¡Oh, madre Luna! Tú nos diste la vida y la fuerza, Tú nos acompañas en los momentos de tribulación, y nos observas cuando estamos solos. ¡No desoigas las súplicas de tu pueblo, acógenos en tu magia!
Oraciones y Promesas
Elifelet el Sacerdote, brujo visionario.
"Los padres de Liz y Alex fueron asesinados". Esas palabras no cesaban de repetirse en la mente de Gabe. A pesar de que estuvieran muertos era la opción más lógica para responder al por qué vivían las hermanas con su tía, no podía creérselo. Asesinados, ni siquiera de muerte natural. Su vida les había sido arrebatada, seguramente por esos malditos zaahros, y esas dos brujas habían quedado huérfanas.
—Si sigues mirándome tanto vas a acabar desgastándome —dijo de repente Liz, sacando a Gabe de sus pensamientos.
Porque era verdad, desde que Agnes le había revelado tan terrible verdad no había podido apartar la mirada de la chica. Quería atisbar a comprender cómo era posible que continuaran su vida con tanta normalidad, como si no hubiera pasado nada. Él vivía lejos de sus padres, y aunque hablaba con ellos por teléfono de vez en cuando, se le hacía muy difícil a veces su día a día sin su verdadera familia.
—Perdona —contestó Gabe apartando la mirada. Ya habían atravesado el portal y se encontraban de nuevo en su casa.
—Vaya, ni siquiera te has molestado en ocultar que me estabas mirando. ¿Qué te ocurre, humano? ¿Acaso esas dos brujas elementales te han lavado el cerebro?
—Mira, Liz, si buscas discutir hoy no va a ser posible. Estoy demasiado cansado. —Y no mentía, no se sentía con fuerzas de pelearse con ella sabiendo la verdad.
Y dejando a la bruja estupefacta por semejante contestación, salió de la habitación. Al llegar al salón se encontró con Alex en uno de los triclinos, tranquilamente tumbada leyendo un libro con Luxen dormitando en sus piernas. En cuanto notó la presencia del chico se levantó a saludar.
—¡Hola! ¿Qué tal el día? —"Los padres de Liz y Alex fueron asesinados." Esa frase volvió a resonar de nuevo en la mente de Gabe al ver la sonrisa de Alex. ¿Sería una sonrisa verdadera o una que intentaba encubrir un dolor demasiado profundo?
—Bien, muy bien la verdad —contestó ocultando lo que verdaderamente estaba pensando.
"Si ellas no han querido decírmelo, y quieren aparentar normalidad, no soy quien para ir en contra de su decisión" se dijo a sí mismo, intentando apartar de su mente todos esos malos pensamientos que le rondaban.
—Quiero que me lo contéis todo, pero mientras cenamos. La comida ya está lista —dijo Alex dirigiéndose a la cocina.
—¿Y la tía Dolly? —preguntó Liz.
—Está en una reunión del Consejo, otra vez. Me ha dicho que cenáramos sin ella.
Liz asintió conforme, y tras cambiarse mientras Alex calentaba una deliciosa quiche de verduras, los tres con Luxen y Orión se pusieron a cenar. Alex sometió a Gabe a un intenso interrogatorio, muy interesada en saber al detalle todas y cada una de las cosas que había visto. Alguna vez que otra preguntaba a Liz en lugar de al chico, sobre todo por cosas de su tía y de su prima, aunque no hizo demasiado hincapié en ellas.
ESTÁS LEYENDO
Las Dos Brujas: Hermanas
Viễn tưởng¿Qué pasaría si descubrieras un secreto oculto durante milenios?, que de repente tuvieras que vivir con unos completos desconocidos los cuales ni siquiera son humanos (aunque lo parezcan), que toda tu vida cambiara por estar en el sitio equivocado e...