Capítulo 13.

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Drake está vestido como lo vi dentro de Darkness. Él me mira de arriba abajo. Los ojos me arden, sin embargo sigo con la vista fija en él. Pongo mi cabello cuidadosamente encima de mi cuello donde tengo mi tatuaje, tratando de ocultárselo a él.

Lo que pasó allí atrás me tiene confundida. Creo que me estoy volviendo loca, no sé si eso fue la realidad o sólo pasó en mi mente porque no conozco a ningún humano moverse tan rápido como esos hombres, mucho menos incendiarse de la nada. Sí, creo que me volví loca.

Miro disimuladamente hacia el lugar donde el cuerpo del chico se incendió, pero no hay nada. La oscuridad se apodera de todo el callejón de repente. La luz se fue. Me pongo alerta a cualquier paso en falso.

—Greta, ven aquí. —me llama la voz de Drake, pero yo no me muevo. Ésta noche no hay luna, eso me hace vulnerable para caminar porque no veo nada aún. Camino hacia atrás tratando de alejarme de Drake—. Greta, ¿dónde estás? —pregunta.

—Aléjate de mí. —mi voz suena firme.

—¿Estás bien? —pregunta él. Camino de nuevo hacia atrás, pero la voz de Drake me sigue de cerca y no puedo verlo.

—¿Qué estás haciendo aquí? —le pregunto.

—¿Qué estás haciendo tú aquí? —me riñe.

—Yo... vine a buscar el coche de... —mi ceño se frunce involuntariamente. ¿Por qué le doy explicaciones a Drake? A él no le importa lo que haga yo aquí—. ¿Qué haces aquí? ¿Me estás siguiendo, Drake?

Él se ríe.

—Vine a buscarte. Los chicos te están esperando en la salida de Darkness. —dice.

¿Eso es verdad o mentira? ¿Por qué no vi el coche de Will en la salida? ¿Por qué no vino Theo por mí? ¿Por qué sabe Drake que yo estaba aquí?

—Eso es mentira. Yo no vi a Will ni a los chicos allá. —respondo segura de mi misma—. ¿Qué estás haciendo aquí, Drake?

El silencio se apodera de nuestro alrededor. Sólo escucho mi respiración y mi nariz moqueando.

—Está bien. —dice la voz de él a unos centímetros de mí.

Drake me toma de la muñeca y yo grito, tan pronto como me tocó, asustada. Me zafo de su agarre y empiezo a correr por el callejón de regreso. La oscuridad se vuelve clara para mis ojos y puedo ver apenas la calle adoquinada. Brinco encima de un bote de basura que de repente aparece en mi visión y sigo corriendo. Drake me está siguiendo.

¿Por qué estoy huyendo de Drake? Ah quizá porque él está siguiéndote como un psicópata, me riñe mi subconsciente.

Me meto en el callejón donde estaba escondida de los tipos sanguinarios y corro por él hasta llegar al final mientras doblo la esquina le grito a Drake.

—¡Aléjate de...! —pero él me tira al suelo.

Agh. Eso dolió. La luz vuelve a iluminar la calle. Veo a Drake a horcajadas encima de mí, apretándome contra el suelo donde me golpeé hasta las venas.

—¿Por qué demonios huyes de mí? —me riñe. Nunca lo había visto enojado y ahora parece que lo está.

—¿Por qué diablos me sigues de ese modo? —le riño.

El rostro de él se suaviza, me mira de una forma extraña y me siento incomoda. Su cabello está revuelto y él está agitado al igual que yo por haber corrido.

—Solo fui a buscarte. —dice en voz baja—. No tienes por qué huir de mí.

Lo observo seria. Él tapa la luz de mi cara porque aún está encima de mí. Gruño debajo de él tratando de zafarme, pero no puedo a pesar de que no tiene todo el peso encima de mí.

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