La Verdad Del Corazón

Capitulo 4

-Narra Christian-

Oigo como alguien camina hacia donde yo estoy y me giro. Un escalofrío recorre mi cuerpo al verla ahí parada frente a mí, es ella, es la chica con la que choqué en el aeropuerto.

Christian: ¿Tú eres Maite Von Uckermann?

Maite: Sí, y tú eres el mismo con el que choqué el otro día en el aeropuerto.

Christian: ¡Qué casualidad! Yo soy Christian Espinosa, encantado.

Maite: Mucho gusto, yo soy Maite.

Christian: Sí ya sé, bueno siéntate.

Maite: Sí, claro.

Comenzamos la entrevista y le hago muchas preguntas respecto a su experiencia como modelo y demás. Aunque desde que la he visto entrar he decidido contratarla, desde que la ví en el aeropuerto sentí algo que no sé describir pero que me gusta. Después de un par de horas siento que la conozco de siempre y me siento genial con ella.

Christian: Bueno pues estás contratada. Bienvenida, y si tu quieres mañana mismo puedes empezar.

Maite: Perfecto, entonces mañana nos vemos y gracias por todo.

Nos despedimos con un beso en la mejilla que logra ponerme nervioso y la acompaño a la puerta.. Al verla irse siento algo extraño, apenas la conozco y ya ¿siento que la extraño?

-Narra Alfonso-

Después de un día muy pesado en la oficina necesitaba despejarme, ir al lugar que tanto me gusta, lo que menos pensé es que en ese lugar me iba a encontrar con ella. Me acerco hasta donde se encuentra sentada y le propongo ir a tomar ese café que quedó pendiente. De camino al café, hablamos de todo y con cada palabra siento que me gusta cada vez más. Llegamos al café y nos sentamos en una mesa junto a uno de los ventanales desde donde se puede ver un hermoso parque.

Annie: Oye, está increíble el lugar, me encanta.

Alfonso: tú sí que eres increíble.

Veo como se queda seria sin decir nada y de repente, una tímida sonrisa ilumina su rostro.

Alfonso: Discúlpame, no debí haber dicho eso pero es lo que pienso.

Annie: No te preocupes, está bien, simplemente no me lo esperaba. Pero, ¿en serio piensas eso de mí?

Alfonso: Sí, eres increíble, me la paso muy bien contigo.

Nos quedamos un rato más hablando, tomando nuestro café. Se ve tan hermosa... Me cuenta todo sobre su trabajo y no puedo evitar sonreír como un bobo.

Annie: ¡Ay no! ¿Has visto lo tarde que es? Ya me tengo que ir.

Alfonso: No te vayas aún, quédate un rato más.

Annie: Lo siento pero no puedo, quedé de ir a cenar con unas amigas y no puedo fallarles.

Alfonso: Bueno entonces deja que te lleve.

Annie: No hace falta, me cojo un taxi y ya.

Alfonso: Cómo que un taxi, te llevo yo y no hay más que hablar.

Annie: Okey, gracias.

Pago la cuenta y salimos del restaurante, en todo el viaje ninguno de los dos pronunciamos una sola palabra. Llegamos al lugar que ella me indicó y me bajo del coche para despedirme, le abro la puerta y la ayudo a bajar.

Annie: Bueno me la pasé muy bien, espero que nos podamos ver pronto.

Alfonso: Claro, en dos días empiezas en la empresa, ¿no lo recuerdas?

Annie: Sí, es cierto, entonces nos vemos en dos días.

Me acerco a ella para darle un abrazo de despedida, la miro y me acerco en un impulso la beso, ella me corresponde durante unos segundos y de repente siento como se rompe el beso despacio, me mira a los ojos y sale corriendo hacia el restaurante sin decir nada. Decido no seguirla, simplemente subo a mi auto y me dirijo a mi casa.

