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Abrí mis ojos lentamente. Escuche las respiraciones pausadas de todos, lo que significaban que todos estaban descansando plácidamente. Pase mis manos por mis ojos. Sentí un suspiro y puse atención. En la otra esquina del vagón, una figura estaba apoyada en la pared con la cabeza agachada. Jugaba con sus dedos y soltaba uno que otro suspiro. Sin duda, era Carl. Me levanté con cuidado y camine entre los cuerpos de mis compañeros, con el cuidado de no tocarlos. Me senté al lado de Carl y el levantó la cabeza regalando me una pequeña sonrisa. Miramos al frente y nos mantuvimos así unos segundos. De apoco, acercó su mano a la mía y entrelazo nuestros dedos sin dejar de mirar a la pared del otro lado del vagón. Sonreí y le di un pequeño apretón a tu mano.
Lo mire por unos instantes, el seguía mirando la pared, serio, perdido en sus pensamientos. Su largo cabello castaño caía desordenadamente por su cara, sus ojos azules se veían todavía más azules, con algunas pecas y su nariz que se veía perfecta. Se veía bien, sin embargo, le faltaba su característico sombrero de sheriff. Sin duda, Carl había cambiado. Sus rasgos estaban más mercados, y la cara de ángel ya no la tenia tanto, si no que se veía más sexy y misterioso.
Dios, parezco psicópata.-¿Qué me miras? -susurró mientras me miraba divertido. Mordí mi mejilla interior y mire al frente con una sonrisa.
-Veía lo feo que eres.
-yo se que no. -apoye mi cabeza en su hombro, y el colocó su cabeza encima de la mía. -No sabes cómo te extrañaba y como no dejaba de hecharme la culpa de lo idiota que fui contigo..
-¿Crees que yo no te extrañe? Me hiciste falta Carl.. Ya no pienses en eso, es pasado. ¿si? -Acaricie su mano con mi pulgar y el asintió levemente.
Se acomodo y me miró con una sonrisa. Se acercó de apoco, lentamente, como si pidiera permiso. Sonreí de nuevo y puse una mano en su mejilla, acercándome más a él, dándole comienzo a un beso. Las típicas cosquillas en mi estomago comenzaron a haciéndose presentes. Carl puso sus manos en mi cintura y comencé a acariciar su cabello. Sonrió entre el beso y se volvió a acercar hacia mi, sin embargo era un beso más lento, más despacio. Nos separamos de apoco y juntamos nuestras frentes. Cerré mis ojos con una sonrisa y él me envolvió en sus brazos. Acariciaba mi cabello y me acurrucaba todavía más.
-Descansa, mañana será otro día. -susurró cerca de mi oído. Bese su mejilla y volví a recostar mi cabeza en su pecho. Cerré mis ojos y dormí con esa imagen de nosotros.
(...)
Me removí incómoda en el suelo. Bufé y abrí mis ojos, sentandome. Tenía una camisa que me tapaba a medias, era azul y blanca. Reconocí que era de Carl y reí levemente. Alce la vista, Rick hablaba con Carl en una esquina,Glenn hablaba con Daryl y Maggie comía algo con Tara, Rosita y Michonne y Eugene dormía. Me pare y tome la camisa en mi mano y camine hacia las chicas. Las salude y me senté al lado de Tara, la cual me ofreció una lata. Sonreí agradecida y lleve cucharadas de esa sopa hacia mi boca, comiendo en silencio.
-¿Y que tal dormiste con Carl? Se veían muy lindos. -me atragante con la sopa por la pregunta de Rosita. Abrí los ojos como platos y estas me veían mientras soltaban unas risitas. Mire a Carl por unos segundos y él me veía con una media sonrisa y luego volvió la vista a su padre. Trague duro y volví mi vista a las chicas.
-¿Carl y yo? -me hice la desentendida y comí más sopa.
Maggie me miró divertida. -¿Quieres que hable? -la mire con mala cara y ella sonrió -Por favor, todos sabemos que ustedes traman algo. Y se ven lindos. -Michonne, Tara y Rosita sistieron dándole la razón.
Sonreí negando. -No somos nada, supongo. Él no me ha pedido nada así que... -hice una pequeña mueca y comí un poco más.
-A él le gustas. Solo que tal vez esta esperando el momento, te lo aseguro. -Michonne me miró con una sonrisa. -Y serás la señora Grimes. -reí por su ocurrencia.
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The Glenn's Sister
FanficUna epidemia invadía el mundo, acabando con más de la mitad de la población. Una epidemia que acabó con familias, vidas, sentimientos. La felicidad ya no era permitida para el mundo de ahora. Las risas y sonrisas eran prohibidas. Solo necesita...