Todo lo relacionado con los "animales que nos forman" quedará vetado a aquellos que aún no hayan alcanzado esa magia. Se hará un compendio secreto con toda la información acerca de ellos recogida en todos los libros ya existentes y futuros.
2º Tratado: Organización, Leyes y Costumbres.
El Consenso de todos los brujos.
La casa de las Lionheart nunca había estado tan callada. Bassam y Cassandra habían conseguido avisar a la tía Dolly, y ésta inmediatamente se había aparecido en la Embajada y recogido a sus sobrinas y a Gabe. Ya en casa, Alex había despertado, confundida y desorientada, pero su tía no le había dejado ni un solo minuto de descanso y se había encerrado con ella en su despacho. Dejando a Gabe y a Liz fuera en el pasillo infinito, confusos y atemorizados de qué era lo que podía estar ocurriendo.
Según las horas pasaban, el nivel de aburrimiento de Gabe había ido aumentando de manera proporcional a la ansiedad de Liz: ¿podía su hermana estar en peligro? ¿Podía esa pelea haber desencadenado algo desconocido?, o peor, ¿algo que tuviese relación con la magia negra? De todas formas no podía evitar sentirse horriblemente culpable, y pensar que su hermana tenía razón, solo sabía hacer sufrir a los demás.
"Ojalá pudiera ponerme en su lugar. Me odiaría para siempre si le pasara algo a mi hermana. Tenía razón en todo, soy una estúpida cabezota" hablaba mentalmente a Orión
"Mi señora, no tiene que ser tan dura con usted misma. Si pasara algo grave, estoy seguro de que Lady Dolores nos lo comunicaría en seguida. Todo se arreglará, ya verá"
Gabe había acabado sentado en el suelo mirando alternativamente a la puerta del despacho y a la bruja guerrera. Habría esperado que el mal humor de Liz hubiese hecho acto de presencia al verse encerrada fuera, ajena a todo lo que estaba ocurriendo, y sin embargo no había sido así. La veía triste y ¿arrepentida? Eran nuevas emociones que jamás había visto en la bruja guerrera, y estaba a la vez sorprendido y preocupado, sin saber muy bien cómo reaccionar.
Cada uno encerrado en sus pensamientos, no pudieron evitar sobresaltarse cuando la puerta del despacho se abrió, y la tía Dolly apareció con su ya conocida expresión de seriedad. Gabe se levantó corriendo ante su presencia y esperó atento a lo que tuviera que decir. La tía Dolly los miró alternativamente, hasta finalmente estancar su mirada en Gabe.
-Gabriel, si haces el favor de pasar, necesito hablar contigo.
-¿Conmigo? -preguntó sorprendido el aludido
-¿Con él? -preguntó Liz decepcionada.
-Si, Gabriel, y ha sido una tarde muy larga así que te rogaría que no te demorases demasiado en poner tus piernas en marcha y pasar al despacho. -La tía Dolly se hizo a un lado para dejar pasar al muchacho, y este entró sin rechistar, pero no pudo evitar echar una última mirada a Liz, y al hacerlo se encontró con el rostro más decepcionado y avergonzado que había visto nunca. De veras que se sentía culpable por todo lo que había ocurrido, pero antes de que pudiera girarse y decirle algo, la tía Dolly volvió a cerrar la puerta a sus espaldas.
-No te preocupes por ella -dijo la tía Dolly en un tono mucho más cansado que el que había utilizado antes; también había visto la expresión de Liz-, lo entenderá en su debido momento.
- ¿Pero por qué no puede saberlo ya?
-Porque es un secreto -dijo otra voz conocida. Gabe se topó de frente con una Alex radiante, acompañada de Luxen que mostraba una expresión de alivio, todo lo contrario de como esperaba encontrárselas después de todo lo que había ocurrido.
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Las Dos Brujas: Hermanas
Fantasy¿Qué pasaría si descubrieras un secreto oculto durante milenios?, que de repente tuvieras que vivir con unos completos desconocidos los cuales ni siquiera son humanos (aunque lo parezcan), que toda tu vida cambiara por estar en el sitio equivocado e...