Imaginas Marvel #MEAs2016 #MEAs2k16

074 - Wade Wilson !

ATENCIÓN: Fondue. Lee bajo tu propia responsabilidad.

- ¿Cariño? – fue lo primero que Wade dijo al entrar a casa.

Wade acababa de volver de hacer su trabajo (básicamente de matar gente), y se paseó por toda la casa hasta que te encontró. Estabas en la cama, viendo la tele.

Viste a Wade entrando rápidamente por la puerta. A gatas por la cama se acercó a ti, te agarró del pie y tiró de ti hasta el borde de la cama.

Wade tenía esas necesidades (por llamarlo así). Cada vez que venía de su trabajo tenía ganas o de a) cascársela o b) echar un polvo. Y esta vez era la opción b. La verdad es que tú no te quejabas, en serio, Wade era como el dios del sexo, ¿para qué te ibas a quejar?

- Wade – le paraste con los pies en el pecho. – Primero dúchate.

- ¿Por qué? – se quejó.

- Sé por qué utilizas el rojo – le dijiste. Él te había cogido de los pies y empezó a hacer un camino de besos pro tus pies. – Quítate la sangre de quien quiera que sea primero.

- Entonces tu vienes conmigo a la ducha – tiró de tus pies hasta que tu culo quedó al borde de la cama y te llevó como si fueras un bebé al baño.

Wade te dejó sobre el borde de la mañera. Alargó la mano para rellenar la bañera de agua caliente y después empezó a quitarse el traje. Después pasó a quitarte tu pijama y os metisteis ambos en la bañera. Wade apoyó la espalda sobre la bañera y tú te sentaste entre sus piernas, de rodillas dándole la cara.

- Ya estoy limpio – dijo con una sonrisa.

- Qué impaciente eres, Wade.

Cogiste el gel, ignorándolo, vertiste un poco de él en tu mano y empezaste a frotar todo su cuerpo. Sus manos revoloteaban por tu cintura, e iban un poco más abajo hasta llegar a tu clítoris. Te mordiste el labio y él sonrió triunfante. Frotabas sus hombros cuando él se inclinó y capturó entre sus dientes tu pezón izquierdo. Chupó y mordisqueó ese botón que te hacía temblar. Pasaste las manos por su espalda pero después las volviste a dejar en sus hombros, para poder apoyarte mejor.

Que su boca estuviera en tu pezón y que su mano estuviera en tu clítoris te hacía desfallecer. Incluso no te diste cuenta cuando metió un dedo suyo dentro de ti y empezó a moverlo.

- W-Wade – gemiste, moviéndote al mismo ritmo que él.

- ¿Quién es la impaciente ahora? – preguntó con sorna y tú solamente gruñiste.

Wade sacó su dedo cuando le pareció y, con sus manos en tus caderas, te fue sentando en su polla.

Al principio moviste lentamente las caderas, hasta que te ajustaste, y después subías y bajabas con rapidez. El agua de la bañera se movía también, e incluso salía de ella. Wade te mordía los pechos y el cuello, mordía todo lo que podía alcanzar. Con las manos en tus caderas te ayudaba a llegar al clímax.

Hizo un camino de besos de tus pechos hasta tu oreja izquierda y susurró:

- Mi turno.

Con cuidado fue dejándote caer hacia atrás, acabando tú abajo y él arriba. Rodeaste su cintura y rápidamente empezó a joderte.

Apoyaste la cabeza en la bañera y dejaste salir varios gemidos.

Wade estuvo así por lo que pareció una eternidad, notabas como se iba construyendo tu orgasmo en lo más dentro de ti. Y con Wade diciendo cosas sucias en tu oído, tampoco pudiste aguantar mucho.