Chase
He tratado de hablar con Quinn toda la mañana, pero es más escurridiza que una rata buscando queso, si no está en la clase de química, se encuentra en las escaleras, y si no está en las escaleras está en los baños como por tres horas si no es que más.
Miro la hora en mi teléfono y solo faltan cuatro minutos para que suene el timbre y sea la hora del almuerzo, me levanto del suelo donde me encontraba esperando desde las diez de la mañana, si, me concentré tanto en hallar a Quinn que el profesor de matemática no me permitió entrar cuando solo fueron diez jodidos minutos tarde.
Suspiro con cansancio caminando a paso apresurado hasta la cafetería. Al encontrarme allí busco rápidamente con la mirada a Quinn, la logro encontrar junto a sus amigas sujetando un altavoz de mano mientras ríe como loca.
Corro hasta llegar a ella y suelto una bocanada de aire. Ella me regala una radiante sonrisa y le envía señales con la mirada a sus amigas para que se vayan. Toma un mechón de cabello rubio entre sus dedos y comienza a juguetear con él.
-Hola amor, tienes mucho tiempo que no mantienes una conversación larga conmigo.
Hace una mueca de cachorro manipulador a lo que yo sacudo mi cabello.
-Lo siento, he...estado muy ocupado con los entrenamientos y eso-Confieso con la certeza de que no cree ni una sola palabra de lo que digo.
-Si, también muy ocupado con ella, ¿no es así?-Masculla entre dientes mientras desvía su mirada de la mía a un punto fijo de la cafetería.
Sigo su mirada para encontrarme con Frankie sentada en su mesa tarareando una canción mientras lee una especie de novela sacada de la biblioteca de la escuela.
Es sacada de mi campo de visión para ser reemplazada por la mirada explosiva de Quinn quien me mantiene sujeto de la mandíbula con firmeza.
-Tienes veinte segundos para decirme que tanto le ves a esa oxigenada, dime la verdad Chase, ¿te gusta?
Niego con la cabeza bufando rápidamente,-¿Qué? ¿gustarme ella? ¡Por supuesto que no!
Hace una mueca y entrecierra los ojos cruzándose de brazos.-Bien, como sea-Toma una inhalación profunda y la suelta poco después, su anterior cara de pocos amigos es reemplazada por la misma sonrisa con la que fui recibido minutos atrás.-¿Vas a ir a mi fiesta, no es así?
Asiento con la cabeza y reviso la hora de mi móvil, bien solo faltaban diez minutos más y el almuerzo acabaría.
Ella lee mis pensamientos porque observa la hora reflejada en la pantalla del aparato y se dirige a la banqueta para subir sobre ella pero la detengo antes de que lo haga.
-Quinn, no te atrevas a decir una sola palabra.
Al principio parece no entender pero luego frunce el ceño y resopla con molestia, -Sabía que sentías algo por ella.
-Maldita sea, no siento nada por Salvatore, Quinn, ¿cuándo lo vas a entender?-Un repentino picor en mi garganta hace que las palabras duelan al salir de mi boca.
Suelta un gruñido y enciende el altavoz, sujeto su mano con firmeza e imploro con los ojos.
-Quinn, no lo hagas.
Parece retarme con la mirada y en su mente aparentemente está ingeniando su maligno plan para salirse con la suya.
-Si no lo hago, ¿vas a declararteme al frente de todos en esta cafetería?
Frunzo el ceño y no puedo evitar reír por sus ocurrencias,-¡¿Qué?!, no sabes lo que estas diciendo nena, apaga eso-Murmuro refiriéndome al altavoz encendido.
-Hazlo Chase, o te juro que la fachada de mala de Salvatore va a arruinarse por el resto de su insignificante vida hasta que termine la universidad, me encargaré de hacérselos saber a todos los habitantes de esta ciudad.
-Estas jodiéndome, no puedes hacer eso.
-Pruébame.
Niego con la cabeza apartándome de ella,-No te voy a dar lo que quieres, mejor hazte el favor de apagar esa mierda y guardar el poco de respeto que tienes por ti misma y dejar de joderle la vida a las personas que sabes que son y siempre serán mejores que tu.
Me doy la vuelta con el propósito de salir de allí pero mascullo una obscenidad entre dientes cuando oigo la irritante voz de su persona resonando dentro de toda la cafetería.
-Quiero divulgarles algo muy vergonzoso y humillante sobre una de las estudiantes de esta escuela, es gracioso saber que lo que les voy a decir es sobre nada más y nada menos que Fra...
La halo hacia mí de manera brusca causando que el altavoz caiga al suelo provocando un chillido irritante para los oídos, sin dejar que diga una sola palabra me apresuro a presionar nuestros labios con fuerza provocando un leve gemido brotando desde su garganta. Logro escuchar al fondo todas las risas y los gritos alentadores de los estudiantes y no puedo lograr apartar ese pensamiento de culpa al saber que Frankie se encuentra entre esas personas.
Quiero verla, quiero decirle que le debo una explicación( aunque no se muy bien el porqué), me alejo de ella para observar como sonríe de la manera más descarada posible.
Busco rápidamente con la mirada a la única chica con cabellera azul de la escuela y maldigo por lo bajo al divisarla saliendo apresuradamente de la sala.
Soy tomado de la mano con fuerza mientras oigo a Quinn decir que ahora somos novios con estúpidas risas acompañando cada palabra que pronuncia.
Esto no debería molestarme, siempre quise salir con una capitana del equipo de porristas, se supone que era una tradición ser la pareja más popular y ser el rey y la reina del baile, aunque eso último no me importaba una mierda. Entonces, ¿por qué me siento tan mal?,¿Por qué no puedo sacarme de la cabeza a Frankie Salvatore?
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I'm Not A Disney Princess!
عاطفيةSiempre hay un momento crucial en la vida de todo adolescente, en la mía...no sería la excepción. Sarcástica, malhumorada y con una pizca de egocéntrica. No pienso convertirme en una princesa por nada ni nadie y por supuesto mucho menos de manera li...