Dulce es una de las modelos más reconocidas e importantes de México. Una decepción amorosa hizo que dejara de creer en el amor
Christopher es manager musical ya que su padre no le dejo, que él, fuera la estrella. Al igual que Dulce, una decepción am...
Después de más de seis horas de avión Maite y Christian ya aterrizaban en el Aeropuerto Internacional de Calgary, después de recoger las maletas subieron a un taxi rumbo al hotel. Luego de casi treinta minutos recorriendo las calles de Calgary llegaron al hotel donde se hospedarían durante los próximos cinco días, el Fairmont Palliser.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Una vez llegaron a la habitación Christian cogió a Maite y juntos entraron a la habitación como dos recién casados.
Christian: Mi amor, ¿no quieres descansar un rato?
Maite: No, mejor vamos a visitar la ciudad me muero por conocer cada rincón. Pero si tú te quieres quedar aquí no importa.
Christian: No lo que quiera mi princesa está perfecto.
Maite: ¿Sabías que eres el mejor hombre del mundo?
Christian: Sí ya sabía pero me encanta que me lo digas.
Maite: Mira que eres modesto.
Riendo Christian fue hacia donde ella se encontraba y la abrazó dándole un beso apasionado que poco a poco subía de intensidad con cada caricia. Después de unos minutos ella rompió el beso.
Maite: Mejor vámonos porque si no, no vamos a salir de aquí y yo quiero conocer la ciudad.
Christian: Pues a mí no me parece mal si no salimos de aquí.
Dijo Christian besando nuevamente a su esposa.
Maite: Mi amor, ahora vamos a conocer la ciudad ya habrá tiempo en todo el viaje.
Sentenció ella dándole un casto beso mientras agarraba su bolso y la mano de su esposo tirando de él para salir a conocer la ciudad.
Pasearon por Stephen Avenue abrazados mientras ambos se regalaban tiernos besos. En un descuido de su marido Maite aprovechó para comprar algunas cosas y organizar la sorpresa para decirle a Christian que van a ser papás.
Después de varias horas decidieron parar en un restaurante para comer donde degustaron un típico Tourtiére para terminar con un delicioso Pudding au Chomeur. Decidieron regresar al hotel para descansar un rato y dejar todos los regalos que habían comprado mientras que Christian se dio un relajante baño Mai aprovechó y escondió las cosas para la sorpresa de su marido. Poco tiempo después ambos se dirigieron hacia el club de remo donde junto con un instructor disfrutaron de unas vistas espectaculares de todo el lugar. Pasaban ya de las ocho de la noche cuando ambos llegaban al hotel.
Maite: Mi amor se me olvidó preguntar a qué hora es la cena ¿puedes ir a recepción y preguntar?
Christian: Está bien, pero me debes una.
Aceptó él mientras dandole un beso y saliendo de la habitación.
En menos de diez minutos él estaba de vuelta, al abrir la puerta del cuarto se encontró todo en absoluto silencio y a oscuras.
