/Raissa/
Los últimos días Charles se la pasaba decaído, pocas cosas lograban animarlo, estaba así desde aquella noche en la cena, no sé que le había molestado y no tenía el valor de preguntarle.
Erik y yo nos la pasábamos haciendo bromas pero casi no nos hacía caso.
Se encontraba en el balcón de su habitación, yo dudaba si entrar o no pero lo hice finalmente.
Me coloqué a su lado y me recargué en el barandal tal y como él estaba.
Me miró y suspiró.
-Me siento solo-dijo rompiendo el silencio. -Es por eso, si te lo preguntabas- lo miré atenta.
-No lo estás Charles, tienes a Erik, me tienes a mi y apuesto a que tienes cientos de amigos allá afuera.
-Sí, lo sé
De nuevo el silencio reinó.
-¿Viste a todos en la fiesta?- preguntó. -¿Ves alguna diferencia entre ellos y yo?-
-Sí, tu eres inteligente, encantador, y guapo, ellos no-
-No Raissa, ellos eran felices, tenían a su lado alguien que los ama- bajó la cabeza al decirlo. -Todo éste tiempo que ha pasado ellos han estado formando familias y yo.... sólo sigo jugando-
No supe que decir, se vea muy triste así que me limité a abrazarlo, automáticamente él recargo su cabeza en mi hombro.
Nos quedamos así por unos minutos.
-No sé tratar a las chicas, ninguna se quedaría conmigo por más de una noche- dijo.
-Yo lo haría- solté y al instante me arrepentí.
Él me miro por unos segundos.
-Puedo ayudarte Charles, te enseñaría un par de trucos- dije rompiendo con el momento incómodo, al menos para mi.
-Te lo agradecería- dijo y me sentí orgullosa por haberle sacado al fin una sonrisa.
Me abrazó más contento y besó mi frente.
-¡Vamos Charles hay que salir a comer!- dije emocionada y corrí a decirle a Erik, ambos accedieron.Caminábamos por las frías calles de Londres, los tres nos veíamos graciosos por venir con grandes abrigos para el frío.
Llegamos a un lindo restaurante, una chica se acercó a tomar nuestro pedido y cuando lo hizo se alejó sin perder de vista a Charles.
-Le gustas- le dije y el solo rió negando con la cabeza.
-Vamos Charles, anímate a hablarle- le dijo su amigo.
-No lo sé- se veía inseguro.
Nuestra comida no tardó mucho en llegar y con ella más miradas para el castaño. Así fue transcurriendo el tiempo hasta que era hora de irnos.
-Bueno Charles, te dejamos para que hables con ella- dije y jalé a Erik conmigo hacia afuera.
-No creo que lo haga- dijo mi amigo una vez que estábamos fuera del lugar.
Pasaron varios minutos y luego llego Charles con una sonrisa en su rostro.
-Me dio su número-dijo y nosotros reímos orgullosos.
-¡Bien hecho!La tarde llegó y el frío aun seguía, incluso dentro del hotel.
Me encontraba acostada en el sillón recargada en Erik, ambos veíamos un tonto programa en la televisión.
-Voy a salir- dijo Charles y salió rápidamente de la habitación antes de que le hiciéramos preguntas.
Lo último que recuerdo fue haber comido una rebanada de pastel que había comprado y luego caí en un profundo sueño.Sentí como alguien me llevaba en brazos y me depositaba en mi cama. No abrí los ojos por flojera.
-Gracias Charles- susurré antes de que saliera de mi habitación.
-Soy Erik- dijo soltando una risa.
Yo me voltee a verlo y le sonreí avergonzada.
-Sé que te gusta- soltó de la nada.
-No es así- me defendí.
-Vamos Raissa, ya no te engañes- dijo y salió de ahí.
Me dejó algo confundida. No me engañaba.
Sí, estaba consciente de como era Charles y admito que nadie podría resistirse a él, es muy guapo y gentil, pero yo lo veía como un amigo, alguien a quien debía proteger.
No pude dejar de pensar en ello casi toda la noche.No olviden votar y comentar
ESTÁS LEYENDO
X-Men: Un Camino Diferente {Charles Xavier}
Fanfiction-Me llamo Charles Xavier-dijo el chico ayudándome a levantar. -Soy Raissa Markman-sonreí al ver su intensa mirada y olvidando por un momento que él fue quien me arrojó al suelo... Lo que había pasado en Cuba había sido sólo el inicio del terror, per...