Ni cambios ni devoluciones

Capítulo Treinta y cuatro

Tyler había aparecido quería llorar porque yo era la imbécil porque no fui lo suficientemente responsable como para irme cuando debí, y porque no supe cuidarme apropiadamente de pervertidos como Adam, Tyler estaba enfadado y lo entendía sino quería hablarme.

Tyler empujo a Adam lejos de mí y en ese preciso momento desee que Tyler no estuviera allí porque estaba demasiado enfadado, empezó a pegarle a Adam y yo le gritaba que parase pero no me hacía caso y yo no estaba en condiciones de meterme en esa pelea a ese paso le iba a matar. Nunca le había visto así, ni siquiera con Jason, Tyler parecía otra persona que daba miedo, no sé de donde salieron los chicos pero agradecí su presencia porque a duras penas lograron separar a Tyler de Adam.

-Adam, solo te lo voy a decir una vez no vuelvas nunca a acercarte a Han porque en ese momento me asegurare de acabar lo que he empezado y no tendrás la misma suerte que hoy, me conoces bien sabes que cumplo con mi palabra-Tyler me cogió de la mano y me arrastro lejos de allí pero no me hablo, ni siquiera me miro a los ojos su mano temblaba y estaba llena de sangre tanto de Adam como suya.

Yo empecé a llorar porque por mi culpa él estaba herido, no le hice caso y todo acabo así, no pude evitar abrazarlo.

-Si no quieres hablarme lo entiendo pero...

-Han, ¿podríamos llegar a casa? Realmente no quiero hablar hoy, no quiero decir ninguna gilipollez, nada que pueda herirte.

Me quiere hasta enfadado y cuando la he cagado de una forma tan descomunal, seguimos en silencio caminando y cuando llegamos a casa él se fue a su casa y yo pues me fui a la mía, está muy enfadado, no me va a hablar, no se durante cuánto tiempo pero no lo hará.

No pude dormir bien y cuando me desperté no sufrí ningún dolor más que el de la culpa. Tenía que hablar con Tyler pero no encontraba forma de hacerlo, no iba a llegar a su casa diciendo "Hey, Tyler, lo siento anoche fue una noche muy interesante y acabo muy mal". Esas no eran formas. Pero acabe frente su puerta quizás si fuera chica las cosas fueran más fáciles le daba una rosa y tan felices, una cena, un "te quiero", una canción dedicada... todo sería más fácil, pero es Tyler no sé como hacerlo, es difícil saber si ya está bien... creo que no lo está pero será peor si lo dejo para más tarde.

Toque la puerta y no hubo respuesta, volví a tocar y no hubo respuesta... ¿Tyler pero que te pasa?

- ¿Qué quieres?

-Hablar.

- ¿Ya estás lo suficientemente bien como para hablar?

-Siempre he estado bien para hablar.

-Anoche no lo parecía.

- ¿Puedes abrir la puerta? Creo que con una puerta de por medio no es la mejor forma de tener una conversación.

El abrió la puerta y se fue a sentarse al sofá, las cosas no están tan mal. Yo me senté al otro lado para dejarle su espacio, y me puse a pensar como pensar.

-Lo siento, anoche por mi culpa saliste herido.

-Creo que él está más herido que yo.

-Adam me da igual, debí llamarte como me pediste pero no quería molestarte, estaba a punto de irme pero el apareció y paso lo que paso.

- ¿Y por qué no contéstate ninguna de mis llamadas?

-Porque...-como le decía yo a Tyler que me habían dicho como era y eso estaba cerca de ser más cierto que mentira.

- ¿No me vas a contestar?-me estaba mirando fijamente muy serio, esperaba una respuesta yo no sabía cómo decírsela-. Han, si no quieres decirme nada no veo razón alguna para continuar con esta conversación.

-Espera no te pongas a pensar nada raro porque anoche no pasó nada, había una chica que decía ser tu exnovia y también me dijo que tu tratabas a las chicas como juguetes que las hacías tocar el cielo pero que cuando conseguías lo que querías las dejabas a su suerte... esa chica dijo que en un año ya no estaría contigo.

Él estaba en silencio mirándome y yo estaba nerviosa, una mirada tan penetrante que hace que te sientas incapaz de esconder nada, Tyler me da miedo a veces porque no lo conozco todo de él, hay muchas cosas que no se pero él sabe todo de mí y es capaz de descubrir todo.

-No puedo creerme que le hayas hecho caso a una chica dolida, a veces eres tan segura pero otras veces eres tan insegura que tengo miedo de que hagas alguna estupidez por mí-se levantó y se paró frente a mí-. Levanta, panda, no sé cuándo vas a dejar de tener esas ojeras-dijo sonriéndome y yo me levante de un salto y lo abrace.

- ¿No vas a jugar conmigo y dejarme por algún sitio sola y abandonada?

- ¿Eres tonta? Yo soy el que tiene miedo de que te canses de mí y te vayas, no te he dicho ya mil veces que eres lo más importante de mi vida.

-Te amo Tyler.

-Yo también te amo Han, deja de llorar anda.

-Es que tu no lo entiendes yo no quería que pasara eso, yo no quería que te pasara nada, Adam es un gilipollas un amigo no hace esas cosas.

- ¿Es tu amigo?

-Antiguo compañero de clase pero ya no quiero que se vuelva a acercar a mí, no quiero volver a verte hacer esas cosas.

-Siento mucho que vieras eso.

-No, yo lo siento por ser imbécil.

-No digas esas cosas Han.

- ¡Por eso no quieres hacerlo conmigo! ¡¿Por qué te vas a cansar de mí y ya no me vas a querer igual?! Yo no quiero que te vayas.

-Han, dios mío no lo hemos hecho porque no hemos tenido la ocasión, no quiero que tu primera vez sea en un baño o que sea algo tan doloroso que después te arrepientas de haberlo hecho conmigo, soy yo quien tiene miedo de cagarla.

-Pero no vas a hacer nada malo, no peor de lo que puedo hacer yo.

-Han, no me creo que estés intentando llevarme a la cama.

-Se supone que tú eres el hombre de la relación Tyler, no dices que eres un badboy, ¿dónde está mi sexo salvaje?-no podía creer que hubiese dicho eso nos miramos a los ojos antes de empezar a reírnos.

- ¿Sexo salvaje? ¡¿Qué cosas pueden pasar por esa cabeza tuya?!

-Si tu estas en ellas todas las que sean posibles.

- ¿Entonces quieres que este badboy te dé sexo del bueno por tu primera vez?

-Te ha costado mucho decidirte-le bese como si mi vida dependiese de ese beso, a veces me costaba creer que yo me había vuelta tan adicta a él.