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Capítulo 39.

Hay tres camionetas negras con polarizado oscuro, frente a nuestra casa y hay varios guardias de seguridad custodiando la entrada. Drake ha decidido estacionar su coche en la calle principal, frente a la calle que lleva hasta nuestras casas, por alguna extraña razón, ningún auto circula por ésta zona y no hay personas merodeando como siempre lo hacen. Es extraño.

—La puerta la dejamos con seguro. —dice Logan. Él se ve terriblemente mal, tiene un labio partido el cual está sangrando. Logan es uno de nosotros y no nos lo había dicho, pero no es momento para charlar ni reclamarle nada.

—Pero ellos entraron y no... —me quedo callada al ver a mi madre salir de allí—... ¿Qué hace ella aquí? ¿No se supone que está en Los Ángeles junto con mi padre?

—Eso creí. —escucho la voz de Matthew.

¿Qué hace Emma aquí? ¿Dónde está papá?

Mi celular suena de repente y me hace dar un respingo. Lo saco de mi jeans y veo en la pantalla la palabra ''Papá'' Contesto de inmediato.

—Papá. —hablo alarmada y no me puedo contener—. ¿Dónde estás?

—GG. —lo escucho agitado—. No sé dónde estés, pero no vengas a casa, ve con tu hermano a la casa de los Harris, diles que Robert vino por mí y Emma está con ellos. —habla apresuradamente que apenas le entiendo.

—Papá. —mi voz tiembla—. Papá, ¿qué pasa?

—Los amo. —la llamada se corta.

Observo la pantalla de mi celular atónita.

—¿Qué dijo Al? —pregunta Logan.

—Que no fuéramos a nuestra casa y que habláramos con los padres de Will o eso creo, con la familia Harris.

Otros guardias salen de la casa rodeando a alguien y llevándolo a la fuerza a una de las camionetas negras. Mi madre está parada esperando a esa persona. Los guardias dejan al hombre hincado en el suelo y puedo ver claramente que es mi padre.

—¿Qué es lo que Emma está haciendo con Al? —pregunta Logan y lo escucho enojado.

—Espera. —digo al momento que él va abrir la puerta del coche—. Sólo espera.

Mi madre echa la cabeza hacia atrás y se ríe, pero no podemos escuchar lo que dicen hasta aquí. Ella observa a mi padre por unos segundos y luego él cae al suelo retorciéndose de dolor. Ella es como Will. Aprieto los dientes con fuerza.

—¿Qué demonios está haciendo nuestra madre? —pregunta Theo.

Estoy a punto de abrir la puerta cuando alguien me toma del brazo, es Logan.

—No podemos ayudarlo. Recuerdas lo que te dijo Al, tenemos que ir con los Harris. —dice.

Las palabras de Logan pasan volando cerca de mi cabeza. Observo como meten a mi padre a la fuerza en una de las camionetas y luego sube Emma. Los demás guardias siguen rodeando nuestra casa y están atentos a cualquier movimiento proveniente de algún enemigo.

¿Por qué mi padre dijo que fuéramos con los Harris? ¿Qué pasa con ellos?

Pienso rápido antes de actuar.

—Haremos esto. —hablo—. Ustedes vayan a la casa de Will...

—¿Y tú qué? —me corta Theo.

—Yo iré a la casa de Louis y Sarah. —ellos tienen que saber lo que está pasando—. Los necesitamos.

Ellos parecen estar pensándolo, pero haré esto aunque ellos no lo quieran.