Dime Algo Sobre Ti

005

Charlie.

Me sentí morir, lo juro.

Intente con todas mis fuerzas poder nadar; moví mis brazos y piernas como solía hacerlo cuando nadaba pero no funcionaba, en cambio me hundía más y más. El agua comenzó a llenar mis pulmones. Ya me había rendido y había dejado de luchar contra el agua cuando alguien me lleva de vuelta a la superficie. 

Los brazos familiares de Spencer a mi al rededor y después los de Drew cuando no logré calmarme. 

Ahora estamos en la habitación, esperando a que nuestros padres lleguen por mi. He intentado decirle a mis hermanos que ellos se queden aquí, a terminar de pasar el fin de semana pero se niegan. Quieren regresar a casa junto conmigo.  

Al momento de regresar al cuarto me duche rápidamente con la puerta abierta -una vez que supere mi shock inicial-, mis hermanos querían que estuviera lo más cómoda posible por lo que me dieron algo de su ropa. 

  Estoy vistiendo unos pantalones deportivos y una sudadera de Drew. 

Me siento en un pequeño taburete que esta debajo de la ventana, mi vista clavada directamente en la alberca que ahora esta desierta, aunque la mayoría de mis compañeros siguen allá abajo, algunos de ellos  están rodeando a Justin, lo miro fijamente y en ese momento el eleva su mirada hacia mi y me ve directamente a los ojos a través de la ventana, se pone de pie y yo me alejo. Cuando vuelvo a acercarme él ya no se encuentra ahí, mi vista vuelve a la piscina. 

Alguien toca la puerta, Spencer abre y revela a mis padres ahí de pie, con la respiracion levemente agitada de venir corriendo por el pasillo.

—Mi dulce niña — dice mamá antes de venir a abrazarme — ¿estás bien?

Asiento, luchando porque las lágrimas no salga de mis ojos. 

—¿Vamos a casa?— pregunta papá.

—Si — digo con voz entre cortada. 

Mis hermanos toman nuestras pertenencias y salimos del cuarto todos juntos, después entramos al elevador que nos lleva a la planta principal. 

Cuando las puertas se abren es Justin quien aparece de inmediato. Nuestros ojos se encuentran pero yo aparto la mirada.

—Charlotte — dice él. 

Escucho un ruido sordo y de pronto Drew pasa por al lado mio y va directamente encima de Justin, con su antebrazo lo toma por el cuello y lo avienta contra la pared, aun manteniendo su brazo presionado contra él, haciendo que le sea más difícil respirar. 

—Malditamente aléjate de ella, imbécil — mi hermano habla con los dientes apretado — en tu vida te le vuelvas a acercar ¿entendiste? Pedazo de idiota. 

—Drew — le llama mi padre y suelta a Justin, cuyo rostro estaba comenzando a tornarse un poco rojo. 

—Solo... vamonos — digo a media voz, Drew toma las bolsas del suelo y comenzamos a caminar hacia la entra del hotel, con la vista de todos mis compañeros sobre mi. 

Justin.

Charlotte no ha venido a la escuela en una semana, lo sé porque la he esperado en su casillero todos los días a la hora de entrada, a la hora en la que ella toma el almuerzo y a la hora de salida. 

Drew y Spencer solo faltaron los primeros dos días después de que los demás regresamos del viaje, pero no han hablado con casi nadie. Cuando me acerco a ellos para intentar hablarles se alejan, o simplemente me ignoran, como espere que harían. 

Ahora estoy parado frente a su casa, con miedo a tocar el timbre. Es muy extraño que, he venido a esta casa muchas veces antes y nunca había visto a Charlotte, ni había escuchado que Drew y Spencer hablaran de ella, solo mencionan a sus hermanos Menelik y Charlie, y a su hermano mayor. 

Llamo al timbre y espero a que alguien atienda. 

Se escuchan voces y risas hasta que varios segundos después es Drew quien abre. 

—Hola — le digo a quien considero mi mejor amigo. 

La sonrisa cae de su rostro —¿Qué haces aquí?

—Que-quería -quiero — me corrijo —, quiero saber como esta Charlotte. 

—Charlie esta bien, ahora vete. 

—Te pregunte por Chalotte no por Charlie — le digo.

—Charlotte y Charlie son la misma persona, idiota, y ya te dije que esta bien, así que ahora vete por favor. 

—Me gustaría hablar con ella.

—Pero ella no quiere hablar contigo. 

Suspiro —Drew, por favor, sé que lo que hice estuvo mal, pero por favor, dame la oportunidad de disculparme con ella. 

Él asiente, dubitativo —Ve al patio trasero, si ella quiere hablar contigo o no te lo haré saber. 

—Gracias — le digo y corro rodeando la casa.

Cuando llego al patio trasero Charlotte ya se encuentra ahí, esta sentada en flor de loto con su mirada clavada en el agua tranquila y cristalina de la piscina. 

Me acerco lentamente a ella. 

—Hola — le digo, ella sale de su especie de trance y dirige su mirada hacia mi, se pone rápidamente de pie y camina haca atrás, alejándose de mi y de la alberca al mismo tiempo. 

—Charlotte, por favor, vine a disculparme — le digo, me sorprendo cuando escucho la urgencia en mi voz pero no lo hago notar.

—Acepto tus disculpas, ahora vete por favor — escucho lo que dice, pero por alguna extraña razón se que no esta siendo sincera.

Camina rápido hasta que encuentra una puerta corrediza semi-oculta; en ese mismo momento Drew sale de la puerta que conecta el patio trasero con la cocina.

—No quiere verte — se que miente, pero no le digo nada — así que ahora vete.

Asiento — Descuida — le digo cabizbajo —. En algún momento podre hablar con ella.