Epílogo

199 6 0
                                    

Tris POV






Cuando acaba la Ceremonia, como siempre los osados salimos primero. Corriendo por los cientos de escaleras que hay. Saltamos al tren y vemos como los novatos lo hacen. Al llegar al complejo saltamos. Este es el gran momento, veremos quién salta del tejado primero.

—Ahora escúchenme bien, alguien de ustedes iniciados, tiene que saltar de este tejado ¿algún voluntario?—dice Cuatro y todos se quedan en silencio.

Alguien da un paso al frente, veo su cara y es Miles.

—Emm... Yo—dice algo nervioso, la verdad creo que es algo genial.

—Adelante—digo esbozando una pequeña sonrisa.

Sube con cuidado, se arregla el cabello tan perfecto que tiene y se lanza. Todos nos asomamos. Rebota en la red y suelta una carcajada y un suspiro. Ahora que lo pienso, ¿quien lo va a recibir abajo? Entonces me lanzo rápidamente y Cuatro hace lo mismo.

—Bienvenido a Osadía—digo, esbozo una sonrisa y bajo de la red con un salto.

—Gracias—dice sonriendo.

Lo observo cuidadosamente. Tiene ojos verdes, su cabello es castaño oscuro, perfecto, sus rasgos son parecidos a los de Peter, pero no tanto. Miles es más guapo, pero más joven. Creo que así era Peter cuando fui una iniciada. Sólo que Miles si es agradable, no como Peter que era un moco. Pero Peter ha cambiado, y mucho.

Cuando bajan todos los osados abrazamos a Miles.

—¿Cómo te llamas?—digo—Estás en Osadía—susurro.

—Miles—dice con seguridad.

—¡Primer saltador Miles!—exclama Cuatro y todos vitorean a Miles.

Me recuerda cuando llegue a Osadía, fui la primera saltadora y Cuatro dijo lo mismo.

Jamás creí que fuera a hallar eso de mi: sentimientos. La verdad yo creí que era muy fría y seca pero al tener esos recuerdos siento que es muy valioso haber tenido la vida que yo tuve y los amigos que me acompañaron en ella.

Quiero que así se sientan todos, orgullosos por lo que son. Por sus virtudes y defectos. Por las personas que los rodean, porque sin ellas no somos nada, es como un libro sin páginas. Tú eres el libro, y tus amigos y familia son las páginas, si no tuvieras amigos ni familia, tú serías diferente y estarías vacío. Un libro sin páginas es sólo una portada a la cual juzgar.

Todos empiezan a caminar hacia el pozo y me sacan de mis pensamientos.

—Tris será su instructora—explica Cuatro.

Bostezos salen de mí cada 10 segundos. Tranquilamente me voy acercando poco a poco a Cuatro.

—Puedo ir a dormir sólo un par de horas—susurro a su oído.

—Está bien—dice y me da un beso en la mejilla—Exactamente a esa hora empiezan las peleas, ahorita solo es un recorrido. Descansa.

—Gracias—digo y me retiro lo más discreto posible.

Corro por los pasillos hasta mi habitación. Me recuesto en la cama y me quedo profundamente dormida.

Despierto y ha pasado una hora y siento como si hubiera dormido todo un día. Abro un cajón y busco entre mi ropa negra y roja una playera ajustada y unos mallones deportivos, entro al baño y me los pongo, me lavo la cara y sonrío. Veo en el espejo en frente mío a una chica que ha peleado, ha sufrido, ha reído y sobre todo, ha ganado. Pero esta batalla aún no termina y me aseguraré de proteger a todos aquellos que lo merecen, a todos aquellos que han dado su vida por el bien, que han luchado hasta no poder, cada día salgo con el propósito de luchar por la vida. No me detendré, no ahora que estamos a punto de lograrlo.

Es real, y no lo es (Divergente)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora