era completamente rojo, sin amarillo. Tony sabía que el rojo era tu color favorito.

Tony sonrió victorioso cuando vio tu cara de asombro al ver el traje.

-    ¿Y ahora quieres ser Iron Kitty? – preguntó con guasa.

-    Nunca voy a ser Iron Kitty. – le aclaraste. – Pero sí que quiero probar ese traje.

Tony sonrió.