-Narra Christopher-

Me acerco a ella y le susurro al oído. Siento como un escalofrío recorre su cuerpo tan rápido como ella se levanta de la mesa y sale del restaurante. Pago la cuenta y salgo tras ella. La veo cruzar rápidamente la calle y dirigirse hacia uno de los bancos que se encuentran en el parque que hay frente al restaurante, voy corriendo hacia ella y me siento a su lado, intenta irse pero la cojo del brazo y la detengo.

Chris: ¿Qué te pasa? ¿Porque saliste así del restaurante?

Dulce: porque yo no tengo nada que hablar contigo.

Chris: No te pongas así solo quería pedirte una disculpa por el beso del otro día, fuí un patán, lo siento. Ahora que soy tu mánager quiero que nos llevemos bien.

Dulce: está bien, acepto tus disculpas pero no lo vuelvas a hacer.

Chris: ¿Es que no te gustó?

Me acerco a ella y veo como se pone nerviosa, me encanta verla así. De repente, siento un fuerte dolor en la mejilla.

Chris: ¿Y eso porqué? No hice nada.

Dulce: No me gusta que me tomen por estúpida, si no sabes respetarme, yo te voy a enseñar.

Chris: ¿Con cachetadas?

Dulce: Exacto, si te vuelves a acercar a mí de esa manera te voy a dar otra cachetada. Y ya me voy porque tengo prisa, bye.

Veo como se aleja y no puedo evitar mirarla, me gusta verla nerviosa y la manera de enojarse cuando me acerco a ella, se ve tan sexy enojada.

-Narra Fernando-

Llego a casa después de haber trabajado todo el día y al llegar a la sala veo a Blanca y a mis dos hijos, sentados, hablando y riendo como hace mucho no lo hacían. Oigo unas pasos en la escalera, volteo y veo a Dulce, mi princesa, hace mucho que no la veía.

Fernando: Princesa hermosa, ¿no vas a saludar a tu padre?

Dulce: por supuesto que sí, papito. Te extrañé mucho.

Corre hacia mi y me abraza y me llena de besos. Me encanta verla así de feliz, hace mucho no sonreía y parece que ahora lo vuelve a hacer.

Fernando: Qué alegría tenerte de nuevo aquí, hija mía.

Dulce: Sí papá y aprovechando que están todos quiero decirles algo. Hoy estuve con mi nuevo mánager y con Tomás, ya arreglamos casi todo y tomé una decisión que creo les va a gustar mucho.

-Narra Dulce-

Christian: Bueno hermanita, dinos cuál es esa noticia.

Christian se acerca a mí y me abraza y veo cómo mi papá se sienta junto a mi mamá y la abraza. Me siento con Christian en uno de los sillones y miro a todos, antes de comenzar a hablar mi mamá replica.

Blanca: bueno ya hija, por Dios, deja de hacerte la interesante y dinos la buena noticia.

Dulce: Ay ma, ya voy. Quería decirles que ya no voy a viajar tan seguido, me voy a instalar aquí en el Df pero en un departamento donde pueda vivir yo sola.

Alfonso: Princesita, pero qué buena noticia. Pero no entiendo porqué no te quieres venir a la casa con nosotros, mis papás, Christian y yo te echamos mucho de menos.

Dulce: Yo sé y también los extraño, pero tengo 23 años y siento que ya es hora de que tenga mi propio espacio. Pero no se preocupen porque se van a hartar de tenerme por aquí.

Fernando: Está bien hija, es tu decisión y nosotros la respetamos si eso te hace feliz, adelante.

Mi papá se levanta al mismo tiempo que yo y me da un gran abrazo. Todos estan felices con esta decisión, tanto que mi papá nos lleva a cenar a uno de los restaurantes más lujosos de la ciudad. Pasamos la noche en familia como hace mucho no lo hacíamos. Estamos cenando y hablando cuando de repente veo entrar a un hombre acompañado de una mujer, enseguida lo reconozco, pero no a la mujer que va con él. ¿Será su novia? ¿O quizá su esposa?

Espero sus comentarios y sus votos⭐!!!
A mis Vondys Locas,
May.😘