I'm Not A Disney Princess!

Capítulo 43: Tuy is just a nickname

El calor corporal de su cuerpo me reconforta de maneras casi inexplicables. Me siento a gusto en sus brazos y me odio por hacerlo, se supone que debo estar cabreada con él y lo estoy abrazando como si mi vida dependiera de ello.

  —¿Por qué lo hiciste?—Susurro contra el material de su chaqueta.

Siento como su pecho se hincha conteniendo el aire en sus pulmones para después botarlo en un gran suspiro.

  —No te lo quiero decir.

Frunzo el ceño y abro los ojos. Sigo en la misma posición que antes pero mi cuerpo se tensa.

 —¿Por qué no?

  —Yo..., aposte con unos chicos y-

Y sin que hiciera falta escuchar su explicación, lo había entendido todo. Presiono mis labios y me separo de él retomando la distancia.

  —Estas de coña? ¡¿Así que casi muero y soy violada por un ebrio por esa mierda?!

Mi pecho sube y baja con frenesí  y trago saliva subiendo la mano a mi garganta para que no lo note.

  —Frank, lo siento. Se que cometí una equivocación y no tienes ni idea de la mierda que me siento por esto.

Cruzo mis brazos y niego con la cabeza—Sabía que no debía de confiar en ti, digo ¿que se me pasa por la cabeza?—Exclamo con una seca carcajada—No podía esperar más de un chico como tú.

  —No soy lo que crees.

Enarco una ceja con una sonrisa que no llega a mis ojos—Oh perdón ¿te juzgue mal? Porque eso es lo que me diste a ver, eres un asesino, un ladrón y un drogadicto.  Cielos, de verdad que fui estúpida al creer que tu y yo íbamos a ser amigos.

Noto como presiona su mandíbula y tensa sus músculos.

  —Tu no sabes nada.

Asiento con la cabeza.

  —Tienes razón. No se nada, y de verdad lo prefiero así. No quiero tener nada que ver contigo o tus amigos.

  —Bueno, vas a tener que esperar un poco más porque tu vienes conmigo.

Camina hasta mi y me sujeta del codo jalando de mi hacia él. Me sacudo para deshacerme de su agarre y éste presiona más su mano alrededor de mi piel.

  —Suéltame—Ordeno en tono bajo pero autoritario.

Ladea su cabeza y me reta con la mirada—No.

  —¡Suéltame maldito psicópata! 

Gruñe y sacude la cabeza queriendo guiarme al final del pasillo de donde vine corriendo.

  —No pienso dejarte aquí sola—Murmura sin mirarme.

  —Bueno y a donde me llevas, ¿me vas a asesinar? Porque si es lo que vas a hacer prefiero que lo hagas aquí.

Gruñe nuevamente pero con más fuerza, clava sus uñas en mi piel y callo un gimoteo de dolor manteniendo mi postura firme ante él.

Sus ojos se tornan oscuros y admito que daba muy mal rollo.

  —Cállate mierda, yo no he asesinado a nadie en mi puta vida, así que cierra la puta boca si no quieres que te lleve a arrastras de vuelta a la ciudad.

Lo obligo a que me suelte sin decir nada más.

Que tío tan gilipollas.

  —Por la mierda Chad, te hemos buscado por todos lados. Tenemos que irnos ahora